tag:blogger.com,1999:blog-12380853227381446942024-03-05T09:32:46.245-08:00la Chispa del ZurquíUnknownnoreply@blogger.comBlogger29125tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-23387585407947674002009-08-13T12:52:00.000-07:002009-08-13T12:54:36.785-07:00SÓCRATES CON PELUCAPágina Quince<br />Laurencia Sáenz <a title="Click para escribirle un email" href="mailto:laurenciasaenz@gmail.com">laurenciasaenz@gmail.com</a><br />¡Qué monada!<br />Filósofa<br />Tras una sesuda capacitación de 66 horas, los aspirantes a diputados del PAC fueron objeto de un curioso experimento. “Para la última prueba, cada aspirante recibió un espejo, y se le entregó una pregunta que decía: ‘Véase en el espejo y responda con toda honestidad: ¿ve usted en ese espejo a un/a diputado/a PAC?’ ”. ( <a href="http://sitio.pac.cr/" target="_blank">www.pac.or.cr</a> )<br />Rascándose la cabeza, la buena gente PAC debió tomarse la prueba con la mayor seriedad.<br />Más de uno puede haberse asustado. Pero, como dice su líder, la gente PAC, es “genta valienta”. En la superficie de cristal, algún/a aspirante habrá logrado reconocer la familiaridad de esa cara, con su distintiva verruga, sí; con ese labio velludo, es cierto; con esa protuberancia de nariz, pero no menos cara, al fin. “¿Tendré la cara?”. Es la pregunta fundamental que todo aspirante PAC debe hacerse.<br />En el coqueto reflejo, otros, muy orondos, se vislumbrarían sentados en el trono de la curul, depositando cientos de mociones en un carretillo, que podría servir también de modesto carruaje –porque la gente PAC es ahorrativa y austera–.<br />El más original de todos se habrá coronado la mollera con un peculiar sombrero de fieltro. Orgulloso de su singular atavío, y para desconcierto de la sobria asamblea, tamborileando, triunfante, sus puños contra el pecho, habrase exclamado, con toda honestidad: “¡¿No sería yo una monada de diputado?!”.<br />^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^<br /><br /><strong><span style="font-size:130%;">¿FILÓSOFA?</span></strong><br /><br /><div align="right"><strong><em>Claudio Monge Pereira</em></strong><br /><br />Desde que entró al aula nuestro joven profesor de filosofía, haciendo desplantes y taconeando como un vaquerito de cantina del Oeste, supe que era un cretino; un simple y vulgar destitulado que apenitas daba sus primeros saltitos de sapo académico. Al entrar dijo, inflamado como batracio en charco nuevo: “¡Soy filósofo!” Seguro esperaba que le aplaudiéramos, pero eso no sucedió porque su carita era más bien de laurencio sin lauros.<br /><br />Ese mismo día, durante mi recreo largo de 15 minutos, fui a la Biblioteca del colegio a buscar en un diccionario el significado de la palabra FILOSOFÍA. En síntesis, salí de allá repitiendo simplemente: ¡AMOR POR LA SABIDURÍA…AMOR HACIA LA SABIDURÍA…APEGO A LA SABIDURÍA….EL ARTE DE PENSAR….PENSAR!<br /><br />Durante la segunda hora de nuestra primera lección de Filosofía, o sea, de nuestro primer encuentro académico con el arte de pensar, con sólo mirarle aquella cara al bisoño y escucharlo, no quedaba más alternativa que aceptar la primera gran frustración colegial a los 14 años de edad.<br /><br />La anterior anécdota se me vino al recuerdo luego de leer la notilla que precede esta reflexión, firmada por una Lucrecia que no me suena como grande pensadora o escritora; ni mucho menos, luego de leerla, como amiga de la sabiduría. Al contrario, me suena como tremenda chupamedias de la Nazi, porque si le dan cabida a tantas toneladas de seso puro en su página quince, algunas patas sucias tendrá allí adentro.<br /><br />Luego de soportar la lectura de su profundo comentario, no me quedó más que recordar a aquel “filósofo” de mis años colegiales, del cual, obviamente, no aprendimos nada ni útil ni bueno. Se me ocurre pensar que si ella se mirase en un espejo, homologando el ejercicio que ella caricaturiza, no verá en su superficie a un Sócrates con peluca; quizás sí, a un pespuntes en la etapa de preestreno cerebral.<br /><br />Mi padre, zapatero y relojero oficial de los Barrios del Sur, al regresar yo de Europa con sendos títulos universitarios, me preguntó el mismitico primer día de estancia en casa: “Mijo…y usted, ¿Qué estudió durante esos siete años por allá arriba?<br /><br />Yo sabía que papá hacía gala de una inteligencia exquisita, y de una ironía sabia a toda prueba. Por eso suponía que con alguna cosa me saldría para no variar su costumbre de andar enseñando siempre.<br /><br />Le contesté: “Papá…yo estudié Pedagogía, Historia y Sociología…”<br /><br />No me permitió continuar y de una espetó: “¿Y eso…aquí en San Sebastián con qué se comería, decíme, aquí en estos Barrios del Sur; ahí en Aguantafilo?” Antes de que yo me pusiera a balbucearle respuestas, y probablemente al mirar la cara estupefacta del profesional que choca con la primera y única realidad verdadera, al iniciar ese escabroso camino de la SABIDURÍA de carne y hueso, me pidió que escuchara con calma la historia original de su pueblo natal, y el mío también; Grecia.<br /><br />“Un finquero muy rico de Grecia – dijo – mandó a su hijo mayor a estudiar a Europa; a Italia. El hijo duró por aquellas tierras de arriba como diez años. A cada rato recibía cartas de su hijo pidiéndole más dinero, porque allá el estudio era muy rudo y debía comprar muchos libros. Además, la vida era muy cara y todo costaba un ojo vivo. Aquel finquero ya casi quedaba en la ruina y su hijo nada que regresaba titulado. Entonces, decidió no enviarle más nada para presionarlo a regresar; asunto que sucedió muy pronto. Estando ambos frente a frente, el viejo le pregunta al hijo: “Mijo…y usted, ¿Qué estudió durante esos diez años por allá arriba?”<br /><br />“Papá, dijo el hijo, yo ahora soy doctor…en Lírica…”<br /><br />“Y eso mijo…aquí en Grecia para qué sirve; aquí entre cañaverales y tierras coloradas con cafetales…decíme…para qué diantres sirve la Lírica…”<br /><br />“Su hijo balbuceaba y salió con esto”, continúa mi papa:<br /><br />“Papá…la Lírica es una ciencia que nos enseña la mejor manera de escribir y decir las cosas, con elegancia y belleza; con profundidad. Por ejemplo: ¡Qué altas y lejanas que están las estrellas…ay pero qué bellas…ay pero qué bellas..!”<br /><br />Aquel finquero casi al borde de la ruina, lo miró fijamente y le dijo con firmeza: “Hijo mío…si de tus estudios este es el fruto…¡ay pero qué bruto…ay pero qué bruto!”<br /><br />Moraleja: Si un filósofo o filósofa dice que lo es, por escribir contra el PAC en la página quince de la NAZI, mejor enviemos a nuestros retoños a estudiar LÍRICA allá “arriba”; aunque nos dejen al borde de la ruina monetaria.<br /><br /><br /><br /><br /><br />San Isidro de Heredia, 12 de agosto de 2009 </div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-25857465586694063222009-04-18T23:18:00.000-07:002009-04-18T23:22:01.377-07:00RANAS DE SALTO QUÍNTUPLE<div align="justify"><br /><span style="font-size:180%;">QUE LAS RANAS DE MAINOR SEAN PLAGA</span><br /><br /><strong>CLAUDIO MONGE<br /></strong><br /><br /><br />Seguro que todos hemos mirado las múltiples expresiones de las personas cuando se topan de sopetón con una rana: asombro, pánico, asco, repulsión, deseos de salir corriendo…y hasta algún tipo de agresión en “defensa propia”. Sólo los niños no se intimidan frente a una rana…aunque su salto sea múltiple y más que mil veces múltiple. Los adultos nos apartamos de su camino, si podemos, por estar al aire libre; pero si es dentro de la casa marcamos el 911 de la estación del miedo para que nos envíen una escoba ancha y con ella barrer a la intrusa y enviarla lejos muy lejos. En algunas ocasiones, otras personas, las aplastan diciendo: “¡Primero aplastamos y luego preguntamos! En cambio los niños las abrazan y les dan el cuenco de sus manos como si fuesen cunas de arrullo, las llevan a pasear y hasta gritan admirados porque las encuentran bellísimas. Sé de algunos que las llevan a cabalgar sobre sus hombros, o las guardan en sus bolsillos y luego hasta las besan tiernamente como si fuesen novios. Algunos adultos no besarían una rana jamás, ni auque les dijeran que después del beso un ángel cachetón explotará sus sonrisas maravillosas para regalarnos el mayor de los tesoros: la felicidad permanente. Y esa reacción adulta es muy extraña para mí, porque he visto a mi generación pagar costosas entradas a un parque sólo para ver unas ranitas disecadas, o en el mejor de los casos, atrapadas en una pequeña y oscura pecera. Y hasta tienen que encender un foco para decir que las ven, y la verdad, no las ven ni por asomo. Y creen que un ruidito de rana que sale por un altavoz escondido es de verdad la cancioncita triste de una rana que perdió su libertad del bosque. Luego se van a mirar esqueletos y cocodrilos, y hasta se alegran cuando ven esparcidos por los suelos caparazones de tortugas de diversos tamaños. En cambio los niños, y por supuesto que las niñas también, porque sin ellas no seriamos nada de nada, o bueno, seríamos como arbolitos sin raíces, y sin hojas y sin frutos. O sea, no seríamos nada como ya dije. Entonces, decía, los niños sí se alegran mucho cuando se topan a las ranas del mundo o simplemente las van a buscar cuando pueden irse de paseo a algún lugar ya casi inexistente. Hay muchos niños en este planeta que sí han besado ranas, aunque estas salten quíntuplemente, y la mayor de las sorpresas es que luego de besarlas descubren de una vez por todas que ellas son más bien espejitos mágicos donde uno se puede mirar y saber, también de una vez por todas, que los príncipes encantados somos más bien los seres humanos grandes y pequeños que el padre Celestial trajo a germinar a este mínimo nido cósmico que llamamos Planeta Tierra. Entonces, ahora si les digo, que todo esto me pasaba por la cabeza cuando comencé a leer este libro extraordinario de Mainor, cuya lectura me puso a saltar tanto que al final no sabía en realidad si yo estaba en el corredor de mi casa o ya metido entre las páginas del libro. Pero la verdad es que estaba tan feliz que eso no me importaba. Es más, ya he visto tanto en esta vida, que más bien deseaba estar metido en el libro y quedarme allí dentro viviendo y saltando como rana; o columpiándome de una nube o deslizándome como olomina resbalosa por el lomo azucarado de un arco iris. La puritica verdad sólo eso quería, pero a la vez sabía que no podía porque hoy debía venir a este lindo y acogedor lugar, a compartir con ustedes mis sentimientos. Entonces no me quedó más tren que este de venirme, o más bien salirme del libro de Mainor para pedirle a todo el mundo que lo compre y lo lea, y que aprovechen para que este Niño Gigante que es un maravilloso escritor adulto, les regale una dedicatoria. No sé si ustedes ya lo saben, pero de todas maneras yo se los cuento: cada dedicatoria que Mainor Arias Uva escribe es, por si sola, un bello poema. Siempre he creído que si juntásemos todas las dedicatorias que este maravilloso Niño Gigante ha escrito en sus libros para sus amigos y amigas, lograríamos armar un extraordinario libro cargado de metáforas y de músicas diversas. Pero además, cuando les comparto este ex secreto, es que sé que de ahora en adelante un libro de Mainor con su dedicatoria, será un tesoro inigualable: ¡Será como tener a Cocorí diciendo nuestros nombres con la voz de don Joaquín, o a Marcos Ramírez hablándonos con la voz proletaria de CALUFA. También a Tío Conejo imitando la dulcísima voz de la Niña Chavela; y digo además, aunque Mainor se cohíba, que será también como tener a Tom Sawyer y a Timur y su pandilla corriendo por nuestras casas. Yo, desde que lo conozco, lo persigo para que me firme sus libros, y algo más, pero no se lo cuenten a él: hasta tengo dos ejemplares de un mismo libro dedicados y firmados por su misma mano. A menudo leo sus palabras para que mi corazón agarre más fuerzas y siga esta lucha sin fin para alcanzar la justicia en este mundo.<br /><br />En la obra de Mainor encontraremos sólo bueno, como decía Lalo, el vendedor de frutas de mi Escuela: cada poema es como un pedacito de coco jugoso, de esos que hasta se les miran por su reverso las mínimas carreteras que Dios traza en ellos para que nuestro paladar no se extravíe. O como manguitos celes de esmeralda, de esos que con un puchito de sal saben a Mamá. Cuando uno va leyendo no desea pasar a la página siguiente, porque termina enamorado del poema que acaba de leer, es cuando descubrimos que la Poesía que Mainor construye está hecha de una masa especial, con una sal al punto para cada paladar, y con un doradito de esos que sólo las abuelitas mayores saben cuando sacar del horno crujiente. Si, Mainor nos enamora de las ranas, de las lapas, los pericos, los delfines, las ballenas, los perros, los gatos, las piedras del río, las pocitas con su diminutos remolinos para zancudos juguetones, las montañas, las nubes, la luna, las estrellas, las mariposas hechas azulejo en el cielo, de los niños de la calle, el sol, del abuelo que volaba sobre robles amarillos y que ahora se cuelga de las ramas horizontales del jocote para que el planeta sea más dulce y rico. <br /><br />Mainor es un escritor eufórico, el dios de su pecho no puede descansar nunca porque él lo tiene trabajando noche y día. Su euforia es contagiosa, es la mejor religión que yo conozco y practico. Dios ama a este Niño Gigante y lo alimenta, como lo hizo con Jorge Debravo en otros tiempos. Por eso Jorge decía que Dios lo amaba. Claro: ¿Cómo no va a amar Dios a estos extraordinario seres humanos que abren su boca y salen arco iris entre sus labios, o abren su corazón y ya las mesas del mundo tienen pan tibio y fresco para todos? Por eso digo que Mainor es un escritor eufórico, desatado de todo egoísmo terrenal y con una mirada poética que no puede ocultar ese ejército de luciérnagas que se tragó desde el vientre de su madre. Cuando uno lee las esculturas que este poeta esculpe con su alma, siente que caminar por la montaña con él siempre será luminoso, aunque sea de noche encarcelada. En esta obra, hasta el tema que pudiese ser disfórico o estridente, lo descubrimos dicho con amor y suavidad.<br /><br />Yo hago el ejercicio espiritual de leer estas ranas de salto quíntuple en voz alta, para mis nietos y para mí, y para todas las criaturas del mundo que me rodea allá arriba en San Isidro de Heredia, donde el lenguaje del Zurquí se mete por mis ventanas y me fortalece.<br /><br />Oigamos a Mainor hablándonos, así salteado, que de por si su escritura es como la música de Mozart, que se puede escuchar y vivir de adelante hacia atrás y viceversa. Estoy seguro: luego de conocer estas ranas que Mainor ha logrado reunir para nuestra dicha, el niño que vive en los adultos renacerá y querrá con nosotros salir a saltar por el Universo.<br /><br />“Las ranas vienen de los centros flexibles de los ríos y las pozas. De allá se desprenden con el sol naciente, y al pasar por las cascadas se vuelven hijas del arcoiris…”<br /><br /><br />“Las ranas tienen mucho que contarnos…”<br /><br /><br />DIOS…“ha puesto su Creación en nuestras manos y nos ha nombrado sus ángeles guardianes.”<br /><br /><br />“Lo mejor de todo es que Dios tiene una casa en tu cuerpo, que nunca cierra las puertas, y conoce tu voz, el nombre de tu mascota y tu silbido.”<br />“La naturaleza está llena de milagros. Eso somos, milagros.”<br /><br />“Los quetzales no se pueden domesticar porque mueren: se alimentan de libertad:”<br /><br />“Nuestros ojos tejen las palabras en el libro, hasta que la palabra “libélula” logra volar en tu memoria.”<br /><br />“…seguimos siendo artistas del gran concierto que con delicado acierto, toca infinitamente la vida:”<br /><br />“Cuando amamos a alguien, los conejos saltan hasta la luna y regresan con zanahorias tiernas para sembrar el planeta:”<br /><br />“Todo coincide con todo, porque hay un tejido palpitante en todo lo que vemos. En todo lo que hacemos está un ángel danzarín con cachetes abultados y zapatos ruidosos.”<br /><br />“Le canto a usted…”<br /><br />“Ahora calculo por sol y corazón, que ya estará despierta.”<br /><br />“Camina por el río, observa cariñosamente las iguanas, y se entristece en los rincones donde ya no fluye el agua.”<br /><br />“…de esta manera, en algún rincón, brota un río nuevo, o se levanta un quetzal desde su muerte.”<br /><br />“Cuando nadie la viene a ver, se pone su vestido de nostalgia y deja que se apague el fogón.”<br /><br />“No sé si lo sabes tú o lo sé yo, pero cada gato es un guardián de poetas y delfines.” <br /><br />“Una mosca verde piensa que los vidrios no existen y choca ruidosamente:”<br /><br />“A veces escucho ruidos debilísimos como conversaciones de microbios.”<br /><br />“Cuando estés triste no imites al avestruz, invítalo a correr con pensamientos de horizonte maromeros triquitraques y poemas de memoria.”<br /><br />De los niños dice: “Ustedes son ríos luminosos que vienen recorriendo nuestro planeta, y a las orillas de ustedes crecerán muchos árboles, gatos de cola colorida y tortugas, peces de nariz colorada, gallinas con cara de oruga, casas con manitas de pan en la ventana.”<br /><br /><br />“La montaña es un montón de poemas creciendo, con poema jaguar, poema ardilla, poema rana, poema de avispas azules y amarillas.” <br /><br />“Podríamos tener una biblioteca con balones de fútbol para escribir balones en el pasto, para cabecear la poesía, pararla con el pecho, y lanzarla con efecto hacia el centro de la cancha.” <br /><br />La Tía “piensa que lo milagros son asuntos cotidianos y silvestres, como el pan y las tortillas.”<br /><br />Y el ángel: “…se pone triste, cuando pregunta por los niños de la calle que a nadie esperan y nadie los espera.”<br /><br />“Las ranas de salto quíntuple refrescan sus panzas en el aire y aman la tierra…Estas ranas saltan hasta donde tú quieras saltar y escriben, cantan y cuentan, todo lo que tú quieras, cada vez que las acompañes con tus propios saltos de imaginación.”<br /><br />Y en las gallinas hablan “gallinastellano..”<br /><br />“Los delfines son ángeles que tiemblan de entusiasmo y desde sus ojos nostálgicos nos gimen una oración.”<br /><br />“Cuando uno sonríe se le estiran todas las esperanzas.”<br /><br />“El poema es un delfín que salta y resopla para mojar todas las caras de cualquier estado de ánimo.”<br /><br />“¿Cuál es el país de la lombriz, si todas nacen en la tierra.”<br /><br />“…queremos saltar para respirar aire del que se untó Dios para hacernos la nariz.”<br /><br />“Padecemos de lado a lado como una caminata de cristos.”<br /><br />“La melodía del jilguero es mi campana preferida.”<br /><br />“Uno tiene los poemas dentro del cuerpo, algunos en la piel, otros en el corazón dando vueltas como peces recién nacidos.”<br /><br />“¿Has visto las espirales en las yemas de tus dedos? Así es el Universo.”<br /><br />“El mundo está repleto de semillas y aves jubilosas:”<br /><br />“Somos una canción para arrullar este planeta. Un nido de la creación.”<br /><br /><br />En el Bosque todo es perfecto<br /><br />¡Qué magníficas son tus Obras, Señor,<br />Qué profundos tus designios! Salmo 91<br /><br /><br /><br />En el Bosque<br />Todo es perfecto:<br /><br />El Pájaro que canta<br />y comparte con todos su canción…<br /><br />La Raíz que se abraza de la Tierra<br />como si fuera un marinero<br />que no quiere zarpar.<br /><br />La Hoja<br />que cae suavemente<br />a nutrir el suelo con su muerte.<br /><br />El Viento que besa<br />todo lo que existe<br />y se enriquece con su beso.<br /><br />El Sendero de la Hormiga<br />y la Hormiga misma<br />que se dignifica en el trabajo.<br /><br />La Mosca<br />que abanica sus alas<br />para tormento del que pasa.<br /><br />La Serpiente que yace quieta<br />esperando que la inocencia o el descuido<br />la alimenten.<br /><br />El Árbol<br />que comprende mejor que los filósofos<br />la entrañable multitud de las alturas.<br /><br />El Arroyo<br />que viaja saludando al Mundo<br />y deja a su paso la Vida en sorbos repartida.<br /><br />La Nube errante<br />y la Nube detenida:<br />Ambas hermanas de la ausencia.<br /><br />La Liana<br />que conoce todos los recovecos del Arte<br />y zurce sobre el árbol manteles de barrocos avatares.<br /><br />El Escarabajo milenario:<br />Mínima curvatura del Cielo,<br />indiferente ante las miradas del intruso.<br /><br />El Cangrejo mágico<br />que aumenta la seguridad de su caracol<br />cubriendo su estatura con la hoja.<br /><br />La Guacamaya<br />que chilla su Libertad<br />mientras pinta el Cielo de arco iris.<br /><br />La Palmera<br />que camina sigilosa<br />cuando la luna duerme.<br /><br />El Mono<br />que sabe del espacio<br />más que los ingenieros y los doctos.<br /><br /><br /><br />El Jaguar que esconde su piel<br />porque el color de la luz<br />le prohíbe desatarse.<br /><br />El Río que golpea la roca<br />para demostrarle con espuma<br />su amor a las distancias.<br /><br />La Araña milenaria<br />que sabe mejor que nadie<br />cuándo los caminos duermen.<br /><br />La Mariposa Azul<br />que es el Cielo repartido entre nosotros<br />por el Padre Celestial de los pintores.<br /><br />El Coco<br />que guarda su océano diminuto<br />hasta que el hombre lo descubre.<br /><br />El Musgo húmedo<br />sosteniendo el recuerdo de la nube<br />hasta la noche.<br /><br />La Lluvia:<br />Madre de toda la Sabiduría<br />del Planeta.<br /><br />Y Todo lo demás<br />que mis ojos limitados no ven<br />ni mis sentidos sienten es Perfecto,<br />la Perfección de Aquel que moldeó<br />mi diminuta arcilla y me dio su SOPLO.<br /><br />Por eso digo con este corazón<br />que me sostiene en pie frente a tanto Portento<br />que en el Bosque Todo es Perfecto…<br /><br />Sólo mi paso es torpe<br />y pisa pesadamente las alfombras<br />que ÉL para mí construye…<br /><br />Yo camino por él atrofiando su Canción<br />con mis afónicas notas<br />de martillo torpe y pobre,<br /><br />Y sueño mi sueño ancestral<br />abrazándose a los árboles<br />como lo hace la Nube…<br />Pero sólo logro<br />que la Perfección del Bosque<br />aumente la ignorancia que me habita.<br /><br />Sigo caminando<br />y el misterio que llevo pesa<br />como una mochila repleta de lingotes.<br /><br />Y la sed me invade…<br />Y con sólo abrir los labios<br />el Mar resucita su recuerdo<br />y las Olas que rompen en mi mente<br />son Lluvia libre y soberana.<br /><br />Y cae la tarde…y en el Bosque todo es Perfecto,<br /><br />Y Nosotros también podríamos serlo;<br />como la Hoja que se pudre<br />para darle Vida a la Nueva Vida,<br /><br />o como el milenario sueño<br />del PADRE CREADOR<br />del Universo.<br /><br />“Un libro es una orquesta que espera nuestra llegada para iniciar su gira artística.”<br /><br />“Mi poema es tu poema cuando le das la bienvenida.”<br /><br />“Cuando uno sonríe con un libro, se abre una fiesta en el corazón de la palabra.”<br /><br />“Cuando uno encuentra en un libro un motivo para convivir, la tierra se llena de presencia…”<br /><br />Entonces, ¡Gracias por la suya hoy aquí en este acto, y gracias a Minor, que nos une para convivir estas palabras!<br /><br />San Isidro de Heredia, abril 2009 </div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-67223214777635386822009-03-17T22:34:00.000-07:002009-03-17T22:36:32.135-07:00¡ COMBO NO...ICE SI !<div align="justify"><span style="font-size:180%;"><strong>Patrulla Nocturna</strong></span><br /><br /><strong><span style="font-size:130%;">Claudio Monge Pereira</span></strong></div><p><strong><span style="font-size:130%;"> </p><div align="justify"><br /></span></strong>Llegué tardísimo, casi a la medianoche; tan cansado que sabía a ciencia cierta que no dormiría ni aunque me pusieran por delante la cama de la Reina Victoria. Pero venía feliz y realizado, después de la última jornada de esa primera etapa de lucha ciudadana contra el tal “Combo” del ICE.<br />Se había firmado el famoso documento de arreglo entre las partes allá en las instalaciones del Tribunal Supremo de Elecciones, y todos marchamos tranquilos hacia nuestros hogares. Quedaban atrás largas semanas de lucha encarnizada contra la voracidad de los ricos de este país y de los políticos vendelotodo, buenos para nada bueno; superficiales y demagogos como los curanderos colombianos que han invadido las radioemisoras nacionales con programas para ingenuos.<br />Llamé a Radio Monumental, al programa “Patrulla Nocturna” del periodista José Gabriel Durán Jiménez, y hablé durante más de media hora acerca del significado de esta lucha para enterrar al combo de los políticos - empresarios. Hablé lo más claramente posible, midiendo cada palabra y cada frase; con la intención pedagógica de dejar alguna huella positiva en ese espacio para trasnochadores bellagente. Pero antes de hablar, hice un recuento mental de todo lo vivido en esas semanas, ya que debí esperar casi una hora en línea para poder salir al aire. <br /> Recordé la noche del viernes de Ochomogo: yo venía llegando de San José, era tarde; sin deseos de hacer nada más por ese día me tumbé sobre la cama. Me coloqué los habituales audífonos radiales y escuché en vivo cómo estaban apaleando a los agricultores que habían bloqueado ese paso tan importante. Supe que los periodistas de la emisora trasmitían su visión desde las imágenes de la televisión nacional. Me tiré de la cama cargado de cólera, y al mirar esas grotescas agresiones contra nuestros campesinos, sólo sentí deseos de salir volando hacia Ochomogo a enfrentarme a la policía. De hecho lo intenté pero no me dejaron salir de la casa: mis hijas, como si fueran un ejército inmenso, no permitieron que yo saliera a jugar de Quijote. Lloré como un inútil mi impotencia y mi limitación. Amanecí sentado jurando no escatimar nada para detener toda la porquería neoliberal que se había envalentonado para meterle sus garras, aún más, al pueblo costarricense. ¡Y así lo hice!<br /> Por la mañana busqué entre mis herramientas aquel viejo casco amarillo que compré años atrás para protegerme de accidentes, le pegué la calcomanía de “Icetico” al frente y salí hacia San Pedro. Entré a la Universidad con ese casco puesto y todos se volteaban a mirarlo, y descubrí que esas miradas eran de aprobación. Ya no me lo quitaría más, hasta el día en que el Combo mordiera su polvito de derrota. <br /> Ya ese mismo día por la tarde, aparecieron otros cascos que los universitarios iban a comprar en las ferreterías de San Pedro; y poco a poco ese casco amarillo se convirtió en el pabellón de los que se la habíamos jurado al gobierno vendido del señor Rodríguez. <br /> Todo lo que hicimos giró alrededor del proyecto de ley que se discutía en la Asamblea Legislativa: lo leímos y lo destruimos artículo por artículo. Nos convencimos de que su cara oculta era la privatización de un Patrimonio Nacional; era su entrega a las manos de esa nueva nomenclatura de riquillos nacionales que nunca ha trabajado y que no sabe qué son los cayos. Convencimos al estudiantado de que su lugar estaba en la calle, al lado de los trabajadores del Instituto Costarricense de Electricidad y de los agricultores nacionales; y luego todos nos largamos para los centros de información a recibir más argumentos contra el Combo y a sumarnos a ese nuevo ejército popular que se aprestaba a combatir al nuevo filibustero.<br /> Entonces, convertir el parque de Montes de Oca en auditorio fue una hermosa tarea, y desde sus bancas hacer curul popular y esclarecer a todos los caminantes las intenciones verdaderas de ese proyecto antipopular y egoísta. Luego saltar a las aceras y a la Avenida Central a repartir hojas sueltas y volantes a los conductores de vehículos públicos y privados. Y convencerse ahí mismo que contra el bloqueo mental de nuestros gobernantes se debía aplicar el bloqueo de calles importantes. Así fue como declaramos la Rotonda de la Hispanidad, trinchera universitaria de artillería intelectual contra el Combo de privatización de nuestras riquezas patrimoniales. ¡Y la hicimos vibrar con todo y su horrible mall!<br /> De nuevo las canciones de los años sesenta sonando por los altavoces de las tumbacocos sindicales y estudiantiles; y algo más: los grupos de rock latino, argentino y mejicano, agitando los corazones de viejos y jóvenes con sus mensajes de amor y disconformidad. Ya no eran Quilapayúm y Alí Primera, ni los Mejíagodoy de toda jornada, ni Sólosilvio, ni el breve espacio en que no estás de Siemprepablo; eran otros pioneros en las calles del año 2000 los que con un nuevo lenguaje también le jalaban las orejas a los usurpadores de utopías y de metáforas; para que no fueran tan descaradamente comemierdas.<br /> Por un lado los vendedores ambulantes, casi nicaragüense la mayoría, haciendo su agosto adelantado saciándole la sed y el hambre a los nuevos barricadistas del Ejército Amarillo de la Energía y la Comunicación; como diciéndonos: ¡Mirá compa, yo sé mejor que vos cómo es esta cojonada de enfrentarse al gobierno!, ¡No ves que a mí estas luchas allá en Nicaragua me catapultaron hacia Costa Rica y ahora soy hasta empresario en miniatura; gracias al Sandinismo irresponsable. Y por el otro, los propietarios del Mall San Pedro deseando que se derrumbara el puente sobre nuestras cabezas; tan llenas de ideas contra la venta de la patria y tan seguras de que sólo con barricadas y movilizaciones masivas, se podía detener a los que han fabricado clavos de oro con la tal globalización y modernización del estado costarricense.<br /> Muchachas y muchachos ingresando a la Rotonda desde las calles aledañas a la Universidad de Costa Rica, a sumarse a los trabajadores afiliados al Sindeu que iniciaron esta iniciativa de bloquear ese lugar tan importante para atraer la atención de los que viajan a sus trabajos o sus negocios. O mejor aún, para establecer un centro operativo visible con la intención de que se incorporaran a esa lucha los miles de estudiantes de los colegios y escuelas vecinos. Para que los empleados de tantas oficinas aledañas se metieran en la fragua, y sobre todo los del edificio del ICE, aún timoratos y a la expectativa de lo que calcularan sus dirigentes.<br /> Cientos de volantes de todos los colores, explicando los alcances de cada artículo de la combatida Ley, adornaban los bolsillos de los manifestantes como un arco iris de esperanza. Metros larguísimos de tela amarilla y tijeras confeccionando lazos y todo tipo de signos externos para la gente. Llantas viejas traídas de cuanto lote sucio hay alrededor de la Universidad; además de palos, piedras y cuanta porquería yace por esos lados invisibilizada por arte de la Municipalidad de Gabriel Zamora Márquez. Ramas secas, troncos, chatarra americana, botellas de todas las formas esperando la llegada inminente de la policía de don Rogelio Ram(B)os. Pintas que ahora se llaman graffitis, en todos los espacios posibles, demostrando la innegable calidad mental y espiritual de los enemigos del Combo. En suma, la Rotonda convertida en una enorme fábrica circular de sueños, en la cual hasta los locos inteligentes tenían su oficina.<br /> Marchas y caminatas, encerronas y “paros activos de información” en el famoso Pretil; gentes bien intencionadas en pie de lucha y los vivazos de siempre robando cámara y tratando de figurar a toda costa; gentes de todo tamaño y color manifestando su inconformidad contra un Presidente demagogo y su equipo de trabajo, igualmente mentiroso y descarado. Y descubrimos en todos esos espacios que no se trataba sólo del Combo del ICE: era la expulsión de todo el malestar y el odio que la gente estaba sintiendo contra este Gobierno de los ricos, más descarado y calculador que otros; cuyos voceros hacían gala de una ignorancia supina y de un desprecio olímpico hacia las opiniones populares. Se puede afirmar que era una especie de ahora me saco el clavo por todo lo que estos cabrones han venido haciendo contra el pueblo humilde. Pero también era la muerte descarnada de un campesino dando vueltas alrededor de la cara de boberto de un ministro bobalicón que no sabe ni multiplicar y que constantemente llamaba a los manifestantes “tontosútiles.” <br /> Muchos estábamos bien enterados de la esencia de tan nefasto proyecto, y otros tantos no lo conocían; pero eso no importaba porque lo realmente relevante era la incorporación de todos los sectores populares a esa lucha histórica y memorable. Sonaba en el aire la famosa respuesta que un campesino analfabeto, seguidor de Emiliano Zapata durante la Revolución Mejicana, le ofreció al periodista y escritor gringo John Reed cuando este le preguntó por qué se había enrolado en el Movimiento: “No lo sé. Sólo sé que siento algo muy lindo aquí en mi corazón.” Y esa era la enorme verdad del nuestro; innegable y clara como la certeza de que el Combo sería derrotado.<br /> Nunca antes en nuestro país se había desencadenado una Revolución de tal calibre, cuyos dirigentes éramos todos, con Partido o sin él, con Sindicato o sin él, con Federación o sin ella, con líderes o sin ellos. Una Revolución sin planes, totalmente espontánea y anárquica, en cuyos escenarios asumía el papel protagónico cualquiera que así lo quisiera. El fantasma del viejillo Marx deambulaba con su benévola sonrisa al lado de todos los revolucionarios ticos, y probablemente recordaba su vieja pero increíblemente exacta fórmula: Para que una Revolución triunfe, debe darse una situación revolucionaria, en la cual tanto las fuerzas objetivas como las subjetivas demuestren que han alcanzado su grado máximo de madurez. “¡Tome chichí!”, habría dicho cualquier copero apagased. Ahí estaban las condiciones objetivas saltando y brincando como los peces del villancico. Y aquel sentir muy lindo en el corazón del campesino mejicano era el mismo de miles de costarricenses. Y por otro lado, los sindicatos carentes de metas claras y de liderazgo reconocido en una guerra de hojas sueltas; algunas más llamativas por el color del papel utilizado que por su contenido. Fuerzas objetivas y subjetivas jugando mirón mirón donde viene tanta gente en las rotondas y en las calles. Toda Costa Rica convertida en un Gran Pretil. <br />Pero lo importante era la demostración de esa inconformidad acumulada, con una aplicación muy a la tica de la situación revolucionaria: “Cuando los de arriba ya no pueden y los de abajo ya no quieren, es el momento.” Por más represión y más policía carabinera, cualquier intento de imponerle algo indeseable a un pueblo con un reconocido índice de escolaridad, es una tarea suicida que se paga caro y recibe además, feria. No significaban nada las asoleadas terribles, hasta el despellejamiento de narices, orejas y toda parte corporal expuesta; frente al inmenso placer de esperar la caída de los traidores y vendepatrias. No hay cansancio físico cuando el espíritu rebosa de energía y sus comunicaciones con metas superiores gozan de un alto voltaje...<br /> Mientras esperaba mi turno al teléfono, recordé también al par de muchachos borrachos que me trajeron hasta el frente de mi casa. Ya yo literalmente no echaba: semanas de arrastrar los pies por toda la capital, comiendo copos con sirope y empanadas agrurientas, me habían debilitado un poco la doble tracción para subir hasta las montañas del Norte herediano donde vivo. Subía lentamente, pensando en el eterno algún día llego de los caminantes con experiencia; y repetía en voz alta versos de Machado y de nuestro Jorge y de Otto René y de Roque y de Neruda: “Puedo escribir los versos más tristes esta noche...”, “¿Hacia dónde debo huir que no sea mi propia alma, el alma que quería ser bandera en el retorno y que ahora quieren transformarme en trapo vil en este templo de mercaderes?”, “¡Vámonos Patria a caminar, yo te acompaño...”, “Yo no quiero un cuchillo en manos de la Patria...ni un cuchillo ni un rifle para nadie...”, “Bueno es saber que los vasos nos sirven para beber, lo malo es que no sabemos para qué sirve la sed.”<br /> “¿Para dónde la lleva ingeniero?”. Para la Mata de Café. “Usted es del ICE...¿Verdad?” Entonces recordé que llevaba bien colocado mi casco amarillo con la calcomanía de Icetico al frente. Soy defensor del Ice les dije, y al rato viajaba cómodamente sentado en el asiento trasero de un confortable automóvil. “No hay que aguantar ni mierda mi viejo con esos cabrones, hay que darles duro porque ya ni guaro se puede tomar...dicen que van a privatizar la FANAL también, y ahí si nos lleva puta a los borrachos...”<br /> Cuando me bajé, los muchachos se resintieron algo por no aceptarles su invitación a “enfiestarme” con ellos. Y se fueron despertando gallinas con la bocina de su carro: “Ice si combo no...”<br /> “Señor – dijo una voz desde San José – hable.”<br /> “Buenos días don José Gabriel, para Usted, para quienes lo acompañan en cabina, y para todos los patrulleros nocturnos. Si me lo permiten deseo referirme a esta enorme lucha del pueblo costarricense contra la mal llamada Ley de Modernización del ICE. Yo me llamo Teodoro y me estoy comunicando desde el cerro Zurquí. Quizás si el ICE fuera una institución privada yo no podría haber esperado tanto tiempo en línea, porque mi salario de trabajador no soportaría el costo por una llamada de ese calibre. No obstante, gracias al ICE estatal lo puedo hacer, porque sino esta llamada me costaría un ojo de la cara. Todavía se puede soportar. Pero además, gracias al ICE estatal yo puedo llamarlo a Usted desde estas remotas montañas y escucharlo nítidamente; hace pocos años eso era sólo un sueño para los habitantes de las zonas rurales del país. Esto me permite llevar mi pensamiento y mi sentimiento a todo el país a través de sus micrófonos y ondas... a mí que soy un sencillo trabajador que no puede pagar taxi porque para eso no da la cobija. Y recuerdo ahora la vez cuando escuché una charla del Dr. Franklin Chang Díaz en la Universidad, y él dijo que siempre sabía dónde estaba Costa Rica cuando circunvolaba el Planeta, por la gran cantidad de luminosidad que la cubría. Y me parece a mí que se debe al ICE estatal... y es más, don José Gabriel, yo he venido observando durante toda mi vida las montañas de Escazú, Alajuelita, Aserrí y todas las de ese macizo; y he visto con estos ojos cómo cada día se enciende un bombillo nuevo sobre sus faldas. Antes se veían potreros de día y tinieblas de noche. Ahora parece un portal; desde mi ventana, en estos precisos momentos mientras yo converso con Ustedes, veo todas las figuras caprichosas que se forman por las variadas direcciones de los tendidos eléctricos. Y todo ello es gracias al ICE estatal. Tienen electricidad y teléfono los ricos y los pobres. <br />Y les digo algo más: la comida cocinada con leña es muy sabrosa, pero nuestras mamás y nuestras abuelitas se enfermaban de los pulmones de tanto soplar y tragar humo; y hoy tenemos cocinas eléctricas que significan más salud. Ni qué decirle de las computadoras que usan los chiquillos de la escuelita del pueblo, los hijos de peones se la juegan con ellas y ya no los impresiona cualquier vendedor de baratijas o de cuentas de vidrio. Y yo siento que gran parte de la responsabilidad es de los trabajadores en general del ICE estatal: imagínese Usted don José Gabriel, y lo mismo le solicito a todos los patrulleros, qué sería de este país si este Instituto no fuera de todos los costarricenses. Valdrá la pena cambiarlo para que un hijito de papi y de mami pueda ir a un mall con un celular en cada lado de la cintura, como un nuevo conquistador de tierras que ya de por sí son casi suyas... yo, don José Gabriel, me siento muy orgulloso de este patrimonio, lo amo porque vivo su utilidad comunitaria o social; lo siento como parte de lo que es realmente mío en este país y por eso me entregué en estas semanas en alma, vida y corazón a defenderlo. Todo se puede mejorar, y se pueden y deben corregir aquellas cosas que de verdad andan mal para todos y no sólo para un grupo reducido de empresarios tagarotes que desea meter a Costa Rica en su caja de caudales... Y ya para no abusar de su confianza, ni de este maravilloso espacio que Usted me brinda, le quiero contar cómo llegué hasta mi casa hace un rato: Venía caminando desde San José porque el dinero que tenía no me permitió pagar un taxi para llegar hasta este cerro donde vivo. Ya a la altura de San Pablo no echaba pero iba con Dios; que es como ir lleno de utopías, ilusiones y sueños. Y fíjese Usted que el primer vehículo que pasó, a estas altas horas, se detuvo y su conductor me trajo hasta mi casa sin conocerme y con tanto peligro que ronda por las calles. Y sabe por qué se detuvo, don José Gabriel y amigos patrulleros: porque yo traía puesto sobre mi cabeza un casco amarillo con una calcomanía de Icetico, y eso le inspiró confianza a los muchachos que me ayudaron; igual que la confianza que despierta en nosotros los costarricenses, nuestro Instituto Costarricense de Electricidad.<br /> ¡Muchas Gracias por este maravilloso espacio don José Gabriel! ¡Buenos días a todos... y recuerden: el ICE no se vende, el ICE se defiende! <br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /> </div>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-67133992768979038162008-11-15T21:16:00.000-08:002008-11-15T21:18:25.306-08:00la brevedad es la hermana del talento<div align="justify"><span style="font-family:lucida grande;font-size:180%;">LA BREVEDAD ES LA HERMANA DEL TALENTO<br /></span><br /><br /><strong>CLAUDIO MONGE</strong><br /><br /><br /><br />Don Jorge Porras Ugalde, pensador de pluma liviana y diáfana, nos brinda a los lectores la grata oportunidad de leer sus reflexiones, y a la vez, de leernos en ellas. Y de verdad que lo logra con transparencia y dimensión. Su trabajo es didáctico aunque él no se lo haya propuesto, es educativo inevitablemente y es pedagógicamente irreverente. ¿ Por qué ? Porque con claridad meridiana de verano, nos lanza un conjunto de ideas – bomba, capaces de “terremotearnos” o estremecernos. Esa es una de las grandes fortalezas de esta breve obra del pensador que se revela en don Jorge. Y es bueno y justo destacarlo, porque de la aparente sencillez literaria intrínseca y de la estructura económica del lenguaje de las que hace gala el autor de estos “ENSAYOS FILOSÓFICOS”, se desprende un bagaje cultural sólido y consolidado.<br /><br />Afirmaba el gran escritor ruso y médico cirujano, Antón Páblovich Chéjov, que “LA BREVEDAD ES LA HERMANA DEL TALENTO”, y a todas luces de la lectura de la obra de don Jorge, se concluye que esta famosa expresión del Maestro ruso del relato corto, es perfectamente aplicable a esta propuesta literaria y filosófica del autor. Estos ensayos son directos y precisos, escritos sin ambages y sin rodeos. Dicen lo que deben decir sin importar las reacciones que susciten en los lectores. Pensaba decir que son flechas directas, pero sería mejor afirmar que son dardos precisos: no desperdician el aire arrastrando una larga cola; van directo al blanco y por ello dan en el centro. Sin duda este escritor es chejoviano.<br /><br />Se nos revela en sus ensayos como conocedor del oficio de pensar y como perito en el manejo del idioma: lo que economiza en palabras y frases lo desparrama en ideas – bomba que a ratos conmueven y a ratos tranquilizan. Es como el trabajo de uno de esos artistas plásticos orientales que son capaces de reflejar un paisaje completo sobre un grano de arroz. Le permite al lector atreverse a ir más allá y desafiarse a sí mismo retándose a pensar y a opinar.<br /><br />Aborda los temas con precisión y con sapiencia, desde el terrible flagelo de las drogas comunes y corrientes, hasta el peligro de confundir a Dios con la religión o al BIEN COMÚN con el sentido común. <br /><br />El autor nos da en bandeja un trabajo polémico y retador; valiente. Metafóricamente, podríamos afirmar que cada uno de los 21 ensayos son propulsores para saltar, no al vacío, sino a otros estadios de la reflexión. El lector, casi sin notarlo, al finalizar su lectura de cada ensayo, es “víctima” de una distracción - embeleso provocada por el reto que lanza la precisión lingüística de cada escrito y a la vez, la amplitud reflexiva que desata:¡ Nos quedamos pensando largo rato antes de emprender la lectura del siguiente trabajo! Nos “distraemos” pensando en lo propuesto o lo despellejado. Cada ensayo de don Jorge es un mundo, y antes de recorrer el siguiente, es necesario haber salido del anterior sin deudas de reflexión.<br /><br />Se ha asegurado que el ensayo es la ciencia sin la prueba, y que además, en cada ensayo se refleja un alto grado de subjetividad. Don Jorge Porras lo practica y lo reconoce desde los primeros párrafos de su libro, por eso el peso de la obra, siendo suculento, es así mismo llevadero en la medida que los axiomas que escudriña son andamios para cruzar de un edificio de ideas a otros: ¡El único peligro es caer al abismo de la luz donde muere la indiferencia! Y digo peligro porque pensar es peligroso y conlleva riesgos muy elevados. Uno de ellos es hacer que los demás por fin piensen, con lo que se socava el pedestal de los mediocres que nos han gobernado muchas veces, nos han sermoneado cada domingo, nos han embobado con futbol malísimo o nos han engañado con la demagógica proclama de dar al pueblo un sistema educativo liberador, cuando los productos que se ven y escuchan por doquier nos dicen todo lo contrario.<br /><br />Brindo a don Jorge Porras Ugalde, desde esta provincia herediana de maestros pensadores y escritores, una ovación sincera y un agradecimiento por contribuir al ejercicio del pensamiento de los lectores…¡¡¡COSA QUE LE AGRADARÁ A LA PATRIA, PERO QUE LE DISGUSTARÁ A LOS MEDIOCRES QUE HAN APRISIONADO LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN Y A LOS FLOJOS QUE HAN CASTRADO NUESTRO SISTEMA EDUCATIVO!!!<br /><br /><br />CLAUDIO MONGE<br />SAN ISIDRO DE HEREDIA, AGOSTO DE 2008.<br /><br /> </div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-36284947564581753192008-11-15T21:09:00.000-08:002008-11-15T21:12:35.914-08:00EL RELOJERO DEL SUR<div align="justify"><span style="font-family:lucida grande;font-size:180%;">EL RELOJERO DEL SUR</span><br /><br /><strong>CLAUDIO MONGE PEREIRA<br /></strong><br /><br />De la manera tan natural que papá aceptaba el fin de las cosas y de los procesos, un buen día aceptó que ya sus años y sus crujidos no le permitían continuar siendo zapatero, por eso, ordenadamente guardó sus viejas y originales herramientas después de limpiarlas. Papá las limpiaba cada día después de su jornada, pero esta vez yo percibí algo más en sus ojos y en sus movimientos: en verdad las acariciaba como sólo se hace ante las despedidas definitivas.<br /><br />Recuerdo cuando él me contó cómo las adquirió. Yo era aún escolar y amaba mirarlo desatando sus destrezas con ellas. Para mí él jugaba y se divertía haciendo maravillas con el cuero. Papá no deseó que nosotros fuésemos zapateros, pero cuando uno lo miraba trabajando notaba el amor que ponía en su labor. Él quiso que fuéramos profesionales y por ello sólo manipulábamos las herramientas cuando salía a su recreo cotidiano al billar de la Cañada, o al negocio de su amigo de juventud Paúl; allá al costado Norte del Mercado Central…casi llegando a la esquina NE.<br /><br />Habrá mucho qué escribir acerca de lo que significó la zapatería de papá para nuestras vidas, y esa tarea me la prometo para uno de estos días, cuando ya ese oficio casi fue desaparecido por el gran capital y el mercado; avasalladores de toda dignidad humana.<br /><br />Lo cierto es que mi viejo empacó sus herramientas y las guardó en un cajón que él mismo manufacturó, porque además papá le hacía a casi todos los oficios artesanales: ebanistería, carpintería, fontanería, electricidad, albañilería, pintor de brocha gorda y todo oficio útil para la vida de la sociedad. En nuestra casa si que jamás se necesitó un marido de alquiler: cuando “maguiver” apenitas iba, ya mi viejo venía de regreso. Andaba ya por los setenta años y aquellos martillazos sobre la vieja pata alemana de hierro, le estremecían su noble corazón y le maltrataban probablemente los muslos que otrora fueran vigorosos. Desde sus catorce años había sido zapatero. Atrás quedaban 56 años de oficio ejercido con nobleza y honestidad para los demás. Durante más de medio siglo reparó con amor lo que otros destrozaron. En ese tiempo, entre martillazo y cuchillo curvo sobre las suelas, nacimos sus once hijos.<br /><br />Al día siguiente papá salió temprano de casa y regresó hacia el medio día cargando una bolsa de manigueta; aquellas bellas bolsas amigables con el medio ambiente y con nuestro estómago. Pero en esa ocasión papá no sacó tosteles ni maní ni nada de sus mágicos fondos. No sacó nada y sólo la guardó. Por la tarde dispuso sus herramientas caseras de hacedor y construyó una mesita muy corronga, toda bonita ella, pero muy diferente a las mesas que él mismo hacía para su oficio de zapatero: era más alta y tenía una especie de barreritas al frente y a los lados. Se construyó un banco más alto de lo habitual, todo de madera y no como los de zapatería, cuyo asiento era de cuero completo o de cuero en fajas trenzadas como en un pastel. Colocó una bombilla colgando del cielorraso, cuya luz cayera directamente sobre la mesita y no se desperdiciara nada. Además, a un lado, dispuso un estuche de lona caqui amarrado con cordones verde musgo y tres lupas de distinto tamaño. Papá iniciaba así una nueva etapa en su vida…la última batalla de un obrero.<br /><br />Nuestra casa era pequeña, construida por el INVU cuando esa institución todavía tenía un estatuto de dignidad; era pequeña porque nosotros éramos muchos. Entonces todo se escuchaba de tabique por medio, por eso la noche de ese día, yo oí cómo papá descargaba el misterioso cargamento de la bolsa de manigueta sobre la mesita corronga. Me dormí soñando qué sorpresa tenía mi viejo para la mañana siguiente.<br /><br />Eran relojes. Muchos relojes de todos los tamaños. Brazaletes de metal y de cuero. Sin brazalete. Color oro y color plata. Caminando y detenidos. Gordos y delgados. Grandes y chiquitos. Redondos, cuadrados y rectangulares. Relojes y más relojes…¡Muchos relojes! Los había comprado “de a puño” en el refuego, allá por la vieja cocacola, donde casi todo era posible.<br /><br />También tenía lentes y varios monóculos de aluminio y de plástico, pinzas diversas, desarmadores chirrisquitos, unos martillitos de ensueño, alicates de punta, un cuchumbito de aceite y otras corronguras. Siguiendo su acostumbrado estilo de hombre muy ordenado y pulcro, todo lo tenía dispuesto sobre una franela blanca.<br /><br />Pasó varios días como chiquillo con juguetes nuevos, armando y desarmando relojes, aprendiendo a sostener el monóculo con los músculos de sus párpados y sus cejas. Y se hizo relojero, el relojero del Sur…de los Barrios del Sur quiero decir: la Kennedy, la López Mateos, Paso Ancho, Luna Park, Sagrada Familia, la Quince, Hatillo Uno, la Verbena y hasta del recién fundado Aguantafilo. Ese era mi Viejo ahora. Un relojero a los setenta años y hasta que murió. Aprendió bien su oficio y lo disfrutó, y con él, un nuevo metalenguaje intrínseco a los relojeros del mundo. Y lo hablaba como el campesino desplazado que aprende el lenguaje extranjero de la ciudad; pero sólo al principio, porque luego amplió su vocabulario hasta el grado de ser un habitante más de las esferas del tiempo.<br /><br />Su fama se extendió por esos barrios y la gente lo buscaba para que les repara sus relojes: papa era ahora un relojero reparador. Y lo hacía muy bien y con pericia. Sus ancestrales hábitos de habitante respetuoso del planeta y del Universo, le permitían ver la utilidad de todas las cosas, por ello era un excelente reparador. Es decir, un magnífico caballero de la Naturaleza y de la Sociedad; o sea, de la Humanidad.<br /><br />A la par del nombre de Paúl que ya escuchábamos de vez en cuando, comenzamos a escuchar otro que mi Viejo pronunciaba con mucho respeto: don Julio Fernández. Y así, humilde como era, papá dejaba que se viera una especie de orgullo en él cuando decía que venía de la Relojería de don Julio Fernández. Don Julio me dijo. Don Julio dijo. Don Julio me recomendó. Esta revista me la dio don Julio. Don Julio Fernández ya era como un habitante más de nuestro reducido mundo de familia de la clase trabajadora.<br /><br />Al tiempo papá vendía relojes nuevos a pagos y yo sentía que mi Viejito progresaba aún a esa edad. Ya casi se arrimaba a los ochenta. Nunca le pregunté cómo hizo para prosperar porque él siempre fue revolucionario, de los que miran sólo para arriba y hacia delante. Lo cierto es que hasta se compró un carro nuevo a medias con uno de sus yernos y viajaron a Panamá varias veces a comprar mercadería. Un día se cansó y le dejó el negocio a mi cuñado. Poco después murió, después de pronunciar mi nombre y decirle a mamá: “¡Dora…yo creo que hasta aquí!” Le agarró la mano a mamá, se la besó, cerró sus ojos negros y se fue.<br /><br />Hoy me senté a escribir estas notas como quien no quiere la cosa, motivado por un mensaje de correo electrónico, firmado por doña Flora Fernández. Ella me envía una copia de la entrevista que le hizo un periodista de la Nazi, en la cual describe parte de su Historia Familiar. Desde que nos juntamos a soñar que podemos derrotar al neoliberalismo salvaje y seco, recibo muchos mensajes por ese medio. Muchos son de doña Flora, a quien no tengo el honor de conocer. La he leído muchas veces y reenvío sus atinados mensajes a mis amigos y familiares. La he leído como hoy, sólo que hoy fue diferente, porque hizo que este Corazón que sigue clamando No a la venta de mi Patria, hiciera puchitos de sollozos al recordarme a mi Viejo. Me imaginaba al abuelo de doña Flora allá por la iglesia de la Soledad y miraba otra vez a mi Viejo con su bolsa de manigueta repleta de cuerpecitos de tiempo y de esperanzas. Llenita de sueños como a él le gustaba. Sólo que don Julio abuelo apenas comenzaba a vivir y mi padre ya iniciaba su regreso al Mundo de la Justicia. <br /><br />¡Gracias doña Flora Fernández! Ahora estoy seguro de que su padre y el mío fueron amigos. Ahora tengo la certeza, después de saborear su entrevista, que don Julio Fernández le tendió su mano solidaria y noble a mi papá; a mi amado Viejo…al Relojero del Sur.<br /><br /><br />San Isidro de Heredia, 7 de junio de 2008-06-07<br />Casa MONHER. <br /><br /> </div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-83327599136628956592008-11-15T20:51:00.000-08:002008-11-15T20:56:06.940-08:00FIDEL, Y LA MATEMÁTICA SIN NÚMEROS<div align="justify">sábado 15 de noviembre de 2008</div><div align="justify"><br /><a name="5910506342219145685"></a><a href="http://cultural.argenpress.info/2008/11/la-matemtica-sin-nmeros-y-fidel.html"><span style="font-size:180%;"><strong>La Matemática sin números y, Fidel</strong></span></a><strong> </strong></div><div align="justify"> </div><div align="justify"><br />Guillermo Guzmán </div><div align="justify">(desde Venezuela, especial para ARGENPRESS CULTURAL)</div><div align="justify"> </div><div align="justify">Nunca he sido ni he de ser capaz de tratar apropiadamente todas las aristas de un tema. Sí estimo que el todo es más que la suma de las partes -como suele decir la gente por ahí-siento entrar en el terreno de la filosofía, así que reculo, obvio, es que tampoco me gusta tocar una tecla y otra tecla y no poder hilvanar una melodía pero, ¡qué carajo!-para luego es tarde- hablaré de Fidel, o, mejor decir, intentaré hablar acerca de Fidel, pese a que, hacerlo sin las apropiadas competencias lingüísticas, es como una temeridad insensata -valga la hipérbole- a menos que consulte a Noam Chomsky, es decir, ¡a Chomsky!; pero, no, “Chomsky debe estar muy ocupado ahora”, y mucho menos me atendería, de él saber quien soy yo.La capacidad de comprender cantidades infinitamente grandes o infinitamente pequeñas, requiere del establecimiento de relaciones entre el pensamiento, la imaginación y la memoria, y del ejercicio de percepciones muy complejas.Uno a uno somos diferentes. La calidad y la cantidad de nuestros conocimientos acerca de las realidades que nos rodean, son distintas y, ese desequilibrio es una especie de energía que nos empuja hacia el acercamiento y/o hacia la confrontación. Ello es parte de nuestros enfoques acerca de la paz y acerca de la guerra.Las energías que nos impulsan hacia uno u otro lado se enriquecen, para bien o para mal, con el conocimiento que tengamos acerca de nuestra realidad, lo que puede desembocar en la posibilidad de vivir en paz-efectivamente-o en guerra.Pero, lamentablemente, las decisiones de hombres insensatos quienes ostentan posiciones de poder bélico, arrastran a millones y, en particular, a niños y a ancianos quienes no pueden decidir su propio destino.Subsistir -una conducta primitivamente lógica, considerada desde la perspectiva histórica, y desde luego, anterior a las consideraciones de Charles Darwin- no pudo partir de talentos matemáticos porque, para entonces, obviamente, la Matemática no se había inventado pero, es de suponer que el hombre primitivo ya calculaba de manera intuitiva y, además, los procesos verbales han debido ser tan incipientes y rudimentarios como escasa es hoy, la compasión de los gobernantes guerreristas.Por otra parte, las incidencias de mensajes religiosos que no están al día sino, fondeados en el pasado funesto de la inquisición medieval y, por supuesto, aferrados al más pernicioso dogmatismo, impactan de manera incesante a la cultura humana y le impiden avanzar hacia modernas formas de coexistencia como el socialismo bolivariano, universal por excelencia.La plenitud de la conciencia ha de corresponder al ámbito de la Matemática sin números porque el conocimiento profundo se nutre de percepciones objetivas pero, además, de percepciones extrasensoriales.Antes y después de cada percepción puede darse un proceso lógico pero, la percepción puede no estar entre procesos lógicos, no obstante, se presenta y resulta válida y además, trascendente.El conocimiento no es sólo lo que se expresa sino, además, lo que no se expresa. Fidel expresa lo que debe expresar y se guarda lo que debe guardar, darle armas al enemigo es una grave falta de conocimiento.Inclusive, la capacidad de acceder al conocimiento matemáticamente valedero, requiere de momentos precisos porque, si vas a algo antes o después de que puedas aprehenderlo, tendrías que resolver problemas adicionales y, es en el caso de los pueblos sometidos y esclavizados por parte de los poderosos, algo que debes intentar resolver, inventando estrategias de participación, de ahí, la democracia participativa.Sabemos -como todo el mundo lo sabe- que el origen exacto de cada cuestión suele ser, un dato que falta, lo que nos obliga a trabajar sobre esquemas y, la unívoca característica del esquema es, ser incompleto.Si la humanidad ha vivido hasta el sol de hoy, pero, especialmente, a partir de la insurgencia del capitalismo, en una guerra permanente con escasos momentos de paz, entre otras causas, puede haber influido la falta de conciencia respecto de una propuesta universal de humanismo, no del humanismo burgués sino del humanismo revolucionario porque para quienes militen a favor del humanismo revolucionario, nada en la Naturaleza parece estar aisladamente, aparte de que nuestros conocimientos al respecto, provienen de muy diversas fuentes, algunas apropiadas y otras, deliberadamente torcidas.No saber cuanto conocer el mundo, es lo de menos. Para un hombre, si sabe donde está parado y además no se desentiende de lo que pasa a su alrededor, esto le permite orientarse en una dirección especial: el conocimiento.La inteligencia humana tiene factores generales que nos competen a todos. Esos factores no están siendo abordados sino, contrariamente, manejados para llevarnos a la confrontación y, Fidel lo viene diciendo de una u otra manera, a través de sus reflexiones.La información es una peligrosa arma de guerra si está manipulada, los grandes medios de difusión de informaciones están globalizados bajo un solo patrón: mentir, mentir y mentir. Para nada, la ética tiene que ver con lo que se difunde a los pueblos, sólo es cuestión de taquilla y nada más.Pero, mientras todo esto sucede, nosotros los venezolanos vemos a Fidel a cada rato, transformado en frascos de medicamentos, en médicos que andan por ahí curando al pueblo, lo vemos en los bombillos ahorradores de energía eléctrica, en monturas de lentes, en operaciones quirúrgicas de alta tecnología capaces de devolver la vista a los más pobres e inclusive, a los no tan pobres, en computadoras capaces de sistematizar los síntomas de determinadas enfermedades, en muchas cuestiones pero, una de las más impactantes formas a través de las cuales uno puede ver a Fidel es mediante sus reflexiones cargadas de vaticinios y de esperanzas respecto al porvenir del socialismo.Pudiese pensarse que Fidel ya no está en el poder pero, tal vez suceda que él haya pasado a otra forma de poder muy superior, a la que sólo llegan los hombres verdaderos, tanto que nadie pueda destronarlo, me refiero al cariñito del pueblo, un lugar sagrado al que, de uno llegar ya no puede echase pa`tras, y es que el Universo tiene un centro tal como lo tienen todas las cosas, la rueda, no podría girar con armonía sin un centro al cual referirse, las hormigas van y vienen a buscar su comida respecto de un centro de operaciones, igual que lo hacen las abejas, y el obrero que va todos los días al trabajo y regresa a su casa a descansar. El centro respecto al cual gira la vida de un revolucionario verdadero no es otro que el cariñito del pueblo trabajador.Total, que de lo que se trata es de la naturaleza del centro, si éste cumple o no sus funciones y, el sentido de descentralizar lo que debe tener un centro para que pueda funcionar, está asociado con el caos, con el desorden, con la ineficacia y con la destrucción.El imperialismo se desvela por matar a Fidel de alguna u otra forma. Físicamente ya no podrán hacerlo, así que tratarán de matarlo de otra forma y tampoco podrán pero, mientras haya en el Hemisferio un solo niño que desconozca quien es Fidel, la tarea no será nada fácil.El Gringo trata de destruir el centro de toda actividad constructiva en cada uno de nuestros países.Quieren matar no sólo a Fidel sino, a Chávez porque Chávez es el centro aparente de nuestra acción política acá en Venezuela. Quieren matar a Evo, a Correa y, a Ortega -por iguales razones-. A Cristina no pero, sí pretenden arrodillarla y torcerle el brazo. A la Bachelet, ni con el pétalo de una flor -Bachelet es una simple muñequita con hilos que es movida desde El Pentágono y desde el Departamento de Estado, con gran delicadeza para no remover las huellas de Pinochet-. Y, Lula no tiene carácter suficiente para hacer una revolución en Brasil.Pero, ante todo, el gran centro es el corazón del pueblo trabajador, que determina con su esfuerzo infinito la correlación de todos los factores de la producción. Y, el gringo ataca ese centro de manera incesante y deliberada, con el arma de la ignorancia.Lo primero que hizo el gringo antes de atacar a Irak, fue un embargo de alimentos y de medicinas. En consecuencia, lo primero que deben hacer nuestros países, es asegurar la producción de alimentos y de medicinas. Lo primero que hizo Fidel luego del triunfo de la revolución fue asegurar-tengo entendido- el suministro de leche para los niños menores de catorce años.Fidel es Fidel pero, a cada pasito del tiempo más parece él, estar por ser Fidel. Y es que nada se mantiene como primitivamente era, por fortuna o por desgracia los seres humanos siempre estamos entre límites muchos de los cuales deben ser traspasados audazmente y con inteligencia; los límites que tratan de cercar la conciencia popular y confinarla a la esclavitud de la producción capitalista son, por excelencia, objetivos de todo proceso verdaderamente liberador, para ser derribados. El analfabetismo es tan pernicioso como el academicismo encopetado y opresor. La ignorancia y el conocimiento pueden ser la misma cosa si éste no está al servicio de la sociedad, si no está en función de un planteamiento ético válido.La ética de la burguesía es una y la ética revolucionaria es otra. Lo que es válido para un sinvergüenza no puede serlo para nosotros, así de sencillo; decidir entre el sí y el no puede ser un dilema para algunos agazapados dilemáticos a la hora de la chiquita, así que en la medida en que podamos contribuir a elevar el nivel de conciencia de cada persona, estaremos en el camino verdadero.Cuba ha sido sometida a dura prueba y ha resistido con estoicismo porque ha estado en el camino verdadero, otros se habrían rajado, Cuba no se raja, hay que volver los ojos hacia Cuba, para vernos en ese espejo de dignidad y coraje.Fidel tiene mucho que ver con la moral de Cuba. Hay quienes se distraen considerando que Fidel es el centro y, no lo es, el centro de Cuba es el corazón del pueblo cubano pero Fidel es un hilo conductor como lo es Chávez acá, o como Evo, Daniel y Correa en otros lugares de nuestra Patria Grande. Así que la manía del gringo, de intentar destruir el centro, seguirá fracasando.Fidel es un “Boxeador inteligente” que sabe usar sus añagazas de manera estupenda, usa la matemática sin números magistralmente cuando, más que reflexiones hace sentencias acerca del destino de la humanidad. Es que ante un enemigo peligroso y prepotente como los gobiernos de USA, esgrimir la moral y la inteligencia en su más alto nivel es una gran defensa.Pero, además, Fidel emplea los números y eso no está demás. Él cita cifras que ponen en evidencia el contexto escalofriante del mundo capitalista.Puesto que he aprendido de las magistrales orientaciones que hace Fidel en sus cotidianas reflexiones. Me permito citar- en consecuencia-alguna idea extraída de la cotidianidad del trabajo de los obreros.La defino como “estrategia del colector” y voy al grano: El colector de una cloaca suele tener diámetros que varían- de par en par- entre 8 y 22 pulgadas, de acuerdo a las necesidades; se trata del tubo matriz al que van empotradas las descargas de cada casa, y que va a lo largo de la calle.Cada descarga suele bajar al colector mediante tubos de 6 pulgadas de diámetro. Y, a lo que quiero llegar es a los siguientes detalles.La pendiente del tubo de descarga debe ser de 1,5 centímetros por cada metro lineal; mientras que la pendiente del colector central debe ser de 4 milímetros por cada metro lineal.Si estos parámetros no se cumplen va a ocurrir que se obstruya la cloaca. Es que si se le da mayor inclinación- es decir, mayor pendiente-al colector, ocurrirá que el líquido se escurre muy rápido y deja sólido en el camino, que al acumularse, tapona el flujo total.Y, si le das menor inclinación, entonces tampoco fluirá lo que debe fluir.En cuanto a la descarga de la casa, esta debe fluir de manera óptima bajo el parámetro matemático expresado.A los contra revolucionarios hay que aplicarles la estrategia del colector para que bajen, tanto en sus formas líquidas como en sus formas sólidas, por donde deben bajar hacia el gas de los pantanos, hacia el basurero de la historia.Hay que hacer grandes esfuerzos para desarraigar los condicionamientos de lo perverso y encaminarnos hacia la felicidad de los pueblos, mucho de lo que desarraigamos con la marcha de una revolución verdadera, puede servir de “abono” pero hay “desechos” que deben ir a parar a alguna parte, por irrecuperables, por inservibles. Pero, hay que desentenderse de los factores contaminantes, de manera metódica y no a lo loco. Nunca debemos descartar que alguna alhaja ruede inadvertidamente por el inodoro y haya que rescatarla en la curvatura del sifón.El Socialismo que puja por nacer debe comportar un nuevo humanismo revolucionario, ajeno al humanismo burgués, que es otra cosa muy distinta aunque suene igual, es que la validez de un concepto tiene mucho que ver con la realidad social, lo que es válido para algunos no lo es para otros, para un sinvergüenza es válido esquilmar al pueblo trabajador pero, para nosotros, todo lo que perjudique al pueblo debe ser enfrentado y abatido.Hoy, los pueblos del Sur están más atentos a su destino y, Fidel tiene mucho que ver en ello, su ejemplo, su constancia su entrega total al pueblo cubano ha traspasado los límites entre los cuales el imperialismo quiso encerrarlo, subestimando el coraje del pueblo.Si en una fábrica el trabajador aislado trata de arreglar su problema con el chupasangre, siempre va a ser vencido.La unidad de los trabajadores en torno a un liderazgo verdadero, es indispensable y, hablo de liderazgo, más que de líder. El principio vital y cualitativo que comporta la unidad verdadera de los trabajadores es superior a la suma cuantitativa de los mismos, hombre por hombre.Fidel se ha encaramado más arriba del clásico concepto de poder y desde ahí formula sus teorías.Las teorías también se corroen como la mayoría de los metales pero, las de Fidel parecen de oro.<a href="http://argenpressinfo.blogspot.com/2008/08/para-recibir-gratis-argenpress-en-su.html">Haga click aquí para recibir gratis Argenpress en su correo electrónico.</a><br />Publicado por ARGENPRESS en <a title="permanent link" href="http://cultural.argenpress.info/2008/11/la-matemtica-sin-nmeros-y-fidel.html">12:19</a> <a title="Editar entrada" href="http://www.blogger.com/post-edit.g?blogID=4913770279387998458&postID=5910506342219145685"></a><br />Etiquetas: <a href="http://cultural.argenpress.info/search/label/Guillermo%20Guzm%C3%A1n">Guillermo Guzmán</a>, <a href="http://cultural.argenpress.info/search/label/Reflexiones">Reflexiones</a><br /> </div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-6934791168612329032008-07-10T21:30:00.000-07:002008-07-10T21:39:05.111-07:00SAN ISIDRO DE HEREDIA DEFIENDE EL VOLCÁN BARVA<span style="font-size:180%;">¡LIBERTAD PARA EL BRAULIO CARRILLO!</span><br /><br /><div align="justify"><strong>EL SIGUIENTE, ES EL TEXTO ÍNTEGRO DEL ACUERDO UNÁNIME DEL GOBIERNO LOCAL, ACTA 38-2008, DEL CANTÓN DE SAN ISIDRO DE HEREDIA. LA PAZ CON LA NATURALEZA SE CONTRUYE CON HECHOS...NO CON DISCURSOS TELEVISADOS Y FALACIAS EMPRESARIALES.</strong> </div><br /><br /><div align="justify">San Isidro de Heredia, 22 de junio de 2008<br /><br />De: Comisión Municipal de Medio Ambiente<br />Para: Concejo Municipal<br /><br />Asunto: Acuerdos y Recomendaciones para el Órgano Superior<br /><br />Señor<br />WILLIAN VENEGAS ARAYA<br />Presidente del Concejo Municipal<br /><br />Estimado Señor Presidente, le rogamos someter a conocimiento del Concejo Municipal, los siguientes acuerdos y recomendaciones:<br /><br />ACUERDO 678-2008 de la Sesión Ordinaria 35 – 2008<br /><br />Asunto: SOLICITUD DE DON CARLOS MANUEL ÁLVAREZ, DE LAS ASADAS DEL CANTÓN DE BARVA DE HEREDIA<br /><br />1) La COMISIÓN MUNICIPAL DE MEDIO AMBIENTE (COMUMA) de San Isidro de Heredia, recomienda al CONCEJO MUNICIPAL, ACOGER LA SOLICITUD, <strong>PARA QUE ESTE GOBIERNO LOCAL LE SOLICITE AL DR. OSCAR ARIAS SÁNCHEZ, PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA, VETAR EL PROYECTO DE DESARROLLO TURÍSTICO DEL VOLCÁN BARVA</strong>, y en su lugar, acorde con la iniciativa de “PAZ CON LA NATURALEZA”, y con la recomendación del QUINTO CONGRESO NACIONAL DE ASOCIACIONES DE DESARROLLO, solicitarle al señor Presidente:<br /><br /><strong>“DECLARAR LA ZONA DE REFERENCIA, PATRIMONIO NACIONAL PARA LA PROTECCIÓN DE LOS RECURSOS HÍDRICOS Y AMBIENTALES, FUENTES DE VIDA, SALUD Y DESARROLLO ECOLÓGICO DE LA PROVINCIA DE HEREDIA, Y POR ENDE, PARA BENEFICIO DE TODO EL PAÍS.”</strong><br /><br /><br />Firma:<br /><br />Regidor Propietario<br />Claudio Monge Pereira<br />Presidente de la COMUMA<br /><br /><br />cc..archivo<br /> </div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-64804527595428384652008-07-10T21:22:00.000-07:002008-07-10T21:30:05.225-07:00PATRIA, EDUCACIÓN Y MAGISTERIO<div align="justify"><span style="font-size:130%;"><strong><span style="font-size:180%;">Patria, Educación y Magisterio</span><br /></strong></span><br /><strong><em>Claudio Monge Pereira<br /></em></strong><br />Hace ya mucho tiempo me sucede: cuando debo escribir o reflexionar acerca de nuestro quehacer pedagógico, choco de frente con una duda inmensa: ¿Podemos hablar de educación costarricense o de un sistema de educación nacional?, ¿Tenemos un Sistema de Educación Nacional?, ¿Tenemos educación costarricense? He llegado a concluir que no los tenemos. Yo no podría hablar de una educación costarricense o de un sistema de educación nacional. Esto ya de por sí es una grieta para iniciar un diálogo acerca de lo que se ha dado en consignar como la actividad más importante de nuestro Estado.<br /><br />Es necesario reconocer que al hablar de nuestro Estado, debemos aceptar que nuestro estimado Estado Social de Derecho está de cuclillas, ya herido de muerte. En su lugar se nos impone uno empresarial y de mercado desaforado, dirigido para su bienestar personal por los empresarios políticos que sólo ven en él un simple instrumento para legalizar sus tropelías históricas y su desfachatez ciudadana. Entonces, debemos ubicar el análisis en ese contexto, porque no es lo mismo analizar lo educativo en un Estado Social de derecho, solidario y ciudadano, que hacerlo en uno de buchones cuya ética estriba en enriquecerse rápidamente y a cualquier costo nacional. Así las cosas, se debe abordar el tema en este contexto y no en otro. No obstante se requiere, para caracterizar la situación, realizar un recuento histórico pedagógico de nuestra evolución pedagógica a partir de la existencia de la antigua Escuela Normal en Heredia.<br /><br />Recordaremos, aunque sea someramente, que la Escuela Normal era en realidad la más clara expresión de una Universidad Pedagógica en todo el sentido de tal calificación. Aquello era una UNIVERSALIDAD de pensamiento, conocimiento y acción, desde cuyas aulas salía un soplo prometedor y progresista hacia el país, concebido este no como una abstracción sino como una sociedad real y concreta; histórica y en busca de la consolidación de su personalidad pedagógica. El Personal Docente de esa Casa Superior de Estudios estuvo conformado por personas del más exquisito conocimiento pedagógico, comprendido este sobre sólidos fundamentos filosóficos, históricos, sociológicos y psicológicos. Su quehacer siempre se enmarcó bajo la consciencia científica de que al desarrollar su labor pedagógica, estaban actuando en la formación de profesionales que irían a cumplir con funciones ideológicas, económicas, políticas, sociales y culturales.<br /><br />No es antojadizo ubicar la función cultural de la educación en último lugar, porque esa es la única que desde la óptica reaccionaria y conservadora de quienes ejercen el poder, cumple el Sistema Educativo. Es decir, esa es la tarea que según ellos debe desarrollar exclusivamente, quien ejerce la labor docente. Se nos asigna una función reproductora de cultura, comprendida esta en su más concreta expresión: transmitir conocimientos o materias. O sea, transmitamos lo que otros señalan, pero no nos atrevamos a cuestionarlo; ni mucho menos a cuestionarlo, desbaratarlo o redescubrirlo desde otra perspectiva. La capa de la cultura es la que se deja ver en el farallón geológico de la educación oficial. Lo interesante es que eso se le imbuye al aprendiz pedagógico con tal fuerza, que este llega a creerlo y a practicarlo.<br /><br />En aquella Escuela Normal el sentimiento, el conocimiento y la praxis eran otros. Se actuaba conscientemente, sabiendo que la formación docente era una tarea histórica de enormes dimensiones, porque se trataba de darle a la Patria, no al país a secas, contingentes de profesionales enamorados de su quehacer y de su ineludible proyección social. Aún en la más elemental de las clases de gramática o de alfabetización, se actuaba ideológica y políticamente. Se trabajaba para reproducir un sistema de valores institucionalmente oficial y para señalar derroteros formativos tendientes a la consolidación de un modelo económico. En una frase: el sistema educativo fortalece y reproduce el aparato ideológico del estado, por lo tanto, si la visión era la consolidación de un estado liberal democrático para bienestar de las mayorías, el quehacer pedagógico coadyuva para darle sus bases ideológicas.<br /><br />Basta con revisar los escritos de insignes pedagogos como Joaquín García Monge, Roberto Brenes Mesén, Omar Dengo, Carmen Lira, entre otros y otras, para corroborar que su pensamiento pedagógico era y continúa siendo revolucionario. Veamos someramente algo de la esencia de su credo:<br />…la joven maestra normalista Luisa González, conjuntamente con Carmen Lyra, entendían que la educación es un acto liberador por medio del cual manifestamos nuestro amor hacia la Patria; afirmaban que la Pedagogía, más que un cuerpo teórico más o menos coherente, debería ser una Guía para la acción que rompa los esquematismos y los reduccionismos mentales que promueve la sociedad del egoísmo. La Pedagogía es la teoría que surge del conocimiento de las realidades sociales y concretas del sistema educativo en todos sus ejes y componentes, que le sirve al educador para orientar su quehacer cotidiano, dentro y fuera del aula. La Pedagogía entonces, no es sólo un asunto que se practica dentro de cuatro paredes; es un asunto de utopías y de incertidumbres.<br /><br />La educación para ellas no era sólo el acto concreto de las aulas, ya que su proyección social y humanista, política e ideológica, rebasa las paredes de una institución. El acto concreto de aula, en el cual se puede echar mano a los más diversos métodos y técnicas para informar y formar al ser humano integralmente, se refleja en la sociedad como un todo. Educamos para domesticar o para liberar. Consideraban la pedagogía una ciencia que teoriza por su propio camino acerca del hecho educativo y propone ideas aisladas o cuerpos de ideas sistemáticas para comprender ese fenómeno y enrumbarlo por caminos predecibles y conscientes.<br /><br />Omar Dengo, por ejemplo, afirmaba vehementemente que la educación no podría ser jamás como el vientre de una mula, porque esa educación no es capaz de dignificar ni concebir nada. Nótese, en esta analogía, que el maestro clamaba por una educación como proceso de liberación y de esperanza, una educación como sinónimo y expresión de vida. Se puede inclusive especular acerca de una concepción de la educación deificadora, capaz de concebir vida positiva y perfectible: dar a LUZ.<br /><br />Don Joaquín García Monge remachaba a cada paso que el educador no es un domador, con lo cual ya, en aquella aparentemente lejana realidad espacio – temporal, se clamaba por una Escuela Participativa y por una educación inclusiva. Nótese que al señalar que la educación debe formar y no domesticar y que los educadores no somos domadores, ya se señala que el aula no es un circo ni la escuela tampoco. Refrescando su pensamiento podríamos entonces asegurar que su concepto de acción educativa estaba más cercano al de una orquesta sinfónica: un maestro dirigiendo con armonía a un grupo de seres humanos que ya poseen una verdad histórica, antropológica y epistemológica. No son pizarras en blanco o arcilla para simplemente moldear; son seres sociales dialécticos.<br /><br />Esa era la esencia pedagógica de nuestra vieja Normal Superior, herencia que se quiso transmitir a la nueva Escuela de Pedagogía que surge al refundarse la Universidad de Costa Rica. Esa tarea se logra durante pocos años, mientras la Escuela es timoneada por discípulos de aquellos Maestros, no obstante desde las fuerzas políticas que irrumpieron con violencia al poder a finales de la década de los años 40, ella era peligrosa para su estabilidad ideológica y política. Fue su primer decano el Dr. Marco Tulio Salazar, insigne maestro costarricense discípulo de Ovide Decroly en Bélgica; por lo tanto portador no sólo de la herencia normalista, sino de los últimos avances pedagógicos europeos.<br /><br />Posteriormente lo reemplaza la Dra. Emma Gamboa, discípula de John Dewey, padre del Pragmatismo para los Estados Unidos y maestro de latinoamericanos que se formaban a nivel de postgrado en aquel país. Recordemos que esa nación se sentía triunfante de la última Guerra Mundial, y por lo tanto, la poseedora de la nueva ideología que debería imperar en su traspatio americano. Para quienes no lo recuerdan, Emma Gamboa es cofundadora de la ANDE, organización magisterial que nace para contrarrestar el trabajo de otros gremios que ya existían y que estaban plenamente matriculados con la Reforma Social y Estructural promovida por la alianza de los comunistas, los republicanos y la Iglesia Católica. Ese nacimiento de la ANDE no es fortuito ni producto de una emoción espontánea: es el resultado de un serio y exhaustivo proceso ideológico y político de la nueva fuerza ya en el poder. Del otro lado estaban Carmen Lira y sus compañeras normalistas.<br /><br />La Escuela de Pedagogía es transformada en Facultad, y ya más adelante, en Facultad de Educación. Aparentemente es un cambio de nombre, pero no, va más allá: es un cambio no sólo de guardia sino de ideología. Es un golpe de estado oficial contra la Pedagogía de extirpe y herencia europea, que era la que signaba nuestra formación docente y orientaba su desarrollo por senderos humanistas y comprometidos con las transformaciones sociales. Se pasa de la pedagogía a la educación y de ahí al currículum. O sea, la formación docente más centrada en las posibilidades individuales y cifrando sus expectativas en el amparo de las técnicas. Ya no más el educador como científico de la educación, es decir, un Pedagogo, sino como un técnico instructor centrado en la simple transmisión de lo cultural; como si lo cultural fuese a – histórico y des – ideológico.<br /><br />Se da entonces una etapa de varias décadas de trabajo en esa línea, y la Facultad de Educación de la Universidad de Costa Rica, que era la única, trabajó arduamente en la titulación de algunas generaciones de educadoras y educadores marcados por el higienismo, la puericultura, la transmisión de información y su calificación. La mayoría de estos asumieron su papel de reproductores de los mitos democráticos con suma complacencia, y algunos de ellos y ellas llegaron a puestos altos en el Ministerio de Educación, desde donde promovieron la aplicación a ciegas de políticas reproductoras que consolidaran la ideología imperante. Un Ministerio que crece como elefante blanco, repleto de funcionarios familiares y manoseado hasta el impudor por los políticos de turno que imponen nombramientos y vetan a excelentes prospectos pedagógicos. Nace la época en que el partidario mediocre desplaza al adversario competente. Esa época no puede abordarse sin aludir a los acontecimientos internacionales que sacuden el mundo y que nos afectan de muchas maneras: la Revolución Cubana, el retorno del exilio costarricense, Tlatelolco en México, el 68 francés, Lumumba en el Congo, el Che Guevara, la Alianza para el Progreso, el asesinato de Kennedy, entre otros. Es el nacimiento de la nueva efervescencia ideológica que recorre América Latina: se pone de moda la Revolución.<br /><br />Entonces, iniciando la década de los años setenta, pasan a formar parte del personal docente de la Facultad, la única existente, algunos graduados propios, y a mediados, otros graduados en Europa y algunos países del continente americano. Esto, más el efecto de los acontecimientos apenas señalados, marcará una etapa novedosa en la formación docente. Otros pensamientos llegan para refrescar el quehacer educativo, y aunado a esto, profesionales en Ciencias Sociales graduados en Francia y otros países europeos, promueven la renovación universitaria durante su Tercer Congreso. Las modificaciones que se plasmarán en su Estatuto Orgánico, serán el marco conceptual institucional que posibilitará un viraje hacia posiciones más progresistas. La Universidad se transforma en la Casa que promoverá “las transformaciones que la sociedad necesita, mediante el logro del bien común”, por medio de la formación de profesionales comprometidos con la patria.<br /><br />Se inicia con estos hechos, un proceso de reflexión interna en la Facultad de Educación, ya dividida en escuelas especializadas (Formación Docente, Administración Educativa, Orientación y Educación Especial; posteriormente Bibliotecología y Educación Física), que significará modificaciones y reformas a los Planes de Estudio. Se impartirán nuevos cursos como Sociología de la Educación, Epistemología, Fundamentos Históricos, Realidad Nacional, Economía Política de la Educación, Teoría de la Educación, y entre otros, PEDAGOGÍA, que ya había desaparecido del lenguaje oficial. Deviene entonces esto en la formación de varias generaciones de educadoras y educadores con una visión más amplia del mundo. Esto significa que se rompe el esquema curriculista para hablar de pedagogía. Significa alcanzar que algunas nuevas generaciones de educadores se habrán formado recibiendo la influencia de otras visiones de mundo; más amplias y más ligadas a la ruptura de intromisiones foráneas en lo teórico.<br /><br />Ya desde el siglo pasado se había demostrado que la influencia europea sobre nuestra formación docente era palpable. Imperaba la pedagogía de corte liberal e inclusive la más revolucionaria a través de las diversas escuelas que iban surgiendo en el panorama educativo: no sólo Pestalozzi, Froebel, Kershesteiner, Durkheim, Montessori, Decroly, sino también los rusos Krupskaya, Makarenco, Sujomlinsky, Lunacharski y otros, sin olvidar la poderosa influencia del inglés Alexander Neill y su escuela contestaria de Summerhill; y los Freinet en Francia con su Pedagogía Popular.<br /><br />Estas generaciones de científicos de la educación, ahora concientes de su papel histórico dentro del Sistema Educativo, reinician el surgimiento de líderes magisteriales de nuevo cuño que se insertan a los diversos frentes gremiales para exigir la participación real del educador en los destinos de su quehacer. Se trata de un educador más incómodo, menos sumiso, mejor polemista, más valiente y con un atrevimiento irreverentemente respetuoso fundamentado en un buen bagaje científico y un amplio conocimiento de sus derechos ciudadanos y humanos.<br /><br />Mencionaremos sólo de paso la fundación de la Universidad Necesaria, hoy UNA, hacia la cual según se afirma, se da una fuga de cerebros de la UCR; según algunos observadores, precisamente de aquellos que eran considerados “incómodos” en esa casa de estudio y era necesario exportar. En alguna medida este éxodo académico y científico, tendrá sus repercusiones negativas en aquella unidad académica que hacía muy poco formaba docentes exclusivamente. Lo mismo se da con el surgimiento de la UNED y la duplicación de los Planes de Estudio de la UCR. Ahora tendremos tres facultades formando docentes, administradores y otras especialidades. Ni qué decir con el festín de la proliferación de centros privados sin ninguno o con mínimos controles, muchos de los cuales fueron refugio para la piratería de programas que luego fueron desmejorados. Para mi modesto entender, en esta etapa nos encontramos.<br /><br />Ahora bien, he afirmado con esto que ha llegado la hora para el Magisterio Nacional. La hora de pasar a jugar el verdadero papel protagónico que surgió y se dio en la época de oro de la Pedagogía Costarricense: los tiempos de la Normal Superior. Eso se viene manifestando en el trabajo pedagógico que desarrollan a lo largo y ancho del país, esas generaciones de educadores y educadoras que ya he señalado. A partir de su conocimiento científico de la realidad pedagógica, de la política y del desarrollo nacional, estas personas han asumido roles más beligerantes y despliegan su trabajo más allá de las cuatro paredes institucionales. Hoy día están más ligados a gremios, a Comités Patrióticos, a grupos de reflexión, a Fuerzas Vivas comunales, y también, el avance científico tecnológico los ha tocado y se han capacitado o autocapacitado para dicha de su conocimiento y el de sus estudiantes.<br /><br />Se puede afirmar que asistimos al surgimiento de una especie de situación revolucionaria, que es cuando los de arriba ya no pueden y los de abajo ya no queremos. O sea, los de arriba ya no pueden seguir gobernando a su antojo o desgobernándonos, y los de abajo, nosotros, ya no deseamos continuar desgobernados o ser gobernados con memorandos intimidatorios o mentiras. Si nos remitimos a los acontecimientos de la Costa Rica de los últimos seis años, notamos que la mitad del país rechaza la imposición de un esquema neoliberal que conlleva una educación “domadora”, sumisa y domesticadora; castradora y alienante. Según datos de expertos, la diferencia en la votación entre el primero y segundo lugar en las últimas elecciones nacionales, fue de dos votos por mesa. Aseguran que esa diferencia es un asunto de capacidad logística y experiencia para movilizar. Ya hay provincias donde las posiciones oficialistas son derrotadas y otras donde esa impera por su bajo grado de escolaridad.<br /><br />El magisterio está llamado a encabezar las más importantes manifestaciones de transformación nacional. Su tarea es la de ser líder de las propuestas más serias y contundentes que nos dirijan hacia una Costa Rica inclusiva y progresista. La Costa Rica mejorada de aquellos próceres nacionales, todos y todas maestros y maestras constructores de la Costa Rica noble y en crecimiento progresista que heredamos: Omar Dengo, García Monge, Brenes Mesén, Gagini, Anastasio Alfaro, Marcelino García Flamenco, Carmen Lira, Luisa González y un ejército de maestras y maestros anónimos que forjaron la Patria de costa a costa y de frontera a frontera. Para mi ha llegado el momento histórico de asumir, desde la organización magisterial, la tarea de anunciar una nueva educación para una Patria Nueva. Superamos la etapa de denuncia por la del anuncio. Esta es la década para anunciar el nacimiento de la nueva escuela y del nuevo Magisterio Nacional. </div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-48323205046841486912008-04-27T22:18:00.000-07:002008-04-27T22:23:02.131-07:00Aquel Maestro Bueno<div align="justify"><span style="font-family:times new roman;font-size:180%;"><strong><em>Don Chico Zúñiga: aquel Maestro Bueno</em></strong><br /></span><br /><strong><em>Claudio Monge Pereira</em></strong><br /><br /> A don Chico, forma amorosa de llamar a don Francisco Zúñiga Díaz, lo conocí siendo yo un adolescente. Lo miraba en aquellos salones donde se desarrollaban actividades y encuentros revolucionarios. Y él siempre humilde y sonriente; optimista y eufórico. Sencillo como el agua, y como ella, vital para el cuerpo social que conformábamos. Por el decir de los mayores, entendía que don Chico se relacionaba con Esparta de Puntarenas, y aquello sonaba a lejanía. Por ese trajín cotidiano de la militancia, sabía que muchas personas que frecuentaban esas inolvidables veladas para escuchar a don Manuel Mora Valverde, a Fabián Dobles, Luisa González, Víctor Manuel Arroyo, Adolfo Herrera García, Fernando Chávez Molina, Eduardo Mora Valverde, Arnoldo Ferreto Segura, Joaquín Gutiérrez Mangel, Fernando Cerdas, José Meléndez Ibarra, al Cabo Marchena y a toda esa pléyade de patriotas que sí hicieron Historia de la grande, coadyuvando a forjar esta Costa Rica que hoy tenemos; venían de las periferias nacionales. Sin su concurso, esta Patria hoy sería más perversa de lo que algunos hoy pretenden imponerla, con sus caras de beato pero con uñas de gatos. Bueno, la cosa es que entre ellos andaba don Chico, siempre con su sonrisa al hombro y con su pausado pie de Maestro humilde y sencillo.<br /><br /> Escuchaba cuando decían que Chico había escrito esto y lo otro, y lo congratulaban y se congratulaban, porque don Chico era uno de ellos; de su Partido perseguido y molestado por mentes enfermizas y más que fanáticas; ignorantemente vivillos y vivillas. Y hasta llegué a tener en mis manos algún folletito con sus cuentos y poemas. Y olían a pueblo, eran frescos y humildes como él. Acariciar aquellos folletos era bellísimo; nos aportaba una ternura especial: Don Chico era de nosotros. Es decir, era un compañero, que en nuestro sentir y entender, significaba lealtad, amistad, solidaridad y seguridad.<br /><br /> Pasaron los años pequeños y vinieron los años más anchos; esos que nos llenan de territorios desconocidos que debemos recorrer sin reticencias. Simplemente caminarlos porque vivimos una causa que amamos. Entonces la lucha me llevó lejos de Costa Rica por muchos años, y allá, en perdidas ocasiones, tenía acceso a algún viejo periódico y qué belleza, en más de una ocasión nos encontramos los artículos y trabajos de don Chico. Aquello era como hablar con él, o más bien, como escucharlo. <br /><br /> Regresé a Costa Rica barbudo y me había marchado lampiño, y al poco tiempo, llegó a mis manos un librito rojo cargado de poemas. Ávidamente lo leí mientras viajaba en los autobuses de mi barrio del Sur, no obstante ser tales cacharpas que nosotros los llamábamos los “cañones de San Sebastián”. Aún siento en mis manos aquel librito rojo, con algunas ilustraciones y con el nombre de don Chico firmando la presentación. Era el producto del trabajo de educador literario allá en aquel lejano Instituto Nacional de Seguros; y al pie de la portada decía: “CAFÉ DE UPINS”. Poemas, cuentos, anécdotas y testimonios de los trabajadores de esa institución; hoy acechada por los buitres planetarios que pretenden sorber sus tripas con la connivencia de sus sumisos jerarcas.<br /><br /> Algunos años más tarde, unos amigos de aquí de San Isidro de Heredia, me convidaron para asistir al “Taller de don Chico”, así, simplemente. Y lo frecuenté en varias ocasiones, hasta que el humo pudo más que mi pasión por aquella ricura de ambiente de hermanos y hermanas mayores y menores: ¡fumaban tanto que era imposible para mí respirar! Yo que venía del campo, oloroso a cafetales, no podía soportar aquella chimenea viva que arrojaba humo hacia los cuatro costados como endiablada. No me valió de nada sentarme en los alféizares de las suculentas ventanas de la casona vieja. Desde ahí los escuchaba animadamente discutiendo y colaborando entre sí para mejorar la obra de los otros. Yo participaba bajo la tremenda preocupación de no caerme a la calle, y lo hacía agarrado de lo que fuese, como un mono amante de la literatura. Esas tertulias bajo las enseñanzas de don Chico fueron maravillosas.<br /><br /> A partir de 1992, los amigos del Grupo Ecológico RUALDO de San Isidro de Heredia, decidimos organizar un Recital de Octubre para des celebrar los 500 años de la invasión española a Costa Rica. Aquel Recital fue un éxito por la decidida participación de las y los escritores que se formaban con don Chico en su Taller del Café, y entonces acordamos realizarlo siempre para resaltar nuestra cultura y nuestros valores. Ya llevamos quince Recitales de Octubre, nacido con el apoyo mágico de aquel Maestro Bueno que fue don Chico Zúñiga Díaz. Él mismo asistió a varios y nos acompañó con su bella presencia, siempre benévola y dadivosa. Nos fotografiábamos con él y todos queríamos abrazarlo.<br /><br /> La última vez que vino ya estaba enfermo, y a través de algunos compañeros del Taller yo sabía que a él le encantaban los chayotes sazones, por eso alisté una bolsona para dársela luego de nuestro Recital. Don Chico la cargó con alguna dificultad por su peso, pero quiso llevarla él. Le conté que eran muy buenos, secos y que se pelaban como bananos. Eran de la mata que nació de los chayotones que me había regalado mi querido don Fabián Dobles hacía algunos años. Yo llamaba a esa mata “La Fabiana”, y Tata Mundo se carcajeaba, por mi ocurrencia. Esa noche isidreña acompañé a don Chico hasta el parqueo del Colegio, desde donde regresaría a San José para no volver a nuestro Recital de Octubre. Desde entonces no ha pasado ninguno sin que lo recordemos y lo nombremos, porque sabemos y sentimos que él nos acompaña y nos mira con sus ojos bondadosos y dulces; medio encorvado ya…cansado, repleto de dulzura buena y sabiduría humilde.<br /><br /> Así era don Francisco Zúñiga Díaz, el Maestro Bueno, a quien el egoísmo mediocre de las argollas oficialistas y sumisas, le negó el Premio Nacional de Cultura “Magón”, reconocimiento que su Pueblo sí le confirió, ¡y en vida!<br /><br /> </div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-61614974689371919862008-04-24T22:36:00.000-07:002008-12-11T15:41:37.393-08:00DE MAESTROS Y MINISTROS<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjy5FqC9AMeKgq19RT0F70z8eO83PPZW3hD7H2lJNK1KiH7KM-PaTOUfOYPR6vSZ8djL7e-A-_hZl0dXnE6rz_4QJDOjLCn2hBpBSsSaG3rjYmijqC8jRMwIUjZJcX4ysDQK1XPb3fhzTs/s1600-h/APSE.bmp"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5193054679320504690" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; CURSOR: hand" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjy5FqC9AMeKgq19RT0F70z8eO83PPZW3hD7H2lJNK1KiH7KM-PaTOUfOYPR6vSZ8djL7e-A-_hZl0dXnE6rz_4QJDOjLCn2hBpBSsSaG3rjYmijqC8jRMwIUjZJcX4ysDQK1XPb3fhzTs/s320/APSE.bmp" border="0" /></a><br /><a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjExr-QxAe23UGDT6sxkQp6mO9cPasLnV2NZOqrdF9_jXtHO4DVs0jGyKJdBTVopLI4GLTT7UEq_KbITvFtsaqdymSavMtc5zXY6DZfbGqDXEnxXKUx3grLJh-4AkiVQDddWG2_91fmU0A/s1600-h/APSE+DOS.bmp"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5193054687910439298" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; CURSOR: hand" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjExr-QxAe23UGDT6sxkQp6mO9cPasLnV2NZOqrdF9_jXtHO4DVs0jGyKJdBTVopLI4GLTT7UEq_KbITvFtsaqdymSavMtc5zXY6DZfbGqDXEnxXKUx3grLJh-4AkiVQDddWG2_91fmU0A/s320/APSE+DOS.bmp" border="0" /></a><br /><br /><div align="justify"><span style="font-size:180%;"><strong>De maestros y ministros</strong></span><br /><br /><strong><em><span style="font-size:130%;">Claudio Monge Pereira</span><br /></em></strong><br />Jamás se borrará de nuestra memoria aquella mueca que pretendía ser una sonrisa de prepotencia. Y no será por lo repugnante que resultaba, sino por provenir de un supuesto caballero. Claro que asistir todos los días a un Juzgado, durante la realización de un juicio contra uno de sus amigos, no hace a nadie caballero. Ni tampoco lo hace el hecho de ser elevado al rango de ministro por haber hecho barra durante muchos días en aquel Juzgado. Para eso sólo se necesitaba estar de vago y tener todo el tiempo libre para hacer muecas a la prensa. Sí…muecas con esa sonrisa bobalicona de caballo actor como no hay dos.<br />Mientras esto sucedía, los maestros de Costa Rica desarrollaban su inmensa tarea por la Patria, y aunque muchos supieran que al fin de mes su salario se perdería en alguna computadora, la devoción y el cariño no mermaban.<br />Pasaron algunos meses y el hincha de los Juzgados fue coronado como el adalid de las muecas desperdigadas; fue elevado al rango de ministro de todos los que nos ganamos el pan con el sudor de la frente, porque ha de saberse que la mayoría de los maestros anda a pie y que en el caso de las escuelas rurales, las caminatas son extenuantes y largas. Tampoco se cuenta con aire acondicionado ni en las aulas ni en las salitas para profesores. Eso sólo es para los ministros o sus asesores. O para bombetas que viven del erario público sin aportarle nada al país. En cambio, los maestros sí se sudan la gota gorda; ya sea chapaleando barro camino a Tiquiritos o tratando de no ahogarse en las empinadas y mojadas cuestas de Matinilla de Salitral; y ni qué decir de aquellos barrancos por el Socorro de Vara Blanca. En esos lugares, al más sonriente de los ministros se le apaga la sonrisa...o la mueca, según sea el caso.<br />El señor del cuentito la agarró contra los maestros y nos conculcó un derecho legítimo. Nos apuñaleó, conjuntamente con sus diputados nocturnos, y nos destrozó un régimen de pensiones que medio permitía vivir con algún decoro; sin la necesidad apremiante de vender ropa de segunda, perfumes, rifas, enciclopedias o conocimientos a universidades de dudosa reputación y calidad. Cuando él hacía clientelismo buscando el ministerio, los maestros llenábamos las calles como nunca antes nadie lo hizo ni lo hará en el futuro, a no ser que algún día recuperemos la fe burlada y les hagamos temblar sus quijadas. Se paraba en lo alto de un oculto balcón y dejaba caer sus muecas como pesados cepos sobre los pies cansados del Magisterio Nacional. Él creía que sonreía. Nosotros sabíamos que era una mueca ministerial. Pero se salió con la suya y nos dejó al garete. Y fue un mentiroso, porque ni siquiera rozó los otros regímenes que sí son de privilegio. Ahora los maestros pensamos en varios oficios y se nos olvidó votar. Votamos protesta no votando ni por ellos ni por sus turecas.<br />Regresamos a las aulas a cumplir con el mandato de los Fines de la Educación Costarricense: matemática, música, historia, lengua materna, idiomas, ciencias; y cada vez menos humanismo, porque el globalitarismo no tiene espacio para este, ya que no se traduce en dólares. Él, en cambio, se apiadó al tiempo de nuestros espoliados hermanos nicaragüenses y les ayudó mucho a través de una fundación. Los maestros entendemos bien por qué aman las fundaciones, oficiales y oficialistas; sobre todo cuando tienen a la familia bien acomodada en sus directivas y gerencia. Se parecen tanto los ministros y los exministros en esto del humanismo que practican, que hoy día tenemos más hermanos cubanos y nicas en este pequeño terruño. Estos “demócratas” los traen a nuestro país por unos dólares más…para ellos y sus privilegios. Son abogánsteres del humanismo metálico.<br />Los maestros sabemos que los molinos de la historia muelen despacio pero que muelen fino; sabemos que entre los balcones sonrientes y las calles empapadas de sudor hay un Martí de por medio. Entendemos muy bien la realidad nacional porque para explicarla nos preparamos. Y entendemos que todo lo que sube baja inexorablemnte, y que las muecas que pretendían ser sonrisas, se convierten con el tiempo en vinagre del malo y en lágrimas históricas.<br />Hoy los maestros no tenemos derecho a una pensión digna; de igual manera que no todos los hermanos cubanos en Costa Rica tienen una visa limpia, o que los explotados nicaragüenses tengan una tarjeta totalmente humanitaria. Hoy, un sector de la prensa se puso un clavel en el ojal. Hoy, los maestros nos sentimos orgullosos de que muchos de esos periodistas hayan pasado por nuestro cariño y devoción. Hoy, dormiremos repitiendo las palabras del apóstol cubano: <strong><em>“Las deudas de honor no se cobran con dinero”.</em></strong><br />Yo digo que se cobran construyendo la Historia, a diferencia de ellos que sólo la hacen. ¡ Y siempre llegaremos con una sonrisa de verdad a nuestras aulas, desperdigando esos pétalos heredados por García Flamenco, García Monge, Omar Dengo…Carmen Lyra !</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-461368962529341592008-03-07T06:18:00.001-08:002008-03-07T06:50:21.303-08:00NOTICIA CANTONAL IMPORTANTE<div align="justify"><strong>ACUERDOS APROBADOS UNANIMEMENTE POR EL GOBIERNO LOCAL ISIDREÑO</strong></div><div align="justify"></div><div align="justify"></div><div align="justify"> </div><div align="justify">Febrero, 29 de 2008, San Isidro de Heredia<br /><br /><strong>Para: Concejo Municipal<br />De: Comisión Municipal de Medio Ambiente<br /></strong><br /><span style="font-family:lucida grande;font-size:130%;">Asuntos: Acuerdos diversos por encargo del Concejo</span><br /><br /><strong><em>La Comisión Municipal de Medio Ambiente, en sesión del miércoles 27 de febrero de 2008, analizó los documentos relacionados con los acuerdos :<br /></em></strong><br /><span style="font-size:130%;">1) 1537-2007 (Oficio SM-1973-07 de la Municipalidad de Barva: Proyectos Turísticos en Zonas de Recarga Acuífera),<br /></span></div><div align="justify"><span style="font-size:130%;">2) 1559-2007 (Oficio DR-1892.SM-07 de la Municipalidad de Alajuela: Explotación y control del Recurso Hídrico),<br /></div></span><div align="justify">3) 85-2008 ( Oficio UEN Acueductos y Alcantarillados ESPH S.A. 027-2008: Instalación de Hidrantes en el Cantón),<br /></div><div align="justify">4) Asunto Especial: Plan de Contingencia Racionamiento de Agua a partir del mes de marzo remitido por la ESPH S.A. a la COMUMA,<br /></div><div align="justify">5) Aguas negras y contaminación fecal en la Urbanización Los Leones.<br /><br />Al respecto se acuerda:<br /><br />1) </div><div align="justify"><span style="font-size:180%;">A - Avalar y apoyar el acuerdo del Concejo Municipal de la Municipalidad de Barva, mediante el cual se prohíbe la instalación de cualquier Proyecto Turístico en la sección Volcán Barva del Parque Nacional “Braulio Carrillo”, por ser la zona más importante de recargas acuíferas del Norte de Heredia, de la cual dependerá el futuro del Recurso Hídrico para el Valle Central del país. </span></div><div align="justify"><span style="font-size:180%;">B- Comunicar este acuerdo a la Comisión de Asuntos Ambientales de la Asamblea Legislativa, a las Municipalidades de la provincia, a los Medios de Comunicación y a las Fuerzas Vivas cantonales.</span></div><div align="justify"><br />2) <span style="font-size:180%;">Este acuerdo del Concejo Municipal de la Municipalidad de Alajuela da respuesta a la Junta Directiva del SENARA, con respecto a la explotación y control del Recurso Hídrico en general, y señala directrices en relación con: A - Propuesta de Zonificación, B- Propuesta para la explotación de los Recursos Hídricos y, C- Propuesta para el control del uso de los Recursos Hídricos. Todos los ejes analizados y aprobados por la Comisión de Asuntos Ambientales de la Municipalidad de Alajuela y avalados por su Concejo Municipal, atañen e involucran a las siguientes municipalidades: Santa Bárbara, Barva, San Rafael, Heredia cantón central, Flores, Santo Domingo, San Pablo, Belén, Alajuela cantón central, San José cantón Central, Goicoechea, Moravia, Vázquez de Coronado, Tibás, La Unión, Montes de Oca, Santa Ana y SAN ISIDRO DE HEREDIA. La COMUMA de San Isidro recomienda apoyar y avalar las recomendaciones aprobadas por la Municipalidad de Alajuela, así como trasladarlas a la Administración Municipal para su acatamiento vinculante; también se insta a los respectivos Departamentos Municipales a darle seguimiento a lo indicado y mantener vigilancia constante sobre el particular. Indicamos que el futuro del Recurso Hídrico está en juego, y que del cumplimiento de las directrices mencionadas, dependerá en gran medida el bienestar de las futuras generaciones.</span> </div><div align="justify"><br />3) Se recomienda solicitar al Concejo Municipal, tomar un acuerdo mediante el cual se le exprese a la Junta Directiva de la ESPH S. A. nuestro más profundo agradecimiento por la instalación en nuestro cantón de 11 Hidrantes nuevos, que sumados a los 7 existentes, llenan en gran medida las necesidades cantonales. La ESPH S. A. cumple lo prometido con su instalación e invierte recursos en nuestro cantón para el bienestar de la comunidad.<br /></div><div align="justify">4) Plan de Contingencia Racionamiento de Agua a partir del mes de marzo remitido por la ESPH S.A. a la COMUMA: La Comisión Municipal de Medio Ambiente recomienda que el Concejo Municipal instruya a la Administración para que se elabore una Hoja suelta o Boletín comunicándole a todas las Comunidades Isidreñas el Plan De Racionamiento de Agua para todo el verano por parte de la ESPH s.a., así mismo indica que dicho boletín debe enviarse a todos los Templos (independientemente de su denominación religiosa), a todas las Fuerzas Vivas, a los Centros Educativos, EBAIS, Hogares para Ancianos, CEN – CINAI y principales negocios, con la finalidad de PREVENIR a las familias y que tomen las medidas del caso.</div><div align="justify"><br />5) Se recomienda al Concejo Municipal, solicitar al Ministerio de Salud mediante sendo acuerdo, una INSPECCIÓN en la mencionada urbanización, porque según múltiples quejas y denuncias de algunos vecinos, la descarga de aguas negras y materia fecal se hace directamente a los caños y calles públicas; con las consiguientes molestias y peligros para la salud.<br /><br />Regidores:<br /><br /><strong><em>Claudio Monge Pereira<br />Presidente COMUMA </em></strong></div><div align="justify"><strong><em></em></strong></div><div align="justify"><strong><em>Rolando Zamora Villalobos</em></strong></div><div align="justify"><strong><em>Secretario COMUMA</em></strong> </div>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-64400441854708574662008-03-06T22:20:00.000-08:002008-03-06T22:24:42.680-08:00Educación para Liberar<div align="justify"><span style="font-family:lucida grande;"><span style="font-size:180%;">¿Qué Educación urge para una Patria mejor?</span><br /><br /><br /><span style="font-size:130%;">Claudio Monge Pereira</span><br /></span><br /><br />Aseguraba Martí, que tan detestable es un pueblo que subyuga a otro pueblo, como aquel que es esclavo de sí mismo. Por lo tanto, parafraseándolo, podemos asegurar que aquella Educación que no libera, esclaviza. Y esto, más que en discursos y ponencias, se vivencia en la práctica permanente de la construcción social y la lucha por establecer una sociedad justa y digna, en la que la palabra mercado deje de ser la razón del desarrollo; y por el contrario, se fomente la practica de la solidaridad, la cooperación y el amor.<br /><br />La educación es un acto ineludible de amor, y en ese acto estamos involucrados los estudiantes, la familia y los educadores. El estado no se escapa y no puede eludir este mandato social. Concebida así, la educación es un proceso integral, dentro del cual, el amor es la levadura que le permitirá crecer sin complejos a todos los Seres Humanos. Aquí, el amor es la clave o la llave que permite abrir las puertas, no sólo del conocimiento y del saber, sino también de la liberación mental y espiritual para construir la justicia económica y social indispensables para mancomunar una Sociedad Completa. Por medio de la participación política decente, la práctica de la solidaridad y la paz; la defensa a ultranza del Universo; fortalecemos la tolerancia y no la sumisión, el respeto hacia las diferencias y la colectivización de las soluciones a los problemas de las mayorías pobres de las sociedades modernas.<br /><br />La educación, se ha dicho y se ha escrito, es un arma; pero debe acotarse que en manos de mediocres y de arribistas casuales, es un arma peligrosa. Por ello, es preferible reafirmar como lo señalaran insignes educadores y educadoras del calibre de Omar Dengo, Carmen Lyra, Luisa González, Talía Rojas, Carlos Monge Alfaro, Joaquín García Monge, o Paulo Freire, que la educación es un instrumento. Y un instrumento nos recuerda una pala o una hoz, un pico o un rastrillo, un martillo o un serrucho, una llave francesa o una inglesa; una guitarra, un piano, un Altar o un Cáliz; o si quisiéramos, una lira, que es instrumento de los Ángeles. <br /><br />Un instrumento se utiliza para construir, para crear o para recrear. La Educación es construcción y la construcción es eufórica, es decir, es alegre, dichosa, propositiva, creativa, entusiasta, proactiva, amable y amorosa. La amorosidad es la capacidad que logremos desarrollar para amarnos los unos a los otros, y la amabilidad es esa valiente decisión que asumamos para permitir que se nos ame y amar.<br /><br /> La Educación es un Poder, y el poder concebido y aplicado con justicia social y moral, es la esencia que debe alimentar a las educadoras y a los educadores. Este es el eje espiral a través del cual gira, desde la base hasta la cima, la consecución de una Patria dignamente pacífica y educadora; capaz de ofrecerle a la Humanidad Seres Humanos honrados, trabajadores, optimistas, pacíficos, justos, solidarios y eufóricos.<br /><br />No existe Educación neutral, por ello no hay ni Escuelas ni aulas, ni educadores ni estudiantes neutrales. Lo anterior nos indica que tampoco el Magisterio pueda serlo, y estas aseveraciones nos conducen a reafirmar que la Pedagogía debe tomar partido, y hacerlo a favor de aquellas propuestas que la humanicen y la propongan como una guía para la formación de ciudadanos y ciudadanas constructores de espacios democráticos y libres en permanente perfección.<br /><br />En esta concepción, el pedagogo es un poeta y un guerrero: un poeta porque crea y recrea, es decir, porque su trabajo y su entrega dignifican la Creación. Y un guerrero, porque lucha con valentía para que las utopías se transformen en realidades palpables; visibles y socializables: es un Guerrero – Poeta…un enamorado de la Creación, pero sobretodo, un enamorado incuestionable del Creador de todos los Seres y las cosas. Ese Educador es un experto en su arduo recorrido por el DESIERTO.<br /><br />Esto del desierto es una metáfora creada por el sacerdote católico suizo, Iván Illich. La mejor definición que yo conozco de metáfora es la que afirma que ella es una significación por ausencia. Y eso es precisamente lo que debemos enseñar a nuestros estudiantes: descubrir la maravillosa vida que existe detrás de todas las lacras que hemos creado por apartarnos del camino señalado por quien tanto nos ama.<br /><br />Detrás de todo lo feo que nos rodea existe una alternativa: lo feo no podría saberse si no sabemos lo bello. El mundo fue hecho con el más grande de todos los amores; no es un experimento para jugar, no es un divertimento del Padre. Es su Obra maravillosa…es el PAN más tibio y nutritivo jamás concebido.<br /><br />Iván Illich se refiere a las tentaciones que nos ofrecen los modelos ideológicos que han tratado de imponerse a nuestros pueblos a través de su Historia. Nos ofrecían aquella tentadora Babel del Este, en la cual, se decía, se construía la sociedad más justa y equitativa. No puede haber justicia opacando la dignidad personal del Ser Humano; aunque este tenga el pana material en abundancia. Un cuerpo no vale nada ni es nada sin Espíritu. Y también nos siguen ofreciendo un estilo de vida que infla a la gente hasta que no puede caminar, pero que lo enferma y le transforma su alma en una adiposidad más. Ese crisol de extremos asesinan al Ser Humano: lo descalifican para alcanzar el Reino. Hoy se nos ofrecen tratados que no garantizan nuestro desarrollo como país. Al igual que miles de inmigrantes en el mundo, nuestros pueblos se empobrecerían más de aceptar incondicionalmente instrumentos internacionales que ignoran el nivel que hemos logrado como país; no obstante nuestros problemas. Se dice que hoy tenemos menos pobres en Costa Rica, pero que los ricos son cada vez más ricos. Suena irónico porque es difícil comprender cómo hay menos pobres habiendo mayor concentración de la riqueza en menos familias.<br /><br />Illich nos esclarece la significación por ausencia de su metáfora del Desierto: este es inhóspito y cruel, acaba con la vida…es estéril. ¿Quién puede sobrevivir en él?, ¿Quién logra salir de él y erguirse libre y poderoso? Nuestro Hermano Moisés lo logra: lo atraviesa tan sólo con un cayado y se vuelve a erguir libre y poderoso. Y no sólo eso. Regresa y conociendo sus adversidades lo recorre de nuevo como faro de su Pueblo. Entonces, el significado de la metáfora es, que sólo es capaz de liberar a los demás, aquel que ya fue liberado y es libre como el que más.<br /><br />Entonces, siguiendo la lógica de esa metáfora, sólo libera a sus estudiantes aquel maestro que ya fue liberado y por lo tanto es libre: libre para crear y construir con su ejemplo y su conocimiento; libre para luchar por la justicia y no conformarse con dar la limosna al desvalido.<br /><br />El educador liberador es un Poeta porque la Poesía es creación inspirada, y la Pedagogía, por su lado, es herramienta útil del conocimiento educativo y formativo. Y es además, un Guerrero, no porque deba ser un belicoso, sino porque debe hacerle la guerra a la mediocridad intelectual y espiritual; porque debe combatir la ignorancia y la superstición, y porque debe entregarse en la lucha contra las desigualdades que minimizan al Ser Humano, despojándolo de su imagen y semejanza del Creador.<br /><br />Ese educador deberá forjarse y poseer algunas características:<br /><br />1) Sensible ante las desigualdades<br />2) Enamorado de la Justicia Social<br />3) Amable con la Humanidad y con el Planeta<br />4) Disponible como un médico, un bombero o un fontanero<br />5) Valeroso<br />6) Honesto hasta decir basta<br />7) Humilde<br />8) Solidario<br />9) Definido<br />10) Vocero de los que no tienen voz<br />11) Atento<br />12) Soñador<br />13) Estudioso<br />14) Creativo<br />15) Asertivo y proactivo<br />16) Pedagogo<br />17) Generoso<br />18) Justo y equitativo<br />19) Pensador<br />20) Inconforme consigo mismo<br />21) Crítico<br />22) Andariego<br />23) Inclaudicable<br />24) Denunciante, y<br />25) Anunciante.<br /><br />Esta caracterización no obedece a ningún orden específico. La propongo de la misma manera que se me inspiró, y probablemente reforzada por la praxis pedagógica que desarrollé durante 30 años de Amistad Pedagógica con mis estudiantes. Esa amistad me enseñó a no decirle jamás a quien aprende “alumno”, porque no existe absolutamente ninguna persona “sin luz”. Un alumno es aquel ser que no tiene luz; que está apagado, y semejante fenómeno lo logra , más bien, un sistema educativo vertical y enciclopédico…uno bancario que considera al estudiante un ente pasivo: una tabula rassa.<br /><br />Para construir una sociedad mejor, es decir, justa y bella, propongo una educación que invierta el axioma tradicional del educador como Rey Filósofo y del educando como Arcilla Maleable. Así, el educando será el Estudiante Filósofo y el Educador será el Molde Maleable. Aquel esquema rígido, hecho de yeso pedagógico, ese que sólo produce momias rígidas de pensamiento, será abolido y desterrado. El ser humano verá hermanos en su prójimo, y lo que haga lo hará en el nombre de Aquel que siéndolo todo, renunció a todo por AMOR:<br />¿Acaso puede existir una Pedagogía que supere la que nos enseña a diario el Maestro? El resultado es, la Libertad Plena del Espíritu Creador y comprometido. De ahí vendrá una Patria Mejor.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-57199081932078730442008-02-16T23:19:00.000-08:002008-02-16T23:31:20.812-08:00CARMEN LYRA: DAVID DE TODOS LOS TIEMPOS<span style="font-size:180%;"><strong>CARMEN LYRA: </strong></span><br /><div align="justify"><span style="font-size:180%;"><strong>Aportes a la Sociedad Costarricense y a la Educación</strong><br /></span><br /><br /> <br /><br /><strong><em> </em></strong><span style="font-size:130%;"><strong><em>Claudio Monge Pereira</em></strong><br /></span><br /><br /><br /> <br />De la siguiente manera, mediante una carta personal, el señor Juan Luis Campos, le comunica a don Joaquín García Monge el fallecimiento de Carmen Lyra:<br /> « Murió, Isabel Carvajal, lejos del sufrido pueblo costarricense, pero convencida de que nosotros seguiremos la batalla, agitando la bandera revolucionaria, antiimperialista y popular; de que su ejemplo, su virtud, su corazón nutren nuestras acciones. » (1-50)<br /> Pero no murió, como aseguraban sus compañeros obreros. Ella fue desterrada viva, y así quedó para siempre en el corazón del proletariado costarricense, que la despidió personalmente mediante una pequeña delegación, en el viejo Aeropuerto de la Sabana.<br />La Historia de la Humanidad nos enseña que solamente los genios y los revolucionarios, que resisten la prueba del tiempo y los acontecimientos, siguen después de muertos, inspirando y organizando a sus compañeros y compañeras. Ellos y ellas continúan, desde la quietud de sus páginas o desde la escena de sus actos, sembrando la inquietud en las mentes y en los corazones de las sociedades. Es desde la inmortalidad de esas acciones que se promueve la terrenalidad de sus ideales. Y por ello es que seguimos hablando de la " Niña Chabela " como si ella estuviera a nuestro lado permanentemente, vigilando lo que hacemos y por quiénes lo hacemos; indicándonos con su dulce y suave voz cuál es el camino de la justicia para todos los seres humanos. Y muy en especial para la infancia costarricense, de la cual ella se erigió por sus obras literarias y su praxis, en madre espiritual y conductora pedagógica<br /> Es una tarea sumamente difícil separar la labor de Carmen Lyra por secciones o áreas de interés, porque la labor de ella, más que la de ningún otro educador de su época, fue una tarea absolutamente integral e integradora. Y esto se debe, principalmente, a su extraordinaria capacidad para comprender y aceptar que la labor pedagógica, es una tarea científica que no se desliga de las otras actividades del ser humano; como por ejemplo, la ideología, la política, el arte, la literatura, la religión, la soberanía o el amor.<br /> Probablemente esto hizo que ella, ya Maestra, disfrazada de muchacho callejero dirigiera la quema del diario oficial de la tiranía de los Tinoco; dando muestra fehaciente de que un educador debe saber, en el justo momento y cuando la Patria lo reclame, cambiar el pupitre que es la trinchera de la ciencia, por cualquier otra actividad que posibilite y garantice que la Patria; seguirá esgrimiendo los libros y los arados en señal de civilización.<br /> No escatimó ningún esfuerzo para fundar una universidad obrera, que abriera las puertas de la academia a la sabiduría obrera y popular; para que ambas se complementaran, demostrando que una escuela separada de la vida real es poco o casi nada lo que puede hacer con éxito.<br /> Sabía a plenitud Carmen Lyra, que la escuela es el fiel reflejo de la sociedad en que ella está inserta y funciona; que todo lo que suceda en esa sociedad afectará negativa o positivamente la labor del educador en el salón de clases; que la desnutrición y las condiciones higiénicas que ostenta el ser humano, son premisas claves para un adecuado desarrollo pedagógico. Que cuando el hogar está destruido por las lacras que se derivan de las enfermedades sociales, el ser humano, más allá de los libros y los recursos didácticos, reclama justicia y espacio para respirar sin contaminaciones. Sabía bien que en la institución educativa se le puede suministrar a la infancia arroz y frijoles hasta en el período de vacaciones; y que se le puede suministrar un uniforme o remendarle el raído, pero sobre todo sabía que se trata de propiciar y promover el cambio de aquellas condiciones estructurales y superestructurales, que eternizan y justifican las diferencias económicas, sociales y culturales entre los seres humanos.<br /> Al respecto, es de suma relevancia escuchar las palabras de su inseparable compañera, Luisa González, Maestra Normalista; luchadora junto con ella en la Escuela Maternal Montessoriana:<br /> « Aquella Escuela Maternal era un oasis de paz, de alegría y de cultura; yo estaba segura que de aquel jardín pedagógico saldrían niños felices y buenos, porque nosotras teníamos en nuestras manos los métodos científicos que aprendiéramos en los libros de María Montessori, de Decroly y de muchos otros pedagogos modernos.<br /> Tales métodos no podían fallar; nosotras conocíamos bien las bases psicológicas para crear en los niños los hábitos de higiene, de disciplina, de estudio y de trabajo; sabíamos estimular en ellos la sensibilidad artística, convencidas del valor que tiene la educación estética desde los primeros años de la infancia. » (2-124/125) <br /> No obstante, agrega doña Luisa posteriormente:<br /> « Los materiales humanos que llegaban a la Maternal eran pobres matitas desmirriadas, agotadas prematuramente, por ese viento ingrato y frío, que sopla implacable sobre tantas vidas inocentes de niños hambrientos y desnutridos.<br /> Las teorías sobre la higiene mental, resbalaban sobre aquellas cabecitas de pelo seco, áspero y sucio; entre las patitas descalzas quedaban enredadas, las teorías y conceptos filosóficos sobre la educación y el papel de la escuela en la sociedad. » (3-124) ...<br /><br />« Un rictus amargo asomaba a la cara de Carmen Lyra, que un día de tantos, no aguantó más, y ordenó cerrar el piano, al ver las piruetas ridículas y grotescas que hacía la pobre Angelilla tratando de ajustar sus pasos al ritmo de la música de Chopin.<br /><br /> ¡ Qué lecciones más vivas y crueles nos daba la vida todos los días en aquella Escuela Maternal, al lado de Carmen Lyra, que nos haría comprender las contradicciones de la pedagogía idealista, frente a las realidades que tercamente despedazaban nuestros planes y nuestros sueños ! » (4-125)<br /> <br /> La realidad es la madre de todas las verdades, y es en su conocimiento donde se forja cualquier posible solución a los planes que surgen de los sueños. Y una actitud científica en el tratamiento de los problemas pedagógicos, es lo que a nuestro juicio lleva a comprender, que la más útil de las teorías, es la que se fundamenta en el conocimiento histórico y sociológico del entorno. Por tales motivos, la labor pedagógica que no se vea respaldada por un estudio de la realidad, sólo puede conducirnos a frustraciones; situación que de hecho genera la deserción de magníficos prospectos en el campo de la educación.<br /><br /> « Eminentes sociólogos, higienistas, médicos pediatras, educadores, escritores y políticos nacionales y extranjeros, discutían por la prensa y daban conferencias sobre los graves problemas de la educación nacional, sobre el aumento de las cifras de la prostitución, sobre las desnutrición del pueblo, etc.,etc. Ninguna de esas grandes personalidades se atrevía a poner el dedo en la llaga. Solamente Carmen Lyra, con su ironía lacerante, levantaba ampollas entre los círculos de intelectuales y politiqueros que fruncían la nariz ante las denuncias de su pluma magistral. » señala doña Luisa (6-126). Y continúa:<br /><br />« Los brillantes planteamientos que hacía Omar Dengo sobre los problemas de la cultura y el desarrollo de la personalidad humana, seguían apasionando mi criterio de maestra idealista, que creía tener en mis manos el don milagroso para modelar las almas, y hasta el destino de los niños que llegaban a mi escuela. » (7-127)<br /> El criterio esbozado anteriormente por doña Luisa, nos indica que el educador siempre guarda una esperanza, y en el fondo de su alma cree, ilusoriamente, que podrá resolver problemas que son de incumbencia de toda la sociedad en su conjunto; y cuya resolución dependerá de la capacidad que tengan los poseedores de los medios de producción para cesar su explotación; o de la capacidad de las fuerzas trabajadoras para organizar y ejecutar su liberación. La misma Luisa González lo relata acertadamente:<br /><br />« Como un matapalo, se enredaban en la Escuela Maternal el escepticismo y la desesperanza; nuestro trabajo era como pegar parches aquí y allá en tela vieja y deshilachada; como echar agua en un canasto, decía Carmen Lyra...» (8-128)<br /><br />« No podíamos huir de los problemas, ni tampoco debíamos fosilizarnos dentro de la rutina absurda y fácil de la pedagogía oficial, para acumular tranquilas los años que nos asegurarían una buena pensión.<br /> Un fermento ácido corroía nuestras conciencias restando alegría y entusiasmo a nuestra labor educativa, tan sin perspectivas, tan desajustada del ambiente social.<br /> Sentíamos el fracaso de nuestros planes, y no veíamos las causas que originaban los problemas que sufrían aquellos niños de la Maternal.<br /> Nos debatíamos todos los días en aquel mar de contradicciones, sintiéndonos siempre incapaces de resolver radicalmente los graves problemas económicos y sociales que teníamos frente a nosotras.» (9-129)<br /> <br /> Ninguno de nosotros, en su sano juicio, podría negar que exactamente los problemas señalados por doña Luisa González, son los mismos que hoy, setenta años después de creada la Escuela Maternal, aquejan a enormes sectores que asisten en estado de sobrevivencia a las escuelas costarricenses . Miles de compatriotas desnutridos o mal comidos, mal vestidos y peor calzados, sin útiles escolares, con todos sus sueños frustrados o por frustrarse, atiborran las escuelas del país.<br /> Y es precisamente de una situación de tal envergadura, de donde surge la gran conclusión de la Niña Chabela:<br /><br /> « ¡ Al diablo la pedagogía ! ¡ A la porra esta caricatura, esta farsa de educación !, al ver que como espuma, resbalaban las buenas intenciones, sobre la trágica realidad que vivían diariamente esos pobres chiquillos de la Maternal...<br />Puso en evidencia, con gran sentido irónico y crítico, las fantasías y la farsa de la pedagogía oficial burlándose mil veces de ese "niño hipotético", prefabricado, que inventan muchos pedagogos ilusos que viven en las nubes, esperando que la cultura, por si sola, haga el milagro de terminar con el más negro de todos los crímenes del mundo: el hambre y la explotación de los niños. » (10-130)<br /><br /> Pedagogía sin realidad, es material solamente para alimentar utopías sin esperanza; por tal motivo, es perfectamente comprensible que la fundadora de la Educación Preescolar Pública Costarricense, llegara con sus compañeras de proyecto a las anteriores aseveraciones.<br />La educación cumple, en cualquier sociedad, una serie de funciones que le asignan un papel reproductor del sistema; por tal motivo no basta con llegar a ella cargado de buenas intenciones y sueños. Es necesario, como Carmen Lyra, estudiar las causas que originan el sistema de explotación de los seres humanos, para poder plantear soluciones acordes con las posibilidades de la educación y sus limitaciones.<br /> Recordemos que el espíritu que prevalecía en el proyecto pedagógico de la primera mitad de siglo, con algunos intervalos, estaba más ligado a los aspectos sociales de la educación que a los técnicos. Interesaba el hombre integralmente y no solo como un hipotético receptor de conocimientos, las más de la veces, abstractos. Era el Ser Humano inserto en el mundo real el que llamaba la atención de maestros como Joaquín García Monge, Omar Dengo y otros, que ligaban la educación a un proyecto de sociedad humanista y justo.<br />Podríamos asegurar, que entre los aportes más significativos realizados por Carmen Lyra a la educación costarricense, se pueden señalar los siguientes:<br /><br />1) Fundación de la Educación Preescolar Pública Costarricense.<br /><br />Esto marca un hito histórico, no sólo porque Costa Rica se pone a la vanguardia en la región al lado de países más avanzados que el nuestro, sino porque establece con ello las bases que han servido en otras latitudes para fortalecer y engrandecer, los principios democráticos que sustentan la formación de sociedades más equitativas. Vislumbraba Carmen Lyra, que es allí donde se comienza a fraguar la formación de ciudadanos para construir una Patria digna.<br /> Entre las ideas que impulsó fue la creación de casas cuna (Kinder) atendidas por maestras de profesión. Esto demuestra una visión futurista, ya que evidencia una acción concreta para que miles de mujeres salieran de su “papel” de esposas amas de casa para que se incorporan al mercado laboral costarricense . Por ello en 1924, se establece la atención al niño pequeño como una obligación del Estado .<br /><br />2) Incorporación a la educación preescolar del factor científico, en cuanto este permite ligar la educación con la realidad y con el Proyecto Nacional de Desarrollo.<br /><br />Cómo negar que esto elimina el mito de que la educación inicial debe ser pueril o superficial; que no necesita de elementos planificadores y estructurales para organizar estos procesos partiendo de un profundo conocimiento sociológico, histórico, filosófico, psicológico y cultural. El niño y la niña no son “personitas” manipulables con un sellito o un cromito; son seres humanos integrales, con necesidades sociales, psicológicas, biológicas o culturales reales y concretas. Se debe conocer el Proyecto Nacional, escudriñar qué tipo de sociedad y qué tipo de Ser Humano persigue formar, porque si esto no se conoce, nuestra labor pedagógica es incierta y acomodaticia; y será de gran provecho para quienes ven en el poder el medio para domesticar y no para formar.<br />Cuenta Margarita Castro que Carmen Lyra, antes de abrir la Escuela Maternal Montesoriana, las obligó a Luisa González y a ella a leer mucha literatura sobre educación preescolar, y les explicó la importancia de la labor que iban a desarrollar, además tenían que realizar una investigación sociológica de los alumnos, para lo que les dio cuestionarios que debían llenar con los datos socio - ambientales de cada niño.<br />De esta forma se enteraron que muchos de los niños que iban a ingresar no tenían comida, en sus casas no había ventanas, dormían en petates o en tablas, no había baños ni servicios sanitarios, se bañaban en los ríos o en las acequias; muchos nunca habían tomado leche y jamás habían utilizado un cepillo de dientes.<br />Aseguraba Carmen Lyra:<br /><br />“Deben desarrollarse los conceptos con bases científicas; donde en realidad se sepa el cómo y por qué de las situaciones que constantemente se presentan en nuestra vida...” <br /> <br />3) Introducción y aplicación del concepto de comedor escolar, no como quitahambres, sino como parte de una formación integral que incluye hábitos alimentarios e higiénicos; además de la incorporación de la Nutrición como aliada de la Pedagogía.<br /><br />Para Carmen Lyra estaba muy claro el precepto aquel de mente sana en cuerpo sano. Un desarrollo normal de las capacidades físicas y mentales se logra si el Ser Humano goza de una adecuada alimentación. Pero esta no es responsabilidad exclusiva de la institución escolar, porque esta con sus exangües presupuestos sólo paliará hambres atrasadas. Por ello ella manda a clausurar el piano de la Maternal, porque con desnutrición los sentidos se atrofian y la adquisición de cultura no es prioritaria. Ella manifiesta claramente que se deben realizar transformaciones estructurales de clase para poner coto a las desigualdades económicas que generan la explotación y el hambre. <br /><br />4) Fundación de la educación de adultos para la clase trabajadora.<br /><br />Para Carmen Lyra, como persona marxista – leninista, estaba claro que la clase trabajadora como producto de años de injusticia y discriminación, era “clase social en si”; categoría marxista que establece que la pasividad proletaria es producto de la falta de organización política, y por ello el que ostenta el poder puede con cierta facilidad espoliarlo y someterlo. Entonces se hace indispensable educar a los trabajadores, obreros y campesinos, para que a través de procesos pedagógicos que se fundamenten en el conocimiento de la psicología de los adultos y de sus inquietudes, necesidades y sueños, se pueda lograr su concientización clasista. No se trata solamente de alfabetizar, sino de alfabetizar y repensar la sociedad y las potencialidades de ellos como clase social. Es decir, lograr dar un salto de calidad pasando de la categoría de clase social en si, a clase social para si; otra categoría marxista que es premisa para cualquier transformación revolucionaria de la sociedad.<br /><br />5) Desmitificación de la pedagogía “oficialista”.<br /><br />Existe una pedagogía oficial y oficialista que camufla muy sutilmente las desigualdades sociales, bajo el mito de la movilidad social para todos a través del Sistema Educativo. El discurso pedagógico oficial oculta adrede las funciones reproductoras y adaptadoras de la Educación y de la Escuela. La Escuela capitalista transmite los valores y principios de la clase dominante con el fin de reproducir la ideología que los sustenta. Lo mismo hace con los fundamentos políticos de la sociedad que ella promueve y refuerza. Está claro para esta Maestra, que aquellos que pueden escalar en esa pirámide serán los futuros cuadros profesionales que moldearán los perfiles económicos de la clase que sustenta su poder en ellos. <br /><br />6) Ligamen de la escuela y la educación con la comunidad y con la familia.<br /><br />La escuela no es un ente asocial . Ella no vive ni sobrevive aislada de los avatares sociales; es un cuerpo vivo con entrañas históricas. Por ello la Escuela y la educación como tales, deben ser pivote para enrumbar a las comunidades por los senderos del progreso y la emancipación. Para ello es de suyo indispensable que estén indisolublemente ligadas con la Familia, porque recordemos que Carmen Lyra mezcla en su formación influencia cristiana y escuela marxista – leninista. La Familia es una sociedad inicial desde la cual parte el comportamiento de los individuos hacia sus entornos. Por ello la Escuela y la Educación participan de la formación de los ciudadanos para la construcción de la Patria. No hay nada aislado ni casual. Una Nueva Sociedad se sustenta en una nueva escuela y en una nueva educación. El resultado es una nueva familia y una nueva comunidad.<br />Las siguientes son sus palabras:<br />“Muchos de los importantísimos problemas en el porvenir de la nación deben plantearse en las aulas y es imperativo que presidan en él los mejores expertos que puedan obtenerse.”<br /><br />7) Vinculación del trabajo docente con el trabajo intelectual extra escuela.<br /><br />Los educadores no son neutros. Son focos generadores de pensamiento y acción para organizar, promover y concretar acciones que consoliden la formación de un contingente intelectual que sea conciencia lúcida. Carmen Lyra convirtió su casa, ubicada cerca de donde hoy se levanta el edificio del INS, en Universidad Abierta para todo aquel o aquella que deseara confrontar ideas y crecer como Ser Humano en el ejercicio de esas jornadas de reflexión ciudadana y pedagógica.<br /> Fueron cientos de personas las que pasaron por su casa, ya sea para tertuliar, pedir consejo, compartir inquietudes o para organizar acciones que pusieran en jaque las políticas capitalistas; incluidas la Educación y la Escuela como partes integrales del Aparato Ideológico del Estado.<br /> Carmen Lyra obligaba a quienes trabajaban con ella a leer mucho y permanentemente; exigía que estuvieran actualizadas en sus saberes y conocimientos; recomendaba lecturas y comprobaba si las habían realizado. Sabía perfectamente que el conocimiento no está exclusivamente en los libros, pero también comprendía que es necesario investigar y reforzar las prácticas pedagógicas con un sistemático trabajo intelectual fuera de las aulas. <br /> Conminaba a quienes ella creía que tenían la capacidad para escribir a que lo hicieran; así, muchos de nuestros escritores le deben su inicio y consolidación a esta Maestra. Entre estos escritores podemos nombrar a Carlos Luis Fallas Sibaja, nuestro entrañable obrero bananero CALUFA, cuyos manuscritos ella revisaba sugiriéndole innovaciones. Por ejemplo, Calufa había titulado una de sus novelas “El infierno verde”; pero el ingenio y la picardía de Carmen Lyra la llevaron a sugerirle que la titulara mejor “Mamita Yunai”. Hoy, todos sabemos que esto fue un tremendo acierto visionario. A la United Fruit Company se le conoce en todo el mundo como “Mamita Yunai”.<br /><br />8) Participación del magisterio en las luchas generales y específicas de la clase obrera y campesina.<br /><br />El Magisterio Nacional no es un ejército de Apóstoles inmaculados, indiferentes frente a las penurias y penalidades del proletariado. Por el contrario, es un Frente Pensante y Pensador que ayuda a la organización popular para conquistar sus anhelos. La vida, el entorno social, no es ajeno al quehacer de los educadores; antes bien, es el escenario para llevar a la práctica el credo libertador de este gremio numeroso e instruido.<br />Carmen Lyra toma partido, y lo hace en uno de los frentes más aguerridos, el Partido Comunista de Costa Rica; desde cuyas filas ellas emprende importantísimas acciones para la vida nacional. Entre estas acciones podemos citar una de inmensidad histórica: la fundación de la Organización de Maestros Costarricenses en 1936.<br />También se debe traer a colación que ella jefeó la lucha de los educadores costarricenses contra la dictadura de los Tinoco, asumiendo personalmente la quema del edificio del diario oficial de la dictadura “La Información”; disfrazada de niño callejero limpiabotas.<br />Aseguraba ella:<br />“El rol de los maestros es hoy decisivo en los destinos de la Patria. Creo que es preciso despertar su mentalidad hasta que lleguen a interesarse en las luchas políticas que hoy se sostienen hasta el extremo de hacerse partícipes de ellas” <br /><br />9) Conquista de un papel protagónico para la mujer en una sociedad abiertamente machista.<br /><br />Desde las aulas de la Escuela Normal, Carmen Lyra pregonaba e impulsaba la participación femenina en todos los ámbitos de la vida. La mujer compañera del hombre en todas las luchas. La mujer educándose y preparándose para conquistar un espacio real en la sociedad.<br />Siguiendo este principio eminentemente educativo, al lado de su camarada Luisa González, funda el Sindicato Único de Mujeres Trabajadoras; organización que servirá para pelear la conquista de una igualdad real en las condiciones laborales de la mujer costarricense. También se debe destacar que ella es quien emprende de manera orgánica y estructural, la lucha por el sufragio universal para la población femenina; lucha que sentará las bases para la posterior conquista de este derecho.<br /><br />10) Ejercer el Magisterio comprendiendo que todo proyecto educativo está ligado a un proyecto ideológico - político y viceversa.<br /><br />La educación forma parte del aparato ideológico del estado, si este no funciona a cabalidad es menester que funcione mejor el aparato represivo. La disyuntiva es sumisión pasiva o comprensión de la paradoja para actuar coherentemente. La escuela no debe ser el cuartel donde se castren los sueños de creación y libertad, sino un taller donde se forjen los más preciados anhelos de emancipación del Ser Humano.<br />Todo proyecto político conlleva un proyecto pedagógico. Comprender esta situación, es garantizar una actitud contestataria, ante las injusticias que terminan enviando a las aulas una infancia desmirriada y hambrienta.<br /><br />11) Erradicación de la mojigatería y el puritanismo de las aulas costarricenses.<br /><br />El ambiente que se vivía en las aulas y academias costarricenses estaba muy influenciado por la iglesia y los diversos grupos ligados a ella. Esto permitía que se aplicaran medidas disciplinarias y correctivas contra los estudiantes por cuestiones a veces baladíes. Acotamos esto porque se aceptaba con facilidad y se permitía el castigo impune contra quienes desde la óptica de las autoridades violaban las normas de convivencia “decente y aceptable.”<br />Siguiendo esa línea de acción, en una ocasión se convocó a un Consejo de Profesoras y Profesoras en la Escuela Normal para acordar la expulsión de una pareja de estudiantes que fueron pillados in fraganti en pleno y sabroso beso. La alocución vehemente, tajante, valiente y sin prejuicios de Carmen Lyra salvó de la Hoguera a esta pareja; y a partir de ese momento histórico a nadie se le volvió ocurrir expulsar estudiantes por amarse.<br /><br />12) Inserción de la Educación Ambiental en las aulas costarricenses.<br /><br />La claridad ideológica de María Isabel Carvajal le ayudaba a comprender claramente la importancia de preservar la naturaleza y de protegerla. Ella entendía bien que el capitalismo es voraz con sus recursos naturales, y que cuando de aumentar su capital se trata, todo corre peligro; desde la Paz mundial hasta los bosques y los mares. Por ello organizaba actividades tendientes a formar y reforzar una mentalidad ecológica en las personas; comenzando por sus estudiantes.<br /> Carmen Lyra, entre otras actividades realizaba una que ella llamaba “La fiesta de los pájaros ”, que consistía en que los niños llevaban pájaros enjaulados que tenían en sus casas o de parientes, y en el Laguito de Amón (Barrio Amón), después de presentar breves obras de teatro y números musicales, se les soltaba para enseñar a los niños a amar la libertad y entregarla a los seres que están privados de ella.<br />También inculcaba en los niños un profundo amor por la flora, y para lograrlo los llevaba a sembrar arbolitos por predios vacíos y orillas de calle.<br />En su obra literaria se puede comprobar que la Creación para ella era sagrada, y es deber de todo educador fomentar su conservación respetándola.<br /><br /><br />Para finalizar, con Alfonso Chase digamos, « La fuerza de su vigencia está determinada por su inteligencia creadora, su compromiso con nuestro pueblo y la combinación de lo viejo con lo nuevo. » ( 11 - 14 )</div><div align="justify"><br /><br /><span style="font-size:130%;"><strong>INDICE CRONOLOGICO DE CARMEN LYRA</strong></span><br /><br /><br />-1888 El 15 de enero nace en San José.<br /><br />-1904 Se gradúa de maestra Normal en el Colegio Superior de señoritas.<br /><br />-1906 Trabaja en el Hospital San Juan de Dios en calidad de novicia religiosa. En este mismo año inicia su actividad literaria en los periódicos y revistas más importantes de la época, tales como Páginas Ilustradas, Pandemonium, Ariel y Athenea.<br /><br />-1910 Tiene lugar el terremoto que destruye parte de la ciudad de Cartago. Se lleva a cabo la intervención de los Estados Unidos en Honduras. Omar Dengo y Rómulo Tovar fundan “El Centro Germinal”, el cual tiene por objeto el estudio y divulgación de los problemas políticos, sociales y económicos que afectan la vida del país.<br /><br />-1911 Cae el gobierno de Porfirio Díaz en México. Los infantes de la marina norteamericana ocupa Nicaragua.<br /><br />-1914 Asume la dirección de la revista artística y pedagógica Renovación. Se concluye el Canal de Panamá. Empieza la Primera Guerra Mundial.<br /><br />-1915 intervención de los Estados Unidos de América en México. El gobierno de Alfredo González Flores crea la Escuela Normal de Costa Rica en Heredia.<br /><br />-1917 Los Bolcheviques toman el poder en Rusia. Se inicia la dictadura de Tinoco.<br /><br />-1918 Se publican sus libros “Las fantasías de Juan Silvestre” y “En Una Silla de Ruedas”.<br /><br />-1919 El 13 de junio dirige la Manifestación de Maestros contra el gobierno de Tinoco, la cual culmina con la quema del periódico La Información.<br /><br />-1920 Publica su conocida obra “Los Cuentos de Mi Tía Panchita”. El gobierno de Julio Acosta la envía a Europa en viaje de estudios.<br /><br />-1921 Desempeña la cátedra de Literatura Infantil de la Escuela Normal de Costa Rica. Estalla el conflicto armado entre Costa Rica y Panamá, como consecuencia de no haberse señalado definitivamente los límites geográficos respectivos.<br /><br />-1925 Cesar Augusto Sandino inicia en Nicaragua la Guerra de Guerrillas.<br /><br />-1926 Funda en San José la Escuela Maternal Montessoriana.<br /><br />-1931 Publica en “Repertorio Americano” su ensayo “Bananos y Hombres”. Entra a formar parte de la dirección intelectual del Partido Comunista y a colaborar con el periódico “Trabajo”, órgano recién fundado de dicho partido.<br /><br />-1939 Estalla la Segunda Guerra Mundial.<br /><br />-1941 Se reabre la Universidad Nacional de Costa Rica.<br /><br />-1942 Se recrea el Seguro Social. se incorpora en la constitución Política el capítulo de las “Garantías Sociales”.<br /><br />-1948 Sobreviene la lucha armada en Costa Rica.<br /><br />-1949 El 13 de mayo muere en la ciudad de México.<br /><br />-1971 Se inaugura en San José, en la planta baja del kiosco del Parque Central, la “Biblioteca Infantil Carmen Lyra”.<br /><br />-1976 La Asamblea Legislativa declara “Benemérita de la Cultura Patria” a Carmen Lyra.<br /><br /><br /><br /><br /><span style="font-size:180%;"><strong>CHABELA</strong><br /></span><br /><span style="font-size:130%;"><strong><em>Joaquín Gutiérrez</em></strong></span></div><span style="font-size:130%;"><strong><em></em></strong><div align="justify"><br /></span>(Te conozco mascarita)</div><div align="justify"><br /><span style="font-family:verdana;">Fueron tus cinco dedos de alga suave<br />la mano que deseé tanto en mi ausencia.<br />Tu voz de abeja la añoró mi oído<br />en tierra extraña.<br />Si antes pensaba regresar un día<br />otra vez a la patria, era tan sólo<br />por irte a ver, por conversar contigo,<br />tocar tu puerta.<br />Ahora cierro los ojos y te miro<br />mi pequeño nidito de gorriones,<br />rocío de alba, flor de greda pura,<br />canto de abeja.<br />¿Dónde los tristes reclinar podrían<br />ahora sus cabezas si les falta<br />tu regazo moreno de torcaza,<br />cojín tan blando?.<br />No tenías ningún pan y diste tantos,<br />panecillo tú misma, en el rescoldo.<br />Somos avaros de lo que dejaste.<br />Tú, sigues dando.<br />Dolía tu grito:- ¡Dadme a mi pueblo,<br />quiero volver, quiero volver, dejadme!<br />Eras sólo una sombra de canela<br />hecha pedazos.<br />Quiero volver decías, y te aventaban.<br />Tuviste que morir para lograrlo.<br />Ciega ya para siempre tu mirada<br />no eras temible.<br />Volviste y te llevaron los obreros<br />hasta la tierra en brazos, en tu caja.<br />Te besaban la frente y sus espinas,<br />niña dormida.<br />Moreno caracol, raíz de violeta,<br />párpado humilde, pequeñita antorcha,<br />¿dónde te fuiste? Dínoslo, Chabela,<br />para seguirte.<br />¿Qué te hace falta? ¿Acaso me recuerdas?<br />¿Cala la lluvia los terrones grises?<br />¿Has perdonado ya lo que te hicieron?<br />¿Estás llorando?<br />Estas palabras son de enamorado,<br />nunca he probado un licor tan dulce.<br />Tanto bebimos de él, tanto bebimos<br />que lo acabamos.<br />Que en paz descanses, linda camarada,<br />y que jamás nos dejes. Y el gran día,<br />cuando se llene el aire de estandartes<br />de roja púrpura,<br />Podrás, tal vez, volver a estar contenta..<br />Y una noche en que estemos todos juntos,<br />Manuel y Carlos Luis, Luisa y Calufa,<br />Guzmán y Arnoldo,<br />también los que murieron, Federico,<br />Vaglio, Montiel, la compañera Rosa,<br />vuelve, regresa y con tu voz más suave<br />cuéntanos cuentos.<br />En las calles la fiesta de los pueblos,<br />la victoria final, pero ninguno<br />querrá ir y perderse una palabra<br />de Tío Conejo.<br />Y si algún hijo de tus enemigos<br />se va acercando al mágico llamado<br />de tus maravillosas aventuras:<br />Déjalo que oiga!.<br /></span><br /><br /><br /><span style="font-size:180%;"><strong>Responso a Carmen Lyra</strong></span><br /><br /><strong><em><span style="font-size:130%;">Fabián Dobles</span></em></strong></div><div align="justify"><strong><em><span style="font-size:130%;"></span><br /></em></strong>(recordando a Carmen Lyra)<br /><br /><span style="font-family:verdana;">No,<br />que no descanse en paz.<br />Que no descanse en paz su cuerpo, ya<br />mineral feraz,<br />flor de la tierra.<br />Que no descanse en paz su voz, ahora<br />inefable,<br />aquella exuberante voz de mariposa<br />que libaba mieles y dolores<br />y sonaba tan como suena la verdad,<br />tan como saben<br />la vida, las auroras, las corrientes de agua.<br />Que no descanse en paz su eterno,<br />suave grito,<br />su cariñoso, humano, entero corazón.<br />Que no descanse en paz ...<br />Que descanse con nosotros.<br /> </span><br /><br /><span style="font-size:180%;"><strong>Pensamientos de Carmen Lyra</strong><br /></span><br /><br /><br />... “ No era maestra de adorno ni de ficción, era madre de los niños de su escuela y cuando vio la miseria , el frío y la desnudez de sus hogares ... ¡Y qué hogares !... se sintió inmensa y lanzó un grito que aún resuena y resonará siempre ... mientras haya en Costa Rica y en el mundo, niños enfermos, raquíticos, que padecen todas las miserias por culpa de una sociedad egoísta, habrá lucha social...”<br /><br /><br /> ´´ Pues bañando niños de cuatro a seis años, viendo sus cuerpecillos desnudos y vigilando sus juegos, aprendí mas que en quince años de dar clases’’.<br /><br /><br /> “Los remedios con que tratábamos en la Escuela Maternal para componer el mundo, no pasaban de ser acciones que revelaban buenos sentimientos hacia el prójimo, pero que no se acercaban siquiera a la causa del mal .”<br /><br /><br /> “Mientras estuve pegando remienditos sociales en la escuela y escribiendo prosa romántica con metáforas inofensivas para la injusticia que me rodeaba, tuve fama de ser una excelente persona, de muy buen corazón y una fina escritora. Pero cuando me di cuenta que había que hacer algo mas que remiendos sin trascendencia, que había que luchar directamente contra el régimen capitalista, la gente cambio de opinión con respecto a mi : ahora dicen que estoy loca, que tengo envidia de los ajeno, que ya no escribo como antes, que he decaído en el arte de la literatura ”. <br /><br /><br /> “Compañeras hay que empeñarse con todas las fuerzas por cambiar este estado de cosas. Qué cambio hondo, trascendental, habría en la vida de Costa Rica si las mujeres pudiéramos votar. Las cosas ya no seguirían como están porque ninguno de esos señores va a echar abajo las prerrogativas del capital, el cual tiene arregladas las cosas de tal manera que mientras unas mujeres pueden estarse arrancando los pelos de las cejas o haciéndose masajes para no engordar, otras tendrán que estar paradas en charcos, dobladas lavando o cosiendo. Cada partido está sostenido por gente de plata, y si estas gentes arriesgan grandes sumas, no es por la linda cara del candidato, sino porque ven la posibilidad de ganarse el ciento por ciento en el juego de la política?”<br /><br /><br /><br /><span style="font-size:130%;"><strong>BIBLIOGRAFIA<br /></strong></span><br />1) Dobles, Fabián. Revista Trabajo. Editorial Revolución. San José Costa Rica. 1970.<br />2) González, Luisa y Sáenz, Carlos Luis. Carmen Lyra. Departamento de Publicaciones, M.C.J.D. San José, 1977.<br />3) González, Luisa. A ras del suelo. Editorial Costa Rica. San José, Costa Rica. 1994.<br />4) Gutiérrez, Joaquín. Te conozco Mascarita. Editorial UCR. San José, Costa Rica. 1984.<br />5) Lyra, Carmen. Los otros cuentos de Carmen Lyra.. Editorial Costa Rica. San José, Costa Rica. 1985.<br />6) Monge, Claudio. Tertulias con mi Padre y con Manuel. Obra Inédita.<br />7) Monge, Claudio. En Aquellas Filas y Trincheras. Obra Inédita.<br /><br /><br /><br /> </div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-56319411456563044782008-02-15T20:29:00.000-08:002008-02-15T21:25:42.209-08:00LA LECTURA SE FORJA<div align="justify"><span style="font-size:180%;"><strong>La lectura: un poder forjado en el yunque del placer</strong></span><br /><br /><span style="font-size:130%;"><strong><em>Claudio Monge Pereira<br /></em></strong></span><br />Era yo un niño aún y ya soñaba con los libros que podría llegar a tener. Por aquellas manos pasaban Mi Hogar y mi Pueblo y el Paco y Lola, y ellos eran tiernos y agradables. Se puede afirmar que los amábamos. Eran libritos en ediciones sencillas y humildes, en papel periódico; pero nos atrapaban con una magia que por aquellos años no descifrábamos.<br />Más tarde, años después, llegamos a descubrir la causa que cimentaba ese amor desmedido por ellos y su contenido. Pero pasaron muchos días para encontrar la verdad.<br />Aquellos eran años difíciles para las familias obreras, sobretodo si eran numerosas como la nuestra: ocho hermanos y algunos primos que venían desde Grecia a sobrevivir con nosotros; un papá zapatero, una madre cocinera de hospital y una abuela mágica que constantemente acarreaba una bolsa de mecate repleta de frutas y chayotes para la supervivencia de la tribu familiar. No había recursos para comprar un solo libro, ni periódicos ni revistas. Algunas de estas últimas, las ganábamos en apuestas infantiles, por lo general ligadas a la fuerza física para competir en algún juego. Y una vez ganada, se convertía en un tesoro familiar que pasaba de mano en mano hasta que su contenido lo sabíamos de memoria y sus páginas ya se habían gastado.<br />A partir de 1960, comenzó a circular por nuestra casa una revista llamada “Bohemia”, que luego supimos, venía desde Cuba. Y de Cuba se hablaba mucho, porque unos muchachos barbudos y de pelo largo habían tumbado a un tal Batista y ahora todos hablaban de Fidel. Esa revista de papel periódico, fotografías en sepia y engrapada, pasó a ser lectura obligada para todos. <br />Aquella era nuestra biblioteca: papel amarillento y fotografías que al ser tocadas manchaban los dedos, hasta que por su frecuente uso se secaban o se gastaban. No había libros repletos de colores llamativos, ni estampas en aquella casa; ni tampoco en aquella Escuela. Probablemente las enciclopedias ya existían, pero no para las gentes de los Barrios del Sur de la Capital.<br />Entonces, si esa era la realidad cotidiana, por qué motivos amábamos los libros y sus contenidos con tanta pasión; por qué los buscábamos y hasta los peleábamos en competencias, por qué estábamos dispuestos a sacrificar hasta lo que no teníamos por obtener un texto escolar, una revista o un libro. <br />Crecimos un poco y llegó el primer año del colegio. La situación económica era la misma, pero la Madre y el Padre hacían enormes sacrificios para comprar por lo menos el texto más importante. Ese texto pasaba de mano en mano, porque con su ayuda estudiábamos todos los hermanos, hermanas, primos y hasta algún vecino aún menos privilegiado que nosotros.<br />A los trece años descubrimos que por el Paseo Colón había unas bellas casas con banderas de otros países en alguna parte de su fachada. Supimos entonces que eran embajadas, y como corrían otros aires por el mundo, uno podía entrar como si nada y le regalaban cantidad de folletos y libritos que destacaban las bellezas de esos países. Nos convertimos en asiduos visitantes de esos pedacitos de patrias extranjeras. Sin darnos cuenta ya poseíamos bonitas colecciones de historia de esos países. No había televisor en nuestra casa, pero por aquellos folletos conocíamos el lejano Brasil, México, Venezuela, Argentina; Europa. Maravillosas cataratas, ríos inmensos, selvas, desiertos, lagos, pirámides y cientos de monumentos. Y sobretodo, pueblos con trajes diferentes, colores distintos, bailes diversos, instrumentos variados y muchas cosas que inclusive se parecían a las nuestras. Todo aquel material nos sirvió para que nuestras tareas escolares fueran más bellas. Incluso en las Embajadas pedíamos, con ayuda de alguna mentirilla, dos ejemplares de cada folleto o librito; para recortar uno y conservar intacto el otro. Eso era bello y nos proporcionaba inmensa alegría.<br />Conforme avanzamos en la pirámide escolar comenzamos a experimentar nuevas situaciones. Una de ellas, quizá la más terrible, fue enfrentarnos a una realidad incomprensible que se fue tornando odiosa: había que leer por obligatoriedad o por temor al fracaso académico. La lectura era un medio que se usaba para reprimir nuestro deseo de aprender por placer. Había que leer, porque en unos exámenes se nos obligaba a contestar las cosas más inútiles o superficiales que a un profesor, o a una profesora, se le ocurrían. Entonces se debía memorizar aquello sin amor, para soltarlo en una prueba de memoria: atrás quedaban botados el placer y el amor por la lectura útil para la vida cotidiana. “Había que cultivar la inteligencia para el futuro”, decían.<br />El Sombrero de Tres Picos pesaba toneladas sobre nuestras cabezas. Las Bodas de Sangre eran un crimen. El Lazarillo de Tormes un salado. Marianela una carga. María otra. El Licenciado Vidriera una botella. Gustavo Adolfo una golondrina que no hacía verano. Y Don Quijote... un cliente fijo para el Chapuí. Fue cuando se agigantaron Pilo y el Enano, el Muñeco de Maní, Medio Pollo, la Gallina Enana y el Gallo Zancón. Nosotros pasábamos a imitar a una pareja de abejoncitos, que recién casados, se fueron a vivir en una cebolla: se iniciaba una especie de llanto.<br />La lectura se había convertido, por medio de la varita mágica de la Pedagogía oficial, en un tedio; una molestia divorciada de nuestro contexto. Era ya, un texto sin contexto.<br />Se hizo necesario militar en grupos diversos para leer por puro gusto: la iglesia protestante, el grupo juvenil, algún círculo de poetas y aprendices de escritor. Había que buscar fuera del aula cotidiana, aquello que otrora fue una verdad: el placer de la lectura.<br />Vinieron los años duros de estudios universitarios, y entre otras cosas, tomamos la decisión de estudiar Literatura. Deseábamos comprobar, desde adentro, cuál era la magia utilizada por los formadores de profesores de Castellano y Literatura; para lograr en tan corto período que los estudiantes en las aulas formales escolares, odiaran con tal fervor la Lectura y la Literatura.<br />La profesora de mi primer curso, una gran Doctora en Crítica Literaria formada en Francia, me replicó de inmediato al plantearle mi inquietud: “¡Excelente... ahí tiene ya Usted su tema para la tesis!” , y la respuesta se quedó esperando hasta el día de mi graduación con honores en Literatura.<br />Comprobé que ahí mismo, dentro de la Academia, se reproducía el mismo esquema colegial: Leer por cumplir una tarea. Barthes leído para responderlo en una prueba. Y el placer, que esperara en el asiento del autobús; o quizá a la noche, para cabecearlo un rato antes de entregarse a Morfeo.<br />Pasamos luego a la etapa de padres y madres de familia responsables, y comenzamos a supervisar las tareas de nuestros hijos escolares y colegiales, cuando no, a resolvérselas directamente.<br />Encontramos cosas tan deprimentes en relación con la lectura que terminamos solidarizándonos con todo el estudiantado. Tenían que leer para una comprobación de lectura, que cuando no era francamente superficial era idiotizante. <br />Primer ejemplo: “Única mirando al mar”, de mi dilecto amigo, Fernando Contreras. Preguntas para comprobación de lectura:<br />A) En un colegio público prestigioso de Moravia, cuyo nombre me reservo por respeto a su trayectoria: ¿ De qué material hicieron su arbolito de navidad los buzos de Río Azul?<br />B) En un colegio privado de Sabanilla, igualmente tan prestigioso como el anterior: ¿ Qué podemos hacer para ayudarle a los buzos de Río Azul?<br /><br />En el primer caso no hubo respuestas correctas, y sí, muchas blasfemias por parte de los estudiantes, que se sintieron burlados después de haber disfrutado de la lectura de “Única”. Hubo burlas y promesas para no volver a leer. Se propusieron los estudiantes, comprar el resumen de lecturas que venden en la “Mini”, para pasar los exámenes de comprobación de lectura.<br />En el segundo caso, la respuesta más alabada por la profesora fue la siguiente: “Dejar algo de leche en los empaques “tetrabrick” y un poquito de pasta en los tubitos.” Pero lo más triste no fue corroborar la superficialidad o la mofa en esta respuesta, sino el hecho verídico de que la respuesta fue evaluada como buena.<br />Los ejemplos narrados nos obligan a pensar también en las infaltables preguntas bobaliconas y superficiales que se practican en las aulas. Muchas al estilo de nuestros juegos infantiles para atrapar bobos:<br />¿ Para dónde iba Napoleón Bonaparte cuando se cayó del caballo?, o quizá esta, ¿ De qué color era el caballo blanco de Napoleón?<br />Una profesora de español y literatura me relató su frustración, después de haber ayudado a sus hijas a prepararse para las pruebas de comprobación de lectura. Después de los resultados ella sufrió los reclamos de sus muchachas, los cuales casi rayaban en improperios que acusaban su “ignorancia” como profesora. A la chicas les fue como a un quebrado porque no supieron las respuestas.<br />En un caso se trataba de “Marianela”: “Marianela nació en día de difuntos... ¿Cuál es entonces, el día de nacimiento de Marianela? En el otro se trataba del Lazarillo de Tormes: ¿Cómo se llama el hermano menor del Lazarillo? Y esto sucede en un destacado colegio privado religioso de San Pedro de Montes de Oca.<br />Una alumna del Liceo Laboratorio me dijo en una ocasión, que a ella le encantaba Debravo y que ella amaba la poesía; pero que eso se vino abajo cuando la pusieron a sacar gerundios y adverbios en un poema acerca de la Paz. Me dijo que ella juraba que iban a realizar una reflexión acerca del profundo mensaje del poeta, porque la situación de la violencia se ha tornado insoportable en el mundo que ella vive a diario. Pero no hubo nada de eso. El fondo profundo de la poesía se quedó como un rescoldo asentado de cualquier cosa.<br />Imagínense Ustedes: Jorge Debravo para ser estudiado con vocación odontológica. De la estrofa que dice: “No te ofrezco la Paz hermano hombre/ porque la paz no es una medalla/ yo te ofrezco que salgamos a conquistarla/ aunque tengamos que despedazarla.”, saquen los verbos y los adverbios. Y en esa práctica, dizque pedagógica, todo se circunscribe a un sacar; como en una odontología pedagógica que pretende dejar desdentada la poesía. La metáfora desterrada de las aulas. Fuera la posibilidad de soñar y de visualizar las utopías juveniles, o simplemente, Humanas.<br />Afirmé al iniciar esta reflexión, que el texto sin en el contexto se había entronado en las aulas, pero en honor a la verdad, eso no sería tan grave si se tratara de un Rey o una Reina al estilo moderno; cuando estas figuras son más decorativas que otra cosa. La gravedad estriba en que sí hay un empoderamiento real de esas tendencias, para sufrimiento del estudiantado y de las madres y los padres que estudian correctamente con sus hijos. <br />Para ir cerrando este breve ejercicio de pensar en voz alta, deseo destacar por qué allá en aquella pobre infancia, disfrutábamos tanto de la lectura: Porque tenía sentido para nuestras vidas cotidianas. Lo relevante no se trataba de cuántos molinos enfrentó Don Quijote, sino por qué los enfrentó. Lo importante no era que Pilo fuera malo, sino por qué lo era. La tortuga habladora se cayó al vacío y se descalabró toda por no saber dominar su lengua, y la cuestión era esa, y no desde qué altura se cayó y cuántos huesos se quebró.<br />Nuestras Maestras y nuestros padres o hermanos mayores se cuadraban con nosotros a disfrutar la lectura; la compartíamos, la contextualizábamos, la ambientalizábamos que llaman ahora los pedantes de aula, le dábamos poder dentro de nosotros. Ella se realizaba por placer y gusto, y el aprendizaje llegaba inevitablemente. No era necesario asustarnos con una prueba o con una comprensión para sacarle a la lectura el mayor y el mejor de los provechos. Sentíamos que lo leído, por sí mismo, tenía sentido y era útil. Porque se relacionaba con nuestro sentido de la vida y ello lograba que todos quisiéramos ser los Héroes de las historias leídas. No daba pena llorar cuando había que hacerlo. Carcajearse era normal si Tom Sawyer hacía travesuras parecidas a las nuestras allá en el río Tiribí. Nosotros éramos el Principito que encontraba el sentido de las cosas en cada estación. Y eso no estaba prohibido. Sentíamos que vivíamos la vida haciendo estaciones en pequeños planetas, y en cada uno de ellos aprendíamos con pasión. Pero esto no se daba ni solo ni por rebote; sucedía porque teníamos la orientación adecuada de parte de nuestros educadores y de la familia. Sí existía una auténtica relación entre las aulas y las casas y a ratos no se sabía cuál era cuál.<br />La lectura conllevaba una esencia que consistía en vivirla, entregarse a ella sin límites hasta la saciedad; no escatimarle espacio en nuestro diario vivir y transformarla en compañera dulce y anhelada. La única obligación era no memorizarse nada. Sólo dejarla fluir y navegar por ella como si fuera un dulce río. Sentíamos que leer era vivir, y por ello vivíamos de tal manera, que vivir era leer la vida que nos rodeaba y aprehenderla y rehacerla para que fuera significativa. Construir diversos mundos a partir de la experiencia de leer. Transformar en praxis lo vivido en la lectura, pero comprendiendo que la vida real estaba no en las páginas, por más bellas que ellas fueran; sino ahí a nuestro alrededor; saltando y metiendo bulla llamándonos la atención.<br />Las aulas pueden y deben ser esos talleres para el deleite pedagógico que anhela todo estudiante. Los libros y los textos no son cepos para limitarle la libertad y la creatividad a nadie. Afirman que escribir es volver a recordar lo vivido, y eso en gran medida es cierto, pero también es verdadero en gran medida que leer es sentir y vibrar; y ello significa vivir para recordar. Un ser Humano sin recuerdos es como un pueblo sin historia. Y eso es una tragedia.<br />Debemos rendir tributo a las personas, Educadores y Familias que desde las aulas o desde las casas, hacen de la lectura el necesario encanto para crecer espiritual, moral e intelectualmente.<br />Hoy día, a las diversas realidades se les llama escenarios, y a la comprensión de las cosas se le dice, realizar una correcta lectura de los hechos. ¿Acaso no es lo mismo leer por placer y no por obligatoriedad? Y nótese que digo por obligatoriedad y no por obligación, porque siempre que sea por placer, la lectura será una deliciosa obligación.<br /><br /><br />Casa MONHÉR<br />San Isidro de Heredia<br /> </div>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-15387420161018007622008-02-14T12:56:00.000-08:002008-02-14T13:00:09.026-08:00<div align="justify"><strong><span style="font-family:verdana;"><span style="font-size:180%;">¡ Por eso la mandé a Usted!</span><br /></span></strong><br /><span style="font-size:130%;"><strong><em><span style="font-family:trebuchet ms;">Claudio Monge Pereira</span></em></strong><br /></span><br />La persona que me lo cuenta es un Asesor, de esos que tienen la entrada libre y las puertas abiertas a todas las dependencias del Gobierno. Me lo relata carcajeándose, y en sus ojos brilla un placer casi infantil al transmitirme el suceso. Y su placer era mayor porque él había sido testigo de un hecho muy simpático y típico de la protagonista, que para el caso, es la misma cuya aventura le da nombre a este relato.<br />Se encontraban varios Asesores haciendo antesala en Casa Presidencial, cuando de repente apareció la señora Ministra, estirada cuan es. Uno de los Asesores de algo la vio y corrió tras ella. Al ratito regresó refunfuñando y maldiciendo contra la señora: “¡Desgraciada...qué se habrá creído! Yo que he trabajado para este Partido y para el pueblo, que me he entregado a cambio de nada; que trabajo como mula por todo el Norte del país, que vi nacer este movimiento...”; más otras palabras y frases que aquí censuramos aunque las usara Cervantes. La persona que me lo cuenta le sugiere al enojado que se calme y que se desahogue soltándole a él lo sucedido en aquel pasillo sin testigos. “Mire compañero, le digo a la tal por cual que necesito pedirle un favor. Me pregunta de qué se trata el favor. Le digo que necesito una cita con ella para hablarle de los problemas en aquellas comunidades...y sabés qué me contesto la malpuesta esa; qué hable con su Secretaria para que lo anote en su agenda...pero que ella cree que no me podrá atender ni en el año 2010. Desgraciada, cómo me trata así. Me voy de este Partido...me largo.” El hombretón, de casi dos metros y trescientas libras, salió pateando sillas y paredes y se largó de Casa Presidencial .<br />El Asesor que me lo cuenta, militante en otras filas durante la época de los viajes gratuitos al Socialismo continúa con su anécdotas, luego del intertexto oral del asesor grandullón y resentido en su más social y cristiano amor propio. “Pues la cosa es que llega la señora Ministra esa y de sopetón se topa con don Abelardo. Entonces le cuenta en tono de reclamo algunos pormenores de su gira al interior del país: - “Pues figúrese Usted...Señor Presidente, tuve que montarme en un caballo, pero había tal cantidad de barro que este se hundió y me llegó el lodo hasta los muslos. ¡Si viera Usted don Abelardo! Aquello no es calle ni nada, hay que mandar a pavimentar y a arreglar eso antes de yo regrese por ese lugarejo algún día. ¿Por qué me fue Usted a mandar a ese lugar? Entonces don Abelardo le contesta de un zarpazo: “¡Por eso la mandé a usted...para que conozca un poquito este país, para que vea que no es como el centro de la Capital. Imagínese a esos chiquitos que vienen desde las montañas, caminando horas por esos barriales para llegar hasta la Escuelita del lugar; con hambre a veces y descalzos siempre. Por eso la mandé a usted, le repito, para que se empape de la realidad nacional y podamos hacer algo para que en el futuro nadie se embarriale. ¡Muchas gracias por su reporte!”<br />“Mirá, agrega el Asesor, y te lo cuento a vos que sos del mismo patio profesional de la Ministra, y que sos tan duro con mi Partido; para que veas que don Abelardo está en todas.”<br />Al final le tiré la chinita de que si todo anduviera como él asegura, el grandullón no se habría largado de su Partido. “¡Qué va!, me contestó de inmediato, la semana pasada me lo encontré en un acto en Esparza y le mandé el filazo de rigor. Y sabés qué me dijo: “¡ Es que llevo el gusanillo muy pegado al corazón!”<br />Conclusión: muchas veces, el sectarismo y el dogmatismo nos hacen creer que sólo nosotros amamos esta Patria, aunque bien veamos y observemos que otras personas de otras tiendas políticas, trabajan y se desvelan por el Pueblo. </div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-13354474780309704422008-02-09T20:46:00.000-08:002008-02-09T20:54:25.722-08:00El niño, el santo y el mar<div align="justify"><span style="font-size:180%;"><strong>El niño, el santo y el mar: Bella obra literaria de don Hernán Elizondo Arce</strong></span><br /></div><span style="font-size:180%;"><strong></strong><div align="justify"><br /></span><span style="font-size:130%;"><strong><em>Claudio Monge Pereira</em></strong></span><br /><br /><br /><br /><br />De mi retina no se desprende la imagen de don Hernán…sus ojos me miran con esa dulzura de panales y me invaden de amor. Y por alguna fuerza poderosa, si veo más allá, encuentro los ojos de Fray Casiano de Madrid; aquel Santo que anduvo entre nosotros sin que lo determináramos siquiera.<br /><br />Esta novela corta de don Hernán, acompañada por algunos cuentos de su inspiración, fue publicada por nuestra Editorial en el año 1980, y su edición de 3.000 ejemplares se agotó hace ya mucho tiempo. Por ello su segunda edición era totalmente necesaria, ya que se trata de una obra clave en la literatura costarricense del siglo pasado, para que las nuevas generaciones de lectores tengan la oportunidad de mejorar sus bibliotecas domésticas con esta joya que don Hernán Elizondo Arce obsequió a las letras de la Patria, y además, enriquezcan su cultura como ciudadanos.<br /><br />Nuestro escritor es un maestro del relato corto, lo cual logra con mucho acierto, permitiéndole a los lectores enamorarse de lo narrado o de sus personajes. Esa particularidad no sólo se comprende por las tramas interesantes y cautivadoras, sino por la poesía que el escritor sabe impregnarle a sus relatos.<br /><br />Antón Páblovich Chéjov gustaba decir que la brevedad es la hermana del talento, y él mismo lo demostró con su obra literaria de páginas cortas y significados largos. Y así es esta colección de relatos: breves, agudos, incisivos, profundos y de un poder significativo que envuelve a los lectores para obligarlos a pensar la vida y sus avatares.<br /><br />Cada uno de los relatos que componen este tomo, está impregnado por la magia de la pluma ágil y perspicaz de don Hernán, a tal punto que con su lectura no sólo conocemos la historia de un ser humano, sino que además nos enteramos de las desdichas de un pobre perico que pierde su libertad o de una urraca que desea volar hasta el cielo teniendo plumas de plomo. Tanto el concepto de libertad como el de pertinencia real, son tratados con la delicadeza deliciosa del escritor avezado, pero en este caso, le sumamos el profundo conocimiento psicológico y sociológico del autor; cuestión fundamental que hace de cada trabajo acabado una obra particularmente atractiva y conmovedora. El perico no es solamente eso, es un ser “exiliado del llano” que nunca dejó de serle fiel al recuerdo de su tierra, y además, “ siempre tuvo hambre de campo abierto y nostalgia de espabeles.” Y la urraca nos recuerda a esas personas que sin tener ni la capacidad ni el don para una tarea o misión, con su osadía ignorante nos estropean el mundo en que vivimos. Cuántos seres humanos pululan por esta tierra con nostalgia por sus orígenes cercenados y birlados, como el campesino despojado de su parcela por los nuevos latifundistas camuflados de empresarios turísticos, “desarrolladores” de riqueza transnacional y productores de pobreza nacional. Entonces, es cuando el despojado añora su terruño y todo le huele a recuerdo de tierras roturadas y semillas al acecho. Así mismo, ese ejército de atrevidos que hoy pululan por las aulas y por las oficinas simulando saber hacer lo que no pueden hacer, porque los dones y las vocaciones se traen innatas y no se pueden usurpar ni con títulos dudosos ni con la reverencia risible de quienes les siguen la corriente para divertir tragicómicamente al resto de la sociedad.<br /><br />La injusticia, el misterio, el humor, el suspenso, la revelación y el advenimiento de una nueva conciencia, son ejes que se nos revelan en estas obras de don Hernán Elizondo; este maestro narrador que hace de la pluma un cincel acucioso que penetra el granito de los corazones humanos, tantas veces indiferentes ante la tragedia y el dolor ajenos. El maestro Elizondo Arce es un poeta que no se puede esconder ni siquiera cuando cultiva otros géneros, porque para él la metáfora es un asunto forjado fácilmente por el mazo de su lenguaje y su pensamiento. Don Hernán nos poetiza sucesos y hechos, dándoles esa frescura diáfana de los arroyuelos de montaña que alegran la vida de todo ser que se les acerca. Y lo hace de manera natural, no hay en esa tarea ningún esfuerzo trabado ni árido; por el contrario, esas figuras surgen en su escritura tan naturales como las rocas se van asomando al paso de las aguas que bajan de las montañas. Sin ellas los ríos cantan una sola canción, con ellas, en cambio, la polifonía de de las espumas y las corrientes se manifiesta con una dulzura tierna, tibia y apacible.<br />También debemos destacar la capacidad del escritor para atrapar nuestra atención desde el inicio mismo del relato, los cuales se transforman en imanes atractivos y sugestivos para nuestro gusto estético y en bálsamo de nuestros sentimientos humanos.<br /><br />De manera natural nos sentamos en una banca o en un poyo de pueblo para escuchar la voz de Fray Casiano de Madrid, o la de Francisco, padre e hijo en la vida escogida por uno y en la desgracia redimida al fin para el otro. Y caemos en la cuenta que cumplió muy bien don Hernán su promesa de escuchar la solicitud del Santo: nos da una obra magistral por su sencillez y belleza; por el delicado encaje literario que se surce solo a nuestra piel de lectores. En la obra de don Hernán Elizondo, este Fraile maravilloso y bueno, nos recuerda a aquel santo que recorría las calles del mundo pidiendo para sus niños abandonados por la sociedad indiferente, y al recibir de un avaro rico el escupitajo en su rostro en una ocasión, le dijo: “¡Bueno…eso es para mí! Ahora, ¿Qué me vas a dar para mis pobres niños?”<br /><br />La relevancia de esta obra no sólo radica en su belleza, sino y más allá, en su encuadre actual dentro del panorama de la realidad costarricense. Porque sí son demasiados los niños y las niñas que deambulan por las calles, abandonados por su padres y por nosotros. Les llamamos eufemísticamente “niños de la calle” para evadir nuestra complicidad con un régimen que abusa de la palabra pobreza en sus discursos, sus planes y sus programas; pero que no logra comprender que el problema real no es la pobreza sino la riqueza. Son su distribución indebida y anticristiana, la madre y el padre de toda la infancia que hoy nos obliga a sonrojarnos, antes que a cerrar nuestros ojos indiferentes.<br /><br />Por eso son tan necesarios esos santos como Fray Casiano, porque mientras las causas del abandono y la injusticia perduren, tendremos que cifrar la esperanza en el ejemplo de estos seres humanos gigantescos que dándolo todo, renuncian a la nada de una vida sin sentido. Don Hernán nos abre los ojos con su obra y nos recuerda que el corazón debe ser inteligentemente amoroso.<br /><br />La Editorial Costa Rica, cumpliendo con su misión, pone una vez más en las manos de los costarricenses esta obra bellísima del escritor consagrado, que jamás abandonó su humildad frente a los demás y más bien, reforzó su razón de ser ante la historia patria y la sociedad costarricense.<br /><br />San Isidro de Heredia, abril de 2007<br /><br /><br /><span style="font-size:130%;"><strong><em>Claudio Monge Pereira<br />Presidente de la Editorial Costa Rica<br />y de la Asociación de Autores de Obras Literarias, Artísticas y Científicas de Costa Rica</em></strong></span></div>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-38268346072223168302008-02-08T22:43:00.000-08:002008-02-08T22:49:06.521-08:00El sacrificio del RUALDO<div align="justify"><span style="font-size:180%;"><strong>El sacrificio del RUALDO</strong></span><br /><br /><br /><span style="font-size:130%;"><strong><em>Claudio Monge Pereira<br /></em></strong>Versión Midrásh Hagaddá<br /></span><br /><br /> Muchos siglos hace, muchos antes inclusive de la intromisión de los españoles en Nuestra Tierra, el RUALDO fue un ave de plumaje sencillo que no llamaba la atención de nadie. No obstante, su canto era el más bello y dulce de toda la selva. Cuando el RUALDO cantaba, todas las aves de los alrededores callaban para no perderse ni siquiera una nota de nuestro Inspirador.<br /><br /> Este pájaro que a simple vista parecía ordinario, al igual que hoy, habitaba en las montañas del Norte de Heredia y su espacio se extendía hasta las faldas del Volcán Poás. Aquellos parajes se extendían hasta los Bajos del Toro y la Laguna de Hule. Ni siquiera el jaguar y el puma que imponían su poder por esos rumbos, se atrevían a interrumpir el canto maravilloso del RUALDO.<br /><br />Justo muy cerca de ese volcán, se hallaba enclavado en un pequeño y verde llano, un poblado indígena que campeaba feliz y libre en armonía con la naturaleza. En sus alrededores cohabitaban fieras y otras especies animales, todas en justo equilibrio y enriqueciendo la armonía construida por el Padre de todas las criaturas. Los habitantes del poblado utilizaban de la selva lo necesario para vivir sin ofenderla.<br /><br /> Un día se escuchó un retumbo tan poderoso que todas las personas pensaron que el Cielo se caía sobre sus cabezas. Desesperados corrían a guarecerse en sus chozas y debajo de los árboles más grandes y frondosos. Pero como los retumbos no cesaban y el cielo no se desprendía, descubrieron que semejantes ruidos provenían de la cima del cerro más alto; al cual ellos, por un temor natural, jamás ascendían.<br /><br /> Entonces los más ancianos comenzaron a murmurar oraciones día y noche, mientras los jóvenes danzaban durante horas ataviados con su bellos penachos y portando flores y ramas de diferentes arbustos. Las mujeres y los niños no salían de sus chozas pidiéndole a sus Dioses misericordia: lloraban lágrimas de amor hasta anegar la tierra que pisaban para calmar la furia del coloso.<br /><br /> El volcán Poás mientras tanto, escupía fuego, y ríos gelatinosos e incandescentes se deslizaban por sus laderas a paso lento. A su paso todo lo arrasaban, a tal punto que los indígenas temieron que su poblado simplemente fuera arrastrado por la furia que no cesaba ni con los cantos, ni con las danzas, ni con las oraciones…ni con las lágrimas de las mujeres y de los niños. Más bien parecía enfurecerse más cada día que pasaba.<br /><br /> Debido a lo anterior, los sabios ancianos decidieron subir a la cima del coloso para preguntarle qué era necesario hacer para que él se apaciguara, y ellos lo complacerían. El volcán furioso deseaba sangre humana y sin ella no disminuiría su bravura. Con demasiada fuerza arrojaba piedras por los aires, y enormes chorros de vapor y lava, alcanzaban hasta cien metros de altura. Las nubes partieron de ese lugar.<br /><br />Mientras todo esto sucedía, allá en la última choza del poblado, una doncella muy linda permanecía acurrucada en la oscuridad. Sólo la acompañaba un RUALDO que había nacido en uno de los horcones de su rancho y que muy pronto, fue abandonado por sus padres, de tal manera que fue la doncella quien lo terminó de alimentar hasta que creció y se fortaleció.<br /><br />Cuando el RUALDO fue grande ya no se quiso alejar de la muchacha: vivía en los alrededores del rancho y devolvía su agradecimiento con bellísimos trinos y gorjeos. Ni siquiera los picudos, las caciquitas, las viudas, los cardenales, las monjitas, los quetzales o los jilgueros podían opacar su bellísimo canto. Su amiga, la doncella indígena, no cambiaba nada de lo que poseía por la felicidad que le daba su amistad.<br /><br />Había quienes aseguraban que ellos vivían enamorados, el uno para el otro, como la lluvia de las montañas con el musgo que siempre amanecía fresco y terso, como si durante la larga noche y la madrugada, se fundieran en un abrazo poderoso de cuyo fruto se enriquecían la tierra y las rocas y los poderosos troncos de los árboles milenarios y frondosos.<br /><br />Los ancianos decidieron que la doncella debía ser sacrificada, arrojándose ella misma a las fauces hambrientas del monstruo que se revelaba en el coloso. La llevaron hasta la cima y le pidieron que avanzara lentamente y se lanzara. Ella, temerosa caminaba, y al mirar hacia atrás, veía el resplandor de los cuchillos de obsidiana que portaban los guerreros. Si avanzaba era la muerte, y si retrocedía, también lo era.<br /><br />De pronto ella se detuvo y miró que entre las nubes rojizas de fuego, humo y polvo, volaba su RUALDO. Burlando las furiosas lenguas de fuego del Volcán Poás cantaba y cantaba sus más bellas y melodiosas notas. El RUALDO se comunicaba con el coloso en el misterioso lenguaje de la Naturaleza. Pedía piedad y misericordia al gigante, ofreciéndole lo más valioso que él poseía: su canto maravilloso…su VOZ.<br /><br />Era tal la dulzura de su canto que el Poás se enterneció totalmente, y de sus más profundas entrañas, brotaron chorros inmensos de lágrimas; tantas que el cráter se fue llenando hasta formar la inmensa laguna que hoy todos podemos observar. Tantas que su fuego se apaciguó y sólo subían al cielo fumarolas de vapor inofensivas que le daban al entorno ese tibio aliento que hace brotar el amor por las madrugadas.<br /><br />Luego, ante el religioso y profundo silencio del pueblo, la doncella regresó con el RUALDO posado sobre su hombro. Las tórridas emanaciones de fuego que brotaban del Volcán mientras él cantaba sin cesar, le secaron su voz para siempre. Ahora es mudo. No obstante, el intenso calor doró su plumaje dándole bellísimos colores. Él salió del cráter como un ave esmaltada en el horno preciso de un Joyero Celestial.<br /><br />El RUALDO es de bellos colores y tonalidades rojas, celestes, verdes y amarillas. Es un príncipe mudo que ofrendó su mayor tesoro para que regresara la paz y la tranquilidad al pueblo de su entrañable amiga; la doncella indígena. RUALDO es como Chico Mendes, o como Jaime Bustamante, o como Chico Zúñiga o como Carmen Lira: ofrendaron lo más preciado – SU VIDA – por la paz y la felicidad del prójimo.<br /><br />Por eso nosotros fundamos RUALDO…para ser esa VOZ de ESPERANZA por la VIDA, es decir, por la felicidad del Ser Humano y del Planeta que nos ofrendaron. </div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-87298869082648099532008-02-08T22:38:00.000-08:002008-02-08T22:43:20.000-08:00Memorias de un pobre diablo<span style="font-size:180%;"><strong><em>Estas memorias para la inmortalidad</em></strong></span><br /><span style="font-size:180%;"><strong><em></em></strong><div align="justify"><br /></span><strong><em>Claudio Monge Pereira<br /></em></strong><br /> Dios ha sido muy bueno conmigo: me nació en Grecia, donde llaman el Alto del Conejo. Me puso a crecer en los Barrios del Sur, a donde iban a atracar sus barcos de miseria todos los Pobres Diablos expulsados del campo o de la propia ciudad indiferente. Me llevó a vivir a Rusia toda mi juventud temprana, donde me encontré con el poderoso fantasma de Máximo Gorki; ese gigante que me puso sus “Universidades” entre pecho y espalda. Luego me trajo de vuelta a Costa Rica transformado en educador de futuras generaciones de Maestros y Maestras. Me unió a una mujer herediana y me puso a vivir mi vida entre la plaza principal de San Isidro y la de Santo Domingo. La Universidad de Costa Rica me juntó con grandes Seres Humanos; entre ellos, don Isaac Felipe Azofeifa. Y fue don Isaac quien me llevó hasta las “Memorias de un pobre diablo”, del insigne Maestro; también domingueño de nacimiento, don Hernán Elizondo Arce. Mi suegra era Arce, de los Arces de Santo Domingo, por ello quien quita que mis hijos y nietos estén de alguna manera emparentados con don Hernán. Por ello afirmo desde el principio que Dios ha sido bueno conmigo. Pero quizá deba decir más bien, que el Padre ha sido más que bueno conmigo, porque el primer trabajo que me asignaron como estudiante de posgrado en Literatura, fue un estudio acerca de los Premios Nacionales “Aquileo Echeverría”, en el género de novela. Y da la casualidad que me dan a don Hernán Elizondo, con sus “Memorias de un pobre diablo”. Pero ¡qué va! Como me enseñó mi amado Maestro y amigo personal, don Fernando Centeno Güel, “las casualidades no existen… todo se mueve y se acomoda de ciertas maneras y formas, porque existe una Fuerza Poderosa que todo lo ordena para nuestro crecimiento: esa Fuerza es Dios”. Por eso, reitero, es que afirmo que esa Fuerza Poderosa ha sido muy buena conmigo: me llevó desde los barriales colorados del Alto del Conejo hasta el Callejón de la Puñalada en los Barrios del Sur de la capital, y luego hasta las estepas lejanas y extensas, y me trajo de vuelta como maestro. Hace dos años me puso en la ECR…justo para que conociera en persona a este gran maestro costarricense y pudiera hoy compartir con él y con todos Ustedes, esta breve memoria que reseño.<br /><br /> Y la obra de don Hernán me puso en apuros, como al repugnante supervisor escolar rural que corrió de la Escuela a la bella y angelical niña Cristina, lo pusieron los estudiantes solidarios que la defendieron; y esto de mi apuro se dio porque descubrí que la obra que se me asignó para estudiar no estaba disponible en ninguna parte, salvo un ya desvencijado ejemplar en la Biblioteca Nacional, que sólo prestaban en sala. Recorrí todas las compra ventas de libros usados y todo fue infructuoso. El buen señor del Erial me prometió ayuda y darle seguimiento a mi búsqueda. Mientras tanto, el profesor Jorge Blanco me prestó su ejemplar para fotocopiarlo, so pena de perder el curso si algo le pasaba al libro.<br /><br /> Cuando terminé la lectura, cosa que hice de un tirón porque me quedé pegado a ella como tío Conejo al muñeco de cera, me enamoré de la obra y de su autor. Por esta razón mi trabajo lo realicé con esmero y amor, de tal manera que por ahí dicidieron publicarlo en alguna revista.<br /><br /> Mucho tiempo después, el buen señor del ERIAL me llamó por teléfono, para darme la buena nueva de que ya me había conseguido un ejemplar de la obra. La recogí el mismo día y después de tantos años la conservo entre mis obras más preciadas.<br /> Estamos frente a una obra inmortal, lo cual no se puede decir de toda obra literaria, y esto lo reafirman propios y extraños, porque aceptamos que ella toca las fibras más profundas de todo corazón verdaderamente humano. Uno puede decir que luego de su lectura no se puede seguir siendo la misma persona, porque toda la Humanidad que llevamos adentro se despierta y hace bullir en nosotros ese caldo donde se cultivan las semillas de la solidaridad, la militancia y los sueños aterrizados.<br /><br /> Esta es una obra magistral, escrita con amor, sapiencia y clase. Y es que así escriben por lo general aquellos que no se sienten escritores, aquellos que no frecuentan los olimpos de la literatura y que no se codean con los “grandes” de la pluma. Don Hernán escribe esta obra, como tal, en una carrera contra al tiempo, y al filo de que se cierre la puerta, la introduce en el famoso certamen para ser laureada y aclamada. Esto me hizo recordar lo que mi padre, zapatero como Calufa y su entrañable amigo, me contaba acerca de como Fallas escribía los libros de un solo tirón. Le daba el ramalazo, decía papá, y se ponía a escribir con dos dedos sobre aquella vieja máquina. Y ya no se detenía hasta finalizar. Así escribió “Mamita Yunai” en 20 dias, y las yemas de sus dedos tenían ampollas con sangre cuando decidió llevársela a Carmen Lira para que se la revisara. Sé que otros grandes Maestros del relato y de la narración han trabajado así y nos han heredado obras maravillosas…como esta de don Hernán. Obras que nacen como los Héroes y las Heroínas auténticas, para no morir jamás.<br /><br /> Para nosotros, la obra de don Hernán debe significar lo que para el pueblo ruso significa la obra de Máximo Gorki; o para los franceses la de Víctor Hugo, o Sábato para México, o Steimbeck para los estadounidenses, por solo citar algunos casos.<br /> Y yo no deseo hoy citar pasajes de la obra de don Hernán, porque mi deseo es que todos los presentes la lean y la vivan en sus corazones. Este libro es una obra sociológica escrita con la tinta del Alma. Para mi gusto nunca debería estar por fuera de las lecturas obligatorias del Ministerio de Educación Pública. Nuestros estudiantes no verían tambalearse sus valores con facilidad, si su formación humanística se asentara en el estudio de “Memorias de un pobre diablo”, que como otras obras inmortales saben agarrar al lector de las venas y no dejarle pasar su sangre ya más de manera indiferente.<br /><br /> No puedo dejar de mencionar que esta novela de don Hernán Elizondo es un Gran Poema, repleto de bellas metáforas y de imágenes literarias, que bien podrían servir de ejemplo en las Escuelas de Literatura y en los Talleres Literarios, para deleite y aprendizaje de quien desee abocarse a la escritura buena, bella e inmortal. Decía un gran maestro argentino , que el Poeta es una pequeña metáfora de Dios, y yo me atrevo a afirmar que la obra de don Hernán es una Gran Metáfora del Padre. Porque aquello que se escribe para abonar dulces rebeldías y encaminar sueños de justicia y paz duradera, es ser eco y prolongación de ese Gran Lengua que es el Creador. Por ello relaciono la novela que hoy nos reúne con el magnífico Poema Pedagógico del ukraniano Antón Semiónovich Makárenko; o con su obra también monumental “Banderas en las Torres”, cuya profunda humanidad van por el mismo camino que nos señala nuestro querido escritor costarricense.<br /><br /> La obra que nos tiene aquí es un faro permanente, que nos llama desde su luz, a no dejar que nuestro ánimo decaiga ni nuestras convicciones mueran, porque la diferencia entre los personajes y la vida que don Hernán inmortaliza, quizá hoy no esté tan lejos de la que sobrellevan y sufren miles de compatriotas que ahora son explotados y explotadas de otras formas, más sutiles, pero igualmente inhumanas y crueles que aquellas de los pobres diablos de antaño. Ahora no son sólo los sabaneros o los pescadores de esa prodigiosa provincia, hoy son las mujeres y los jóvenes que trabajan por salarios de hambre como mucamas, peones jardineros, guardas, lavacarros, lleva palos de golf, y otros oficios de explotación creados por el burgués siempre avaro e indiferente ante la tragedia humana del hambre, el analfabetismo y la explotación. Es decir, frente a la gran miseria humana que depara el capital seco y frío de la maquinaria materialista.<br /><br /> Le pido al Buen Dios que me ha llevado por muchas partes y hoy me trajo hasta aquí, que le depare a don Hernán Elizondo Arce mucha salud y muchos años de vida humana y literaria; que lo lleve siempre por ese camino bueno estampando las huellas de sabiduría y bondad que ÉL le brindó y el Maestro supo trabajar y compartir.<br /><br /> Como Presidente de la ECR me honro, en nombre de todo su Consejo Editorial, su personal y su Gerencia General, por tener al escritor nacional Hernán Elizondo Arce, como uno de sus huéspedes más dilectos y del cual nos enorgullecemos. Hacemos nuestro trabajo para que muy pronto, las obras nuevas de nuestros Escritores Laureados, ni siquiera tengan que ir a dictamen; es decir, que ellas tengan ese privilegio ganado por la trayectoria, el significado y el prestigio de su autor. Me referí a Máximo Gorki, cuyo nombre era Alexéi Maxímochich. Su vida de pobre diablo lo iluminó para escoger como pseudónimo ese otro nombre. En lengua rusa Maxím significa máximo, y Gorki significa amargura; de tal suerte que su nombre literario es “Máxima Amargura”. Con esto el gran escritor quería ser el vocero de los humildes, los pobres y los desheredados de su tierra. ¡ Ojalá sepamos organizarnos para construir una Sociedad en la cual, los pobres diablos, sólo sean recuerdos que encontremos retratados en la Buena Literatura!<br /><br />¡Gracias don Hernán…Usted es el Maestro y nosotros sus humildes estudiantes, y lo vemos y lo admiramos con el mismo amor con que aquel chiquillo, miraba y amaba a la Niña Cristina…que sabía enseñar y orientar con la dulzura y la sapiencia de los Escogidos!<br /><br />San Isidro de Heredia, Casa MONHÉR, 30 de agosto de 2006</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-63267698340978664932008-02-08T22:30:00.000-08:002008-02-08T22:38:10.114-08:00Los libros regresan editados a su creadores<div align="justify"><span style="font-size:180%;">¡BUENAS NOCHES!</span><br /><br /><span style="font-size:130%;">Señora Ministra de Cultura y Juventud María Elena Carballo<br />Señor Ministro de Educación don Leonardo Garnier<br />Compañeras y Compañeros del Consejo Directivo de la ECR<br />Señora Gerente General de la ECR<br />Amigas Escritoras, amigos Escritores…Poetas<br />Señoras y Señores:<br /></span><br />Acudimos hoy a este Acto formal de entrega de las obras publicadas por la ECR a sus propietarios, mujeres y hombres; jóvenes y adultos costarricenses y extranjeros de mérito especial, con la convicción de haber cumplido una bella y noble tarea encomendada a nosotros por Ustedes, y por la Ley de creación de esta Casa Editorial de nuestro Estado. Nos gusta nombrar este momento de devolución con el símil de cosecha, conscientes de que nuestro trabajo ha consistido en cuidar y acompañar con esmero lo que ustedes sembraron con inspiración, esfuerzo, entrega, sacrificio y abnegación.<br /><br />Devolvemos a sus creadores y creadoras el fruto editado de las semillas seleccionadas, sabiendo que en esa tarea se concentraron esfuerzo y tesón, y por qué no, la valentía de ofrecerle a la Sociedad el trabajo que se desarrolla durante largas e interminables horas de preocupación y desvelo. Y cuando digo semillas seleccionadas, no me refiero a la inevitable tarea de evaluar las obras presentadas a la ECR para su consideración, sino a ese dilema que enfrentan las y los escritores de cualquier país a la hora de enviar su trabajo a consideración de otros; que teniendo el poder temporal de aceptar o rechazar, saben que ante todo se está ante la obligación de respetar profundamente ese esfuerzo individual, sincero y limpio.<br /><br />Tenemos hoy una Editorial Costa Rica sólida en sus Principios, es decir, consciente y consolidada en el cumplimiento de su Misión y su Visión; ordenada y conocedora de sus virtudes y de sus debilidades, dirigida por un grupo de personas de excelente calidad humana, con conocimientos y experiencia en el trabajo de leer, escribir, editar, divulgar, enriquecer y organizar la producción literaria. El Consejo Directivo está conformado por personas que conocen no sólo el arduo oficio de escribir, sino, y esto es quizás lo más importante, la relevancia que para la Patria y su Sociedad reviste publicar obras de calidad en los diversos géneros de la literatura. Esto es una garantía y una ventaja para todos, y no sólo para la ECR como empresa estatal.<br /><br />Hemos logrado superar momentos difíciles con valentía, dedicación y entusiasmo, porque amamos lo que se nos ha encomendado y porque creemos en el significado histórico de la labor que despliega esta Editorial, fundada hace casi medio siglo para el enriquecimiento cultural de nuestro pueblo. Cada una y uno de nosotros ha logrado comprender, que si bien ocupamos un lugar en el Consejo Directivo nombrados por una institución que cree en nuestras posibilidades, nos debemos a las y a los escritores y al público lector en lo fundamental. Es importante para mí, como Presidente del Consejo Directivo, resaltar que nadie entre sus integrantes recalca que representa a esta o aquella organización, sino más bien a la totalidad del mundo literario y lector. En ello estriba hoy el éxito creciente de la Editorial Nacional. Esto implica que estamos comprometidas y comprometidos para continuar esa labor de autoevaluación que deberá situarnos en la primera línea de la producción editorial: selección de las mejores obras, excelentes ediciones, acertada divulgación y mercadeo moderno e insertado dentro de las características del mundo actual. Con estas palabras agradezco y reconozco el trabajo que realizan mis compañeras y compañeros del Consejo, sin cuyos aportes estos logros que hoy presentamos no serían posibles. Y reconozco también el trabajo nuevo que realiza el Personal de la ECR, en todas sus esferas, y aplaudirles ese deseo de manifestar su entrega no sólo en el cumplimiento del Plan Anual Operativo, sino y aún más, en la entrega a las labores más allá de horarios y días de la semana estrictamente laboral. En la medida que todas y todos comprendamos que las paredes que conforman el edificio que nos alberga son transparentes, en esa misma medida sabremos que la luz que adentro se forje, irradiará los caminos de la Patria como lo soñaron los Fundadores de esta Casa. Esta es la mejor manera de agradecerles a ellos y a ellas su visión y su acertada lucha por el engrandecimiento de la cultura costarricense y la educación nacional.<br /><br /> El Consejo Directivo, por mi medio, agradece a todas y a todos los escritores nacionales y extranjeros que pensaron en nuestra Editorial para publicar sus obras; no sólo a quienes hoy tienen la satisfacción de recibirlas, sino también a aquellas y aquellos cuyos trabajos no fueron avalados todavía o fueron descartados para formar parte de nuestro catálogo. Felicitamos a las escritoras y a los escritores que merecieron algunos de los Premios Nacionales en su género, por medio de la obra publicada por la ECR, y también a quienes mereciéndolo, no lo recibieron. Destacamos nuestra congratulación para quienes hoy serán declarados ganadores de los diferentes premios que otorgamos anualmente; así como para quienes han obtenido reconocimientos internacionales gracias a la obra publicada por nosotros.<br /><br /> La Gerencia General se referirá en detalle a la cantidad y a las características de las obras publicadas durante este año que cerramos, tanto en su primera edición como en reediciones o reimpresiones. Ustedes podrán apreciar la belleza y la calidad en las ediciones, mismas que invitan a penetrar en su lectura y deleite.<br /><br /> Para concluir este mensaje retrocedo a su inicio, cuando les hablé de las obras salidas a luz pública como Fruto de las Semillas cosechadas, llamando su atención hacia el peligro que significan para la noble tarea de escribir para los demás, la implementación en nuestro país de leyes funestas que todo lo supeditan al libre mercado; o mejor sea expresado, al mercado neoliberal. Es un craso error creer que la cultura y la educación son nichos para enriquecer exclusivamente el capital de unos cuantos, y a la vez, empobrecer el legítimo derecho de las mayorías trabajadoras a su enriquecimiento espiritual, ético y educativo. Es menester aunar esfuerzos entre las y los creadores de obras literarias para que jamás se llegue a aplicar alguna especie de UNIÓN PARA LAS OBTENCIONES LITERARIAS (UPOL), lo cual por desdicha arrojaría, metafóricamente hablando, productos culturales “transgénicos” que avasallarían el fruto de la creación de las y de los Escritores. Sepamos, por la senda patriótica de los pioneros de la Editorial Costa Rica, defender y salvaguardar nuestro Patrimonio Cultural para el sustento de las presentes y de las futuras generaciones.<br /><br /> Concluyo este mensaje con la ayuda de Dios:<br /><br /> <span style="font-size:180%;"> <strong> “¡Tu Palabra es una lámpara para mi pie,<br /> y una Luz para mi vereda!”</strong> <br /></span><br /><br />¡Muchas gracias!<br /><br />Claudio Monge Pereira<br /><br />San Isidro de Heredia, 11 de diciembre de 2007-12-11<br />Casa MONHÉR.</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-82742920514597694462008-02-08T22:15:00.001-08:002008-02-08T22:29:51.143-08:00Reseña bibliográfica: Cuentos con Alas y Luz de la Escritora ANI BRENES<span style="font-size:180%;">Sobre Cuentos con alas y luz </span><br /><span style="font-size:180%;"><br /></span><span style="font-size:130%;">Ilustraciones de Norma Hidalgo</span><br /></span><span style="font-size:130%;"><br /></span><span style="font-size:130%;">“Cuentos con alas y luz”</span><br /></span><span style="font-size:130%;"><br /></span>¿Quién mejor que un niño para hablarnos de ángeles y estrellas? Y ¿quién más que una mariposa para enseñarnos a admirar muy de cerquita las maravillas que nos ofrece la Naturaleza en cada una de sus manifestaciones , para compartir y valorar el cambio mientras usamos nuestras propias alas?<br /></span><br />Con los cuentos de este libro, siguiendo el sendero de las luciérnagas , podemos llevar, como lo menciona en la Presentación el poeta y escritor <strong>Claudio Monge Pereira</strong>, “luz a nuestras propias cuevas, movimiento a casas y aulas que se han petrificado en el paisaje, colores allá donde la sombra intenta perpetuarse”.<br /><br />Como el viejito que contaba cuentos, los padres, abuelos y maestros podrán hacer derroche de sus talentos, desgranando para los más pequeños las narraciones presentes en esta obra.<br />Y los pequeños lectores… algunos podrán asomarse a la ventana de su imaginación para cambiarle el color al arcoiris; mientras otros, acompañarán a la luna al baile de disfraces, en una carroza de sonrisas.<br /><br />Estoy segura de que juntos, podremos hacerle cosquillas a las estrellas en este viaje de palabras con alas y luz.<br /><br />La autora.<br /><br /><span style="font-size:130%;">Fragmento de su obra "Cuentos con alas y luz"</span><br /><br />"Descubre lo maravilloso de volar libre como el viento, aprende a sonreír embelleciendo cada lugar por donde pasas. No te preocupes por el tiempo que dure tu vida, sino por lo que puedas hacer durante ella en beneficio de los demás. Y da gracias a quien te hizo mariposa y escribió en tu corazón las instrucciones que te harán saber, que el momento preciso ha llegado. Entonces conocerás la verdadera felicidad, la que se alcanza cuando cambias el miedo por el amor".<br /><div align="justify"><br />La mariposa sabia</div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-8882376212110245602008-02-06T18:37:00.000-08:002008-02-15T20:52:17.629-08:00redimiendo una estrella en plena florClaudio Monge Pereira<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />Redimiendo<br />una estrella en plena flor<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />Ediciones Red de Sol<br /><br />1997<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />Para Clarise Lispector:<br />Entrañable amor desperdiciado<br />en plena luz.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />"Nada como pensar<br />en el perpetuo amor<br />que no fue aquél<br />ni ha sido éste<br />pero que será el siguiente,<br />el verdadero, el otro”<br /><br /> Miguel Barnet<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />“Has anulado en mí toda posibilidad de olvido<br />Me has enseñado a actuar<br />como si cada acto de mi vida<br />fuera el más trascendente, el último”.<br /><br /> Miguel Barnet<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />cero<br /><br /><br />Aquí están mis manos de terrario<br />esperando el arribo desbocado<br />de toda tu semilla.<br /><br />Ahí estás,<br />semilla transitiva y pura<br />olfateando mis cinco puntos<br />cardinales.<br /><br />Aquí estoy, hambriento<br />y de sed culminado<br />en el deseo.<br /><br />Aquí están mis manos abonadas<br />ovacionadas por los retoños<br />que brotan en sus dedos.<br /><br />Ahí estás,<br />latiendo en la punta<br />de tu quilla<br />y embistiendo las olas<br />de mi aliento.<br /><br />Aquí estoy,<br />más atento que la flor<br />ante el perfume<br />de los vientos.<br /><br />¡ Sólo no desmayés, amada estrella ¡<br /><br />uno<br /><br /><br />Sabemos que estás entre los ángeles extraviados<br />buscando el camino de retorno a la alegría.<br />Sabemos que no te adaptás a tu nuevo papel<br />de soberana y reina de la transparencia.<br />Sabemos que eras reina antes de partir<br />para tan distantes e incoloras lejanías.<br />Sabemos que eras todo el mundo<br />navegando en un puñito de huesos olvidados.<br />Sabemos que eras dulce<br />como la caña de todas la zafras hermanadas.<br />Sabemos que eras tierna<br />igual que el más estúpido de los juncos estancados.<br />Sabemos que eras frágil<br />como la nube violada por el humo.<br />Sabemos que naciste en las mismas entrañas<br />del mismísimo berrido del agua.<br />Sabemos que eras niña y madre<br />de uvas maltratadas y fortuitas.<br />Sabemos que eras embriagadora<br />igual que una borrachera irresponsable.<br />Sabemos que eras arcoiris<br />de aguaceros escondidos.<br />Sabemos que eras tierra regada<br />y sin parir.<br />Sabemos que eras cama crujiendo<br />debajo de unos huesos atrasados.<br />Sabemos que eras el palacio<br />de las lluvias ateridas.<br />Sabemos que eras lágrima y antorcha<br />quemando la mejilla<br />de la más vital<br />de las ofensas.<br />Sabemos que ahora estás buscando el camino de regreso<br />hasta los brazos de tu viudo adolorido.<br />Sabemos que tu viudo<br />es el mundo mudo: mudo...mudo...mudo.<br /><br /><br />dos<br /><br /><br />Pero dónde está tu palabra<br />de almíbares ocultos y perfectos,<br />oh amiga de espacios segregados<br />por la ausencia ?<br /><br />Decílo sin tapujos, como el viento<br />cuando tierno se restriega<br />contra el tiempo.<br /><br />Sólo decílo a raudales,<br />como un tango que se desborda<br />de los labios de un borracho<br />enamorado y sólo.<br /><br />Y después sentáte despacito<br />sobre la humanidad indiferente<br />y procurá que tus intimidades le lleguen<br />hasta el alma.<br /><br />Más tarde,<br />por la noche,<br />juntos nos reiremos<br />a pesar de la oscuridad<br />y de los huesos rotos de la estrella.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />tres<br /><br /><br />Tardaremos lo que dura el viaje<br />de un beso de los labios a la lengua<br />para recoger las trizas de la luz<br />que se ha partido contra el suelo.<br /><br />Usaremos la más loca de las gomas<br />para restituir la identidad<br />a la estrella asesinada<br />de los sueños.<br /><br />La pondremos a brillar<br />a punta de pulidores<br />comerciales.<br /><br />La colocaremos de nuevo en el hoyo vacío<br />que en el cielo dejó su accidental caída.<br /><br />Aspiraremos el aire tomados de la mano<br />y guardaremos las palabras<br />para el día de tu bautizo<br />en el firmamento<br />de la fama.<br /><br />Cerraremos los ojos<br />para que el fulgor de tus pupilas<br />no opaque antes de tiempo<br />la gloria que te espera.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />“Mientras, tus árboles pequeños, amorosos,<br />acurrucaban al grillo.”<br /><br /><br /> Miguel Barnet<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />cuatro<br /><br /><br />Nadie querrá perderse tu presencia<br />de colibrí agigantado:<br /><br />Todos querrán ser como una flor intacta<br />para abrirse de pétalos<br />ante el pico nacarado<br />de tu risa.<br /><br />Todos querrán ser<br />tu copa.<br /><br />Verás cómo los sueños<br />son verdades que germinan<br />inmediatamente después<br />de las caídas más violentas.<br /><br />Y sentirás toda la dulzura de la miel<br />que en el panal del tiempo<br />te guardaban las hadas<br />del olvido.<br /><br />Todos querrán ser tu copa<br />y a mí me sobrarán manos<br />para llevarla presuroso hasta tu boca.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />cinco<br /><br /><br />Pequeño conejo entre lobos desatados<br />tus manos buscan un ramo de flores<br />para acribillar de pétalos<br />la piel del enemigo.<br /><br />Los lobos se marcharán en desbandada<br />por no poder atravesar tu perfume<br />con sus desesperados dientes.<br /><br />Sus garras sólo serán las yemas tiernas<br />de la anona ya madura.<br /><br />Vos, sonriente,<br />atravesarás el bosque embravecido<br />hasta la cabaña tibia y transparente de la vida.<br /><br />Yo, enamorado,<br />te estaré esperando<br />con las manos temblorosas<br />y los huesos redoblando desde adentro<br />la prevista victoria.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />seis<br /><br /><br />No extrañarás<br />para nada la soledad del cuarto<br />compartido, y aquellos olores sólo serán<br />los ramilletes transparentes del implacable olvido.<br /><br />Seguirás tan buena como entonces, y yedra jovenzuela<br />subirás por el muro que opacaba tu gloria de manzana:<br />palmo a palmo recorrerás hasta la más diminuta de las grietas<br />para cubrir de verde y raíz el universo disfrazado de los tiempos.<br /><br />Y velarás por nosotros,<br />por los siglos de los siglos,<br />amén.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />siete<br /><br /><br />Novia de todos los tiempos, serás irrepetible,<br />igual que los ríos que nunca quisieron salir de la montaña<br />y se quedaron para siempre anclados a su historia.<br /><br />Macabea, hermosa como un ovillo de lana<br />en las manos de una abuela hacendosa<br />y dubitativa. Macabea, mil veces bella<br />como la flor que nace sobre la roca desértica<br />y no se amilana ante los vientos. Macabea,<br />total y blanca como una nube pasajera.<br />Macabea, irreversible como el cielo<br />de todos los anhelos enigmados.<br /><br />Novia eterna de los desaparecidos:<br />Amor sin comenzar.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />Amada: no has querido plasmarte jamás<br />como lo ha pensado mi divino amor.<br /><br /><br /> César Vallejo<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />ocho<br /><br /><br />Eternidad de flor:<br />Reina de la noche.<br />Azalea compungida.<br />Clavel dormido.<br />Poma azucarada.<br />Margarita perentoria.<br />Rosa de los tiempos.<br />Cala fiestera.<br />Jazmín olvidadizo.<br />Violeta dormida.<br />Azahar metálico.<br />Ave del paraíso.<br />Gloxinia eterna.<br />Gladiola escalonada.<br />Crisantemo taciturno.<br />Bromelia empapada.<br />Guaria desvestida.<br />Verdolaga extendida.<br />Bastón sin emperador.<br />Girasol cosmopolita:<br />Macabea: Nomeolvides de mi alma.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />nueve<br /><br /><br />Vendrás en navidad a visitarnos<br />con tus altos tacones de escenario,<br />caminarás desnuda por mis calles<br />como la flor ofrendada de cientos<br />de carrozas barnizadas por la euforia.<br /><br />Te estaré esperando en aquella canción<br />que conocías desde niña<br />y me cantaste el día<br />en que fuiste mía<br />para siempre.<br /><br />No te dejaré partir después de esa jornada,<br />porque habrás sido como un pan tibio<br />recién horneado: tus olores habrán fundido<br />para entonces mi piel de navegante desplegado.<br /><br />Te quedarás aferrada a mi ancla clavada<br />en tus aguas de quimera<br />y nadie te verá detrás<br />de tu sonrisa.<br /><br />Y nunca dejarás que yo me duerma<br />en tu presencia.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />diez<br /><br /><br />Me contarás los pormenores de tu viaje a las estrellas,<br />interrumpida sólo por la constancia de mis besos.<br /><br />Yo te escucharé con todo menos con mis labios.<br /><br />Embelesada hablarás mientras te beso.<br /><br />Las palabras que te falten<br />estarán en mi garganta<br />y las tomarás a sorbos<br />como al agua<br />de los viajes.<br /><br />Seré el asta para tu bandera redimida<br />en esta batalla del reencuentro.<br /><br />Sólo vos habitarás mis venas,<br /><br />Inocente Macabea:<br /><br />Amor.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />once<br /><br /><br />Saltando de beso en beso<br />recorriste mi caudal de tibias aguas:<br />¡ Y era tan dulce tu risa !<br /><br />Brotabas de mi boca, liberada ya<br />de los sueños imposibles.<br /><br />Fui tu libertad.<br /><br />Por vez primera te vi dormir<br />alejada de fantasmas pendencieros.<br /><br />Fue tan grande tu entrega<br />como mi recibimiento.<br /><br />Te vi dormir de beso en beso:<br />¡ Y era tan dulce tu sueño ¡<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />No te hagas la que está durmiendo,<br />recuerda de tu trovador;<br />que yo ya comprendo... comprendo<br />la humana ecuación de tu amor.<br /><br /> César Vallejo<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />doce<br /><br /><br />Mañana no saldrás de prisa.<br />Te quedarás entre mis brazos,<br />esperando que el sol dignifique<br />tus pezones florecidos por la noche<br />en el nutriente terruño de mi lengua.<br /><br />La vieja jornada laboral será un recuerdo.<br /><br />Tus pasos regresarán mansos y cordiales<br />hasta el marco de la puerta<br />que en cedro dulce<br />te talló mi mano.<br /><br />Vendrás sonriente<br />como una alegría que recién comienza,<br />y llena de sorpresas<br />estampa sobre el aire<br />sus primeros pasos.<br /><br />La oficina habrá muerto para siempre,<br />como la furtiva lágrima caída<br />que no conoce el camino<br />de regreso.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />trece<br /><br /><br />Subirás las gradas<br />como si fueran las costillas<br />que conducen a mi carne.<br /><br />Nadie habrá visto semejante alegría<br />taconeándole a la vida.<br /><br />Mi temor a que tu sonrisa<br />se vaya como una golondrina<br />habrá empezado.<br /><br />¿ Quién en su cordura<br />no lucharía por detenerla ?<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />catorce<br /><br /><br />Para cuando llegués,<br />mi pecho retumbará de la misma manera<br />que los poblados pobres<br />azotados por el terremoto.<br /><br />Sólo alegrías pronunciará mi boca.<br /><br />Serás recibida como la más opulenta de las alacenas.<br /><br />Mi pobreza misionera se acercará a su fin.<br /><br />Recuerdo será mi celibato:<br /><br />El pan, contigo,<br />habrá llegado<br />para siempre.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />quince<br /><br /><br />Porque el amor transforma<br />cuando uno decidido<br />se mete en esas aguas<br />y las goza.<br /><br />Porque esas aguas vivifican.<br /><br />Porque se hace verdad la vida.<br /><br />Porque somos uno y muchos<br />como el burití en el sertón.<br /><br />Porque todo se hace obvio.<br /><br />Porque con amor he decidido redimirte<br />y llenarte de fiesta la piel y la mañana;<br />para siempre, escarpín de terciopelo:<br />para siempre, y más allá aún<br />de ese lugar.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />Hasta cuándo estaremos esperando lo que<br />no se nos debe...<br /><br /><br /> César Vallejo<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />dieciséis<br /><br /><br />La melancolía será amputada de tus pasos<br />por el hacha bisturí de mi arsenal azul,<br />para que llevés una carga menos<br />y una esperanza más.<br /><br />La olvidarás rápidamente,<br />como los niños que por la tarde olvidan<br />las ofensas de la mañana y son felices.<br /><br />Y ella no habitará más debajo de tu piel,<br />ni en el renovado laberinto de tu pensamiento:<br /><br />Habrás aprendido a pensar por tu propia cuenta...<br /><br />¡Serás mujer, al fin!<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />diecisiete<br /><br /><br />Aprenderás a mostrar la señal de la victoria, <br /><br />y se te dará tan suave ese aprendizaje<br />como un puño de nubes acumulando regocijo.<br /><br />Te descargarás, según tu antojo,<br />sobre todas las cosas que se muevan,<br />y aún te quedarán fuerzas para todo lo demás. <br /><br />Anegarás los ojos resecos de la historia<br />para que todos puedan ver por la pupila<br />tu innegable carrera afortunada<br />colocando su huella en la victoria.<br /><br />Y no te detendrás jamás,<br />hasta llegar transitada y sudorosa<br />con la señal de la victoria al frente de tu cuerpo,<br />habitado ya por la repetición<br />inequívoca de mis huesos mis besos y mis sueños.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />Dieciocho<br /><br /><br />Dieciocho veces te diré te quiero,<br />con la misma dulzura con que se descubrió<br />la caña en los pueblos más amargos.<br /><br />Verás que van mis labios a tu encuentro,<br />analfabetos de amargura y de lamento.<br /><br />Y cuando me divisés seremos tres;<br />los mismos tres que descubrimos la noche<br />del encuentro.<br /><br />La herencia será luchar contra toda la tristeza,<br />y nuestro fruto será el fruto de tu vientre<br />y de mis besos.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />Diecinueve<br /><br /><br />Le jugaremos una treta a la magia<br />que se pudre en los suburbios<br />y nos iremos sin pagarle sus monedas<br />de traición.<br /><br />Nuestras risas atrapadas<br />por la libertad de los fantasmas<br />rebotarán contra los árboles silenciosos<br />de la inevitable descendencia.<br /><br />Y no te morirás jamás,<br />porque mi amor de colibrí<br />te habrá depositado en el fondo<br />de la eterna flor de la verdad.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />Claudio Monge Pereira.<br />Setiembre 15, 1997.<br />San Isidro, Heredia, Casa MonHér.<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />Dedicatoria:<br /><br />A Macabea de nuevo:<br />¡ Muchas gracias por amarme así !<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />“ Ya ve cómo han servido las palabras,<br />cómo el recuerdo cumple siempre su reclamo de poesía,<br />cómo usted ya no es un pobre diablo al que preocupan las rosas,<br />un pobre diablo que tuvo antaño un poco de corazón...”<br /><br /> Miguel Barnet<br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br /><br />Índice :<br /><br /><br />Dedicatoria a Clarise Lispector<br /><br />Reflexión de Miguel Barnet<br /><br />Desde la raíz hasta el follaje, o lo que otros<br />llaman prólogo: Claudio Monge Pereira<br /><br />“Has anulado en mí<br />toda posibilidad de olvido” :<br /><br />Aquí están<br />Sabemos<br />Pero dónde está<br />Tardaremos<br /><br />“Mientras tus árboles pequeños” :<br /><br />Nadie querrá<br />Pequeño conejo<br />No extrañarás<br />Novia de todos los tiempos<br /><br />“Amada:<br />no has querido plasmarte jamás...”<br /><br />Eternidad de flor<br />Vendrás en navidad a visitarnos<br />Me contarás<br />Saltando de beso en beso<br /><br />“No te hagas la que está durmiendo...”<br /><br />Mañana no saldrás de prisa<br />Subirás las gradas <br />Para cuando llegués<br />Porque<br /><br />“Hasta cuándo estaremos esperando...”<br /><br />La melancolía<br />Aprenderás<br />Dieciocho veces<br />Le jugaremos<br /><br />Dedicatoria a Macabea<br /><br />Reflexión Final de Miguel BarnetUnknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-19186532429646575742007-12-04T19:08:00.000-08:002007-12-04T19:19:31.866-08:00Educación y justicia social<div align="justify">Educación y justicia social<br /><br />Claudio Monge Pereira<br /><br />“Hacia una educación inclusiva<br />que propicie la dignidad y la justicia social”<br /><br /><strong>La injusticia:<br /></strong><br />Probablemente se puede asegurar que pululan por este mundo infinidad de libros, tratados y documentos que abordan el tema de la Justicia Social desde muchas visiones; y lo mismo podríamos aseverar del tema educativo. Y si la Humanidad ha producido tantas palabras que pretenden especificar y dilucidar la problemática que se deriva de asuntos claves para el desarrollo de cualquier Sociedad, por qué los pueblos continúan sumergidos en la ignorancia, la miseria, la explotación, la falta de oportunidades dignas, y en suma, la injusticia social.<br /><br />Para poder discernir con propiedad acerca de la justicia, primero debemos caracterizar la injusticia, porque sería ejercicio inocente referirse a lo anhelado sin conocer aquello que lo imposibilita. Uno de los más graves problemas que arrastran las Ciencias Sociales se asienta en la obsesión por realizar radiografías casi exactas de la realidad, sin proponer las salidas viables para solucionarlos en estricto apego a un contrato social viable y sin exclusiones. A quienes nos hemos dedicado a estas Ciencias, muchas veces se nos ha calificado de “problemólogos”, alejados de la urgencia de actuar como “solucionólogos”.<br /><br />De esta manera, planteo una reflexión desde la perspectiva cristiana, porque según mi entender y sentir, nuestra ética es inevitable e irrepetible, y nos conduce a la comprensión de los hechos que generan la injusticia y nos aporta la claridad para vislumbrar un Camino de Amor.<br /><br />Toda injusticia se asienta en la ausencia del Amor, y su reproducción se da por la entronización de la indiferencia, como nueva categoría conductual frente a la Sociedad; compréndase ante el PRÓJIMO. Ya sabemos, por boca y enseñanza de nuestro Superior y Único Maestro, que mi prójimo es todo aquel o aquella a quien yo amo como a sí mismo. A quien ama a Jesucristo no le queda otra opción ni otro camino, porque si Él es el Camino y la Verdad, nuestra obediencia conduce a la construcción de la Vida; y de aquella que se da en abundancia.<br />Para el cristiano no existe otra posibilidad: amamos al prójimo como a sí mismos o no lo amamos. Esta es la simpleza majestuosa del Padre, porque no nos pone nada imposible como tarea, sino algo absolutamente viable. Siendo nosotros resultado del Amor más grande, somos portadores de esa Semilla especial y única, la Semilla que se ofrenda para la dicha de los hermanos; es decir, de la Sociedad como un todo.<br /><br />El ser humano se fortalece en Comunidad y sobrevive a todos los avatares que la realidad le impone. Siempre saldrá adelante inclusive de las más terribles pruebas. Lucha y se organiza. Derrota a la adversidad porque se fundamenta en la colectividad. Tarda en aparecer el excedente material y surgen los parásitos iniciales que manifiestan su fervor para apoderarse de él, aún a costas de la violencia. Surge la injusticia: unos pocos se adueñan del trabajo de la mayoría y se convierten en “epulones”. Estos se hartan hasta la gula, mientras Lázaro sufre hasta la desgracia de los perros callejeros. Así es la esencia del origen de la desproporción social, y ella herrumbrará el metal que sostiene los pilares de la Sociedad, es decir, de la Comunidad.<br /><br />Se construye, con la destrucción del prójimo, un abismo indecible entre la Verdad que es Dios, y la mentira que es la lujuria, la desfachatez y la gula insaciables. Un dios metálico sustituye al Amor. La bolsa cargada de dinero palpitará más que el propio corazón del Ser Humano.<br /><br />Entonces aquí, se hacen gigantescas las palabras del Profeta Amós para “descubrir”, que la lacra de la injusticia es la que carcome el Bien Común:<br /><br />“Escuchad esto, los que exprimís al pobre, despojaís a los miserables, diciendo: “¿Cuándo pasará la luna nueva para vender el trigo, y el sábado, para ofrecer el grano?” Disminuís la medida, aumentáis el precio, usáis balanzas con trampa, compráis por dinero al pobre, al mísero por un par de sandalias, vendiendo hasta el salvado del trigo. Jura el Señor por la gloria de Jacob que no olvidará jamás vuestras acciones.”<br /><br />Visto así el panorama social de aquella época, notamos que no ha cambiado mucho la realidad: desproporción, gula, arrogancia, menosprecio, intimidación, indiferencia, materialismo desenfrenado, consumismo enfermizo, sarcasmo, prepotencia, lujuria, despilfarro, maledicencia, y en suma, injusticia social. Se asiste a la conformación de unas relaciones sociales de producción que atentan contra la dignidad del Ser Humano, alejadas de las enseñanzas del Creador; o sea, asistimos a la consolidación del imperio de la Injusticia. En este imperio el impío es rey y el desvalido es aquel o aquella que el Creador levantará de la basura para sentarlo al lado de los Príncipes.<br /><br /><strong>La educación:</strong><br /><br />La enseñanza es el acto de transmitir conocimientos, el aprendizaje de asimilarlos y la educación de practicarlos socialmente. Es un proceso completo y no se puede dar por separado, no son compartimentos que se unen con una goma mágica, sino células de un mismo cuerpo. La educación ha sido definida a través de la Historia de múltiples maneras, pero lo cierto es una verdad: el ser erudito no necesariamente hace al ser educado. En concreto: un Sistema Educativo puede atiborrar a las personas de contenidos o “materia”, pero no automáticamente de educación. Puede llenarle la cabeza a la gente de libros, pero no necesariamente de valores. Ya lo decía el pensador francés Montesquieu, hace más de doscientos años: “¡No se trata de llenar cabezas, sino de educarlas!”. Una persona puede tener su cabeza totalmente repleta de “materia”, no obstante, eso no la hace educada. Por el contrario, podemos encontrar personas por la calle, que sin ningún título académico, demuestran una exquisita educación. Por ello, se propone a continuación, revisar someramente diversos puntos de vista vertidos en épocas muy diversas en tiempo y espacio.<br /><br />Si damos un vistazo al panorama histórico – pedagógico podemos apreciar el siguiente abanico:<br /><br />Guillermo García, argentino, afirma en su obra “La educación como práctica social”, que la educación es justamente eso, porque por medio de un proceso determinado se transforma una materia prima que recibimos, supuestamente inacabada, y le entregamos a la sociedad un producto final diferente y en apariencia acabado. Para este pedagogo la Educación se da en tres niveles; a saber: A) en el nivel de Hecho, que abarca todos aquellos acontecimientos que circundan la vida y el accionar de los seres humanos en sus relaciones sociales cotidianas; es decir, son aquellos aprendizajes y aquellas enseñanzas significativas que se dan al margen de cualquier sistematicidad. Es la adquisición cotidiana de conocimientos y hasta de algunos valores o antivalores. B) en el nivel de Propósito, y como la acepción lo indica, son todas aquellas experiencias que se planifican y ejecutan para cumplir con metas y objetivos previamente establecidos; concretamente, es la educación que se da en instituciones que fueron creadas para esos propósitos y que es impartida por especialistas que adquirieron ese derecho por medio de un certificado; que las más de las veces, es un certificado de poder para el dominio de supuestos “ignorantes”. Es la instrucción que se adquiere dentro del Sistema. Y, C) en el nivel de Reflexión, entendiéndolo como la ejercitación epistemológica que se realiza acerca de las particularidades de los niveles anteriores para producir Teoría acerca de ellos; lo cual conduce inevitablemente a la formulación de cuerpos pedagógicos que se convierten en paradigmas para el fortalecimiento científico de nuestros quehaceres. En concreto, para García hacer educación al nivel de reflexión, es hacer Pedagogía. Especular sobre los niveles A y B es producir cuerpo pedagógico para sustentar diversas posiciones con respecto a este hecho social. Si tomáramos como acertada la posición de este estudioso, podríamos concluir que nadie ligado a la educación se escapa de realizar en determinado momento teoría pedagógica; aunque nunca la llegue a formular por escrito como propuesta concreta.<br /><br />Francisco Gutiérrez prefiere proponernos la educación como una práxis política, entendiendo política como la necesidad de tomar partido frente a la realidad concreta de la Humanidad. En este caso, la práxis nos remite a la relación dialéctica entre práctica y teoría; es decir, que siempre la teoría será el producto de una práctica reflexionada y toda práctica será la resultante de la aplicación de alguna teoría o reflexión. En este sentido, asumimos la educación como un hecho o un acto social concreto e histórico, para el ser humano y por el ser humano; para liberarlo o para esclavizarlo, para desatarlo o para manipularlo. Educarse es politizarse e ideologizarse, es tomar partido en la connotación que señaláramos anteriormente. De tal manera, la educación será liberación y esperanza, o esclavitud mental y laboral.<br /><br />Freire se refiere a la educación como a una práctica liberadora y humanista, y practicar la libertad es educar al hombre en el amor, la solidaridad y la esperanza. La pedagogía es una propuesta teórica multilateral que promueve la felicidad del ser humano a través de la educación: es profunda transformación individual y colectiva. Es un re – nacer.<br /><br />En Costa Rica, ya en los años veinte, la joven maestra normalista Luisa González, conjuntamente con Carmen Lyra, fundadoras de la Educación Preescolar Pública, entendían que la educación es un acto liberador por medio del cual manifestamos nuestro amor hacia la Patria. Afirmaban que la Pedagogía, más que un cuerpo teórico más o menos coherente, debería ser una Guía para la acción que rompa los esquematismos y los reduccionismos mentales que promueve la sociedad del egoísmo. La Pedagogía es la teoría que surge del conocimiento de las realidades sociales y concretas del sistema educativo en todos sus ejes y componentes, que le sirve al educador para orientar su quehacer cotidiano, dentro y fuera del aula. La Pedagogía entonces, no es sólo un asunto que se practica dentro de las cuatro paredes de una institución especializada; es un asunto de utopías e incertidumbres.<br /><br />Para nuestros más insignes y preclaros próceres pedagógicos, la educación es el acto concreto de las aulas, social y humanista, político e ideológico, acto concreto en el cual se puede echar mano a los más diversos métodos y técnicas para informar y formar al ser humano integralmente. La pedagogía la consideraban una ciencia que teoriza por su propio camino acerca del hecho educativo y propone ideas aisladas o cuerpos de ideas sistemáticas para comprender ese fenómeno y enrumbarlo por caminos predecibles y conscientes.<br /><br />Omar Dengo, por ejemplo, afirmaba vehementemente que la educación no podría ser jamás como el vientre de una mula, porque esa educación no es capaz de dignificar ni concebir nada. Nótese, en esta analogía, que el maestro clamaba por una educación como proceso de liberación y de esperanza, una educación como sinónimo y expresión de vida. Se puede inclusive especular acerca de una concepción de la educación deificadora, capaz de concebir vida positiva y perfectible: dar a LUZ. En esta concepción la educación es un parto.<br /><br />El célebre francés Emile Durkheim afirmó, hace más de cien años que la educación es la socialización de las jóvenes generaciones a través de la experiencia de las generaciones adultas, es decir; la educación es el hecho social concreto de transmitir la información que las generaciones mayores han acumulado y sistematizado para que las nuevas la asimilen y la adopten.<br /><br />Para el educador ruso Antón Semiónovich Makárenko, la educación es un hecho social concreto, que se ejecuta lejos de las abstracciones metafísicas y debe servir para organizar al ser humano y ayudarlo a integrarse positivamente a la sociedad; para construir el progreso de todos. Su Poema Pedagógico es una teoría sobre la educación que canta al ser humano integral, ligado a la sociedad y luchando por humanizarla y transformarla en un emporio de justicia.<br /><br />El maestro ucraniano Vasili Sujomlinski, en su obra “Mi corazón es para los niños”, clama por una educación que sea un acto de amor; amor real por lo que hacemos, y, fundamentalmente, hacia quienes de manera temporal son nuestros discípulos.<br /><br /><br /><br /><strong>La justicia:</strong><br /><br />Afirma el Presbítero Mauricio Víquez, en su ponencia al Congreso Universitario de la Universidad Católica que “(El) reino de Dios (en cuanto utopía y siempre como un ir de menos a más) es el horizonte y finalidad de toda actividad cristiana, personal e institucional; y lo es también de la universidad”<a title="" style="mso-footnote-id: ftn1" href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=1238085322738144694#_ftn1" name="_ftnref1">[1]</a>. Así ella ha de tener claro que está en función de ese reino y no de sí misma. Es instrumento de denuncia y de desenmascaramiento de todo lo que resulte ser antirreino y ello mediante el correcto direccionamiento de todas y cada una de las actividades propias del ambiente universitario”.<br /><br />Desprendemos de esta reflexión anterior, que la Justicia es inseparable del acto formador, porque la construcción del Reino de Dios debe ser el propósito y la meta de todos los educadores cristianos. Ese Reino se construye o edifica desde nuestra espiritualidad y se proyecta dentro de las aulas y las sobrepasa. Hacer educación es hacer justicia. Dar educación es dar justicia. Dar justicia es construir paz.<br /><br />Su Santidad, Juan Pablo Segundo, nos convocaba a construir la “Globalización de la Solidaridad” frente al egoísmo materialista del mercado sin límites; deshumanizado y aliado no de la promoción de la dignidad humana, sino de la destrucción de la VIDA. Y nuestro actual Obispo de Roma, recalca que el capitalismo no es el único modelo válido de organización económica y que el problema del hambre y el ecológico existentes evidencian con claridad que la lógica del beneficio “incrementa la desproporción entre ricos y pobres y la ruinosa explotación del planeta.” Entre otras cosas señala, que el dinero per se “no es deshonesto”, pero que si lo valoramos más que a otras cosas, “puede llevar al hombre al egoísmo ciego”. Aquí se trata, subraya, de usarlo “no sólo en interés propio, sino en interés de los pobres imitando a Cristo.”<br />El Papa manifiesta, que acerca del tema de la riqueza y de la pobreza, se confrontan dos lógicas económicas: la del beneficio y la de la distribución ecuánime de los bienes, que no estarían en contradicción, necesariamente, siempre y cuando sus relaciones “estén bien ordenadas”. (periódico La Prensa Libre, lunes 24 de septiembre de 2007)<br /><br />Esta advertencia de Benedicto XVI se da precisamente en el marco de una coyuntura mundial en la cual, las poderosas fuerzas del mercado capitalista pretenden imponer a los pueblos de la tierra, esa lógica egoísta y anticristiana que el Santo Papa denuncia.<br /><br />En la tarea de entronizar la justicia en el campo de la educación institucionalizada, se manifiesta necesariamente, un “compromiso con la construcción del proyecto – país, inspirado en los principios del humanismo cristiano, esto a partir de la convicción de que solo en Cristo encontramos la verdad plena sobre lo que el ser humano está llamado a ser”, de acuerdo con expresión del Presbítero Mauricio Víquez.<br /><br />La justicia es trabajar para que el ser humano haga cotidianamente todo lo contrario a lo que denuncia el Profeta Amós. No existe otra para los Seres Humanos. No se trata exclusivamente de la práctica de la compasión, sino de la correcta aplicación de la Ley Justa, y esa Ley es la que emana del Amor y de la misericordia de nuestro Creador.<br /><br />Para los educadores cristianos, católicos o no, no existe otra alternativa: al amar al prójimo como a sí mismos pensamos justicia, practicamos justicia, propagamos la semilla del Bien Común. No hay otra manera de hacerlo.<br /><br />Un mundo que cifrara sus expectativas en el dios falso del dinero, es un mundo ciego, y su destino es el imperio de la injusticia. Ese mundo, insensible por demás, destruye la dignidad del Ser creado a imagen y semejanza de la Perfección. Si ese mundo está en manos de aquellos que convocan a sembrar cizaña, a propagar el miedo como forma de conducir pueblos, fomentan el odio y la división, el sentido cristiano llama a destronarlos.<br /><br /><br />No hay justicia sin distribución equitativa de los bienes. Y el problema de la injusticia no se deriva de la pobreza sino de la riqueza. Es la desproporción social la que da como resultado la enajenación, el hambre, el dolor lacerante; en concreto, ella es la que da como resultado a los Lázaros que mientras esperan las migajas del banquete de los enamorados de la gula, sólo reciben los lengüetazos de los perros miserables.<br /><br />El Justo…<br /><br />“Levanta del polvo al desvalido, alza de la basura al pobre, para sentarlo con los príncipes, los príncipes de su pueblo.”<br /><br /><strong>Relación conclusiva</strong><br /><br />La educación y la justicia social están íntimamente ligadas, van de la mano si su propósito es la liberación del Ser Humano. Hemos tratado de mostrar que durante su desarrollo, los pensadores de diversas épocas y territorios, han concebido a la educación como un proceso integral para engrandecer a las personas. Sus propuestas van encaminadas hacia la consecución del Bien Común. No se debe cometer el error de convertir las instituciones educativas en simples fábricas reproductoras de “materia” muerta. También es responsabilidad compartida de las y de los educadores cristianos católicos, asumir ese proceso completo: transmitir contenidos buenos y atizar el fuego de los valores derivados de la ética formulada por el Maestro Jesucristo. Somos Educadores y Educadoras para la concreción de la Justicia. La injusticia esclaviza y denigra. La justicia libera y ennoblece.<br />La educación en justicia y para la justicia social denuncia, anuncia y renuncia. Denuncia las desproporciones sociales. Anuncia la certeza de la construcción del Reino del Amor. Renuncia a la esclavitud de promover un proceso que domestica y lastima la Dignidad humana. Es eufórica porque se forja en el Credo de la Felicidad que otorga el aceptarse Hijo de Dios, Hermano de Jesucristo; es decir, compañero de la máxima Expresión de la Justicia. Es la educación que posibilita atar a ese diosecillo diminuto del egoísmo para darle paso a la construcción efectiva de la Solidaridad.<br />La educación y la justicia social deberán ir siempre de la mano, y es humilde, porque entre más sabio es quien educa desde la Verdad del Padre, más claro tiene que su deber es servir de puente para evadir los abismos que construye la injusticia.<br /><br />“Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís bien, porque lo soy. Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros. Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis.”<br /><br />¡Mayor responsabilidad y honor es difícil encontrar entre los oficios profesionales: denunciar, anunciar y renunciar!<br /><br /><br />Nota: para escribir este ensayo la bibliografía que se utilizó es la del corazón, el conocimiento y la memoria; salvo las Sagradas Escrituras.<br /><br /></div><a title="" style="mso-footnote-id: ftn1" href="http://www.blogger.com/post-create.g?blogID=1238085322738144694#_ftnref1" name="_ftn1"></a>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-35083177014452682992007-11-17T20:08:00.000-08:002008-12-11T15:41:37.948-08:00Una Cantaleta necesaria y urgente<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhzvIWWDrS5Kly4RENfRC_-vrZeFa1FdYPVbL_fezdZ_kJ6kiIL12bbuu56Sdn3fyYAkCg0HSBZDJ5X8JmygBUthRG1az2aBIhbv-DPMOt-06d1PBslq7M2TxVbSV8NcebacIrkdBenKQg/s1600-h/P1010137.JPG"><img src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhzvIWWDrS5Kly4RENfRC_-vrZeFa1FdYPVbL_fezdZ_kJ6kiIL12bbuu56Sdn3fyYAkCg0HSBZDJ5X8JmygBUthRG1az2aBIhbv-DPMOt-06d1PBslq7M2TxVbSV8NcebacIrkdBenKQg/s320/P1010137.JPG" border="0" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5134028561693192722" /></a><br /><div align="justify">Cuando crecíamos al calor de las costumbres familiares y hogareñas, existía una excelente: ¡Escuchar la Radio! Sin ella, nuestras vidas habrían sido insulsas. Así de sencillo, la Vida era más Bella con un aparatito llamado Radio que sonaba todo el día. Claro que había momentos o programa especiales que reunían a toda la Familia, y otros que reunían, o bien a los mayores o bien a los más chicos o jóvenes. Ese aparatito era parte de la casa, como el perro o el gato; o quizás más bien, como el perico o la lora donde los había. Sin radio el mundo habría sido diferente, aburrido y analfabeto; oscuro y oscurantista. Todos chineábamos con esmero a ese miembro más de la familia, y esto se reflejaba en varios detalles, y como aseguraba mi vieja amiga Virginia Grütter, la cultura y la cortesía están bordadas de pequeños detalles. Se tenía una repisa especial para colocarlo en un lugar muy visible, al alcance de los mayores o de los que ya habían alcanzado una estatura respetable; al lado se colocaban flores artificiales o adornos diversos, y como si fuera poco, la abuela o la madre habían bordado algún tapetito delicadamente con su manos trabajadoras y se usaba para cubrirlo y así protegerlo del polvo y de otras inclemencias del tiempo y del medio. Así era la vida del radio. Nuestras vidas son lo que son, en gran medida, por la influencia de los Programas que se transmitían por aquellas ondas y llenaban el Hogar de voces y cantos todavía entrañables en el recuerdo.<br /><br />Pasaron los años, y la radio siguió siendo un Poder. Entra a nuestras casas, a nuestras oficinas, a las iglesias, a los establecimientos comerciales y ahora hasta a los vehículos estacionados o rodantes. Continúa siendo una Reina ataviada de perillas o botones y se manipula de múltiples formas: con todo el esfuerzo de los dedos o tan sólo con la delicadeza de sus yemas; y hasta se puede realizar su operación a distancia o a control remoto. La radio jamás será destronada. Su presencia es para siempre. Su lugar es la primera fila.<br /><br />Hoy han surgido y operan otros medios de comunicación, algunos muy sofisticados, por ello es corriente escuchar a las personas de las generaciones del segundo medio siglo pasado para acá, decir que deberán llevar algún curso para poder sintonizar tal o cual Radioemisora. Pero aún y así, con estas limitaciones que nos impone el desarrollo tecnológico, la radio será la opción más democrática para que el Ser Humano exprese sus estados de ánimo, sus conocimientos y sus inquietudes. La Radio es democracia, y siempre que ha sido utilizada para compartir y para educar, ha logrado fortalecerla.<br /><br />Por todo lo anterior, recordamos programas que jamás perecerán: “Doña Chona y Don Tranquilino, Olegario Mena, Pomponio Tortas, el Latazo, el Hombre de las cincuenta voces, el Ja ja del aire, La Patada y otros que fueron la delicia y el pan casi cotidiano de todos los barrios populares. Todos ellos lograron conformar una idiosincracia realmente tica, cuyo resultado ha sido la consolidación de una forma de ver la realidad desde ángulos muy variados, cuyo eje siempre fue el auténtico humor costarricense. Y ese humor ha hecho de la vida cotidiana algo más llevadero y aceptable; aún y con los múltiples problemas que nos aquejan como Sociedad volátil y cambiante. Nuestro país sería menos nación si ellos no hubiesen existido.<br /><br />Bueno, y no menciono adrede entre los primeros citados con anterioridad, a la Cantaleta de los Hermanos Grosser, porque para mí este merece unas líneas especiales no sólo por su calidad formal, sino por su profundidad conceptual y de contenidos. Para referirse a este singular y original Programa, debemos pensar no únicamente en el talento de sus creadores, sino y más allá de ello, en la versatilidad que ellos le saben imprimir a sus personajes y a los diálogos y monólogos que viajan por el espacio hasta el deleite de los costarricenses privilegiados que los recibimos en nuestros hogares con los brazos abiertos…o más bien, con los oídos despiertos.<br /><br />La Cantaleta ha sido un programa maravilloso, capaz de suscitar en uno diversos sentimientos ciudadanos. Me atrevo a asegurar que ha sido una Cátedra Popular, y probablemente sea una de las pocas en el mundo, sino la única. He tenido la oportunidad de conversar con muchos amigos del exterior acerca de este tema, y sorprendentemente la información que recojo es que en sus países no existen programas de esta naturaleza. Cuando les relato y reproduzco de acuerdo con mi memoria, programas casi completos por los temas abordados, su hilaridad y sus lágrimas afloran como goteras en techo de Aguantafilo. Simplemente, no pueden creer que un espacio así exista en la radio, porque su Historia como pueblos se ha visto golpeada por la intolerancia y la reducción ideológica; o simplemente por la simpleza de que una escala de valores prepotente, sesga a los demás y a los otros la posibilidad de crecer espiritualmente, escuchando al artista que se despelleja el Alma para rellenar los cráteres de nuestras lunas internas tristes de una argamasa de creatividad, capaz de encender al más apagado.<br /><br />Con la Cantaleta no sólo reímos y carcajeamos, también botamos lágrimas que la realidad cara de perro nos obliga a acumular durante toda la semana. Afirmo que si este Programa fuera cotidiano, en Costa Rica existirían menos penas; es decir, menos violencia intrafamiliar que llaman ahora, menos rencor, menos tristeza, menos golpes sobre la mesa o sobre las caras, menos accidentes fatales de tránsito; menos gritos y gestos amenazantes. Existiría digo, más vida sonriente y más ganas de entrarle al Mundo con ganas de vivirlo y vivificarlo. La Cantaleta rehace la vida nacional y la torna más alegre: en términos del Pedagogo brasileño Paulo Freire, la re - danza, la re - pinta, la re – actúa y re - canta.<br /><br />No ha existido un Programa Radial en Costa Rica que le permita al ciudadano “conversar” con sus Ex Presidentes y Presidentes, con sus Diputados y Ministros, con entrenadores de futbol y jugadores, con Artistas nuevos y viejos; ausentes y presentes. La Cantaleta nos da ese honor y ese solaz pedagógico al interactuar con personajes de carne y hueso que el pueblo identifica plenamente; queriendo a algunos y rechazando a los otros; siempre con mucho respeto. Podemos conversar con el Pachuco o Chucopa, y al mismo tiempo, esperar de vuelta el saludo de un ex Presidente de la República haciendo bromas interactivas con sus ex gobernados.<br /><br />Es un Programa eufórico, es decir, es asertivo, proactivo y propositivo. Todo lo anterior significa, simplemente, que es alegre e irradia esa alegría sin egoísmo ni cálculo. Lo único que calcula es a quién y cómo asestará el golpe que atonte socialmente para despabilar la Historia Patria y la personal. No es un Programa inocente, no, es un Programa consciente. Sabe cuáles son su metas y sus propósitos ineludibles y eso lo escuchamos en la voz de sus personajes. Por ejemplo, miles de costarricenses podríamos pintar una imagen de Doña Esperanza, y de seguro esa sería similar en cada barrio; de hecho, a partir de su creación cantaletesca, existen muchas señoras así bautizadas en los barrios gracias al imaginario colectivo o personal de sus oyentes y fiebres.<br /><br />Destaco, finalmente, no porque no haya más asuntos que destacar en relación con este prodigio de creatividad, sino por asuntos de espacio, el inmenso talento de sus creadores. Ellos se nos revelan como múltiples profesionales, polisémicos y polifónicos enriquecedores de una enunciación popular sin límite: son sociólogos, psicólogos, antropólogos, historiadores, politólogos, trabajadores sociales, pedagogos y hasta adivinadores. Esa es la maravilla que hace posible crear un Programa de esas dimensiones y de ese calibre profesional.<br /><br />Un amigo mío graba el Programa para luego continuar escuchándolo durante toda la semana, y además, los colecciona para animar las fiestas familiares. Viaja a su trabajo, y mientras cruza por esos campos de batalla que llamamos eufemísticamente carreteras nacionales, los escucha para sentir más deseos de vivir alegremente y eufórico. Imitándolo, conseguí algunos Programas grabados y los envié a Suramérica y a Europa, para deleite de nuestros compatriotas en el extranjero y de sus amigos hispano parlantes. Sin lugar a dudas son poquísimos los artistas que pueden lograr esto en el mundo de hoy, y los Cantaletos lo logran con suma facilidad para sus oyentes. ¡Hasta en eso es democrática la Cantaleta!<br /><br />Nuestra vida democrática se enriquece y fortalece con la existencia de este Teatro Popular que escuchamos por la radio, porque nos educamos como ciudadanos que escuchamos la crítica, la sorna, el chascarrillo y la burla simpática, con naturalidad y serenamente. El único precio posible es reír hasta desternillarse y arratonarse las sienes de batir las mandíbulas. ¡Hasta los alimentos caen mejor escuchando la Cantaleta! Porque la risa sana ayuda a lograr una mejor digestión.<br /></div><br />¡Larga vida a la Cantaleta y a sus Cantaletos!<br /><div align="justify">¡Larga vida a los Hermanos Grosser!<br /><br /><div align="right">San Isidro de Heredia, octubre de 2007 <br /></div></div>Unknownnoreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-88268767892204317662007-10-15T22:22:00.000-07:002007-10-15T22:25:53.437-07:00¡Aquí estoy... Patria!<i>¡Ay Patria… aquí estoy!<br />Con una bomba de lágrimas haciéndome olas<br />en el pecho…Intacto Incólume Inamovible… Invencible.<br /><br />Caminando erguido por las calles y callejas de mi pueblo,<br />Invadido de sonrisas colgando de mis labios,<br />Repartiendo besos dulces y macizos.<br /><br />Orgulloso, hoy me proclamo Zurquí colosal,<br />Irazú en reposo,<br />Chirripó total,<br />Patriota duro.<br /><br />¡Ay Patria!<br />Ya NO caerás más en manos sátrapas:<br />¡ Jamás habías encontrado tantos hijos amorosos ¡<br />¡ Jamás habías encontrado tantas hijas valerosas ¡<br /><br />Siento en lo más oscuro de mi CORAZÓN<br />esa LUZ de amor que tanto Pueblo<br />me encendió en el pecho.<br /><br />Digno hoy me Erizo…<br />Encendido por la Antorcha<br />definitiva de la Historia:<br />Digno hoy, ante tus Pechos me arrodillo.<br /><br />¡Aquí estoy…Patria,<br /> Amiga<br /> Amor<br /> Madre<br /> Compañera!<br /><br />Aquí estoy,<br />No temas por favor…<br />Te aseguro que con la ROSA más bella de estos montes<br />estaré en tu puerta vigilando. Descansa amor un rato,<br />descansa que ya vamos llegando.</i><br /><br /><div align="right"><i><span style="font-size:85%;">Claudio Monge</span></i><br /></div>Unknownnoreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-1238085322738144694.post-1662475407826134202007-10-15T22:00:00.000-07:002008-12-11T15:41:38.078-08:00La Universidad, la Acción Social y nosotros<a onblur="try {parent.deselectBloggerImageGracefully();} catch(e) {}" href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjhfSnfe6kCEdC5M2YCCIXxex3FDMxzcWQ6AAo0Ck9N6YcZEs3RPJZAVYwdKIh2siErxeUk4gyjpdnzO3Z9KR8htS1QfCWmQ8ZN1RaOsz5w3THumw73WXT7ENGNsTFGcsfi_qZxfXFSMdU/s1600-h/P1010017.jpg"><img src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjhfSnfe6kCEdC5M2YCCIXxex3FDMxzcWQ6AAo0Ck9N6YcZEs3RPJZAVYwdKIh2siErxeUk4gyjpdnzO3Z9KR8htS1QfCWmQ8ZN1RaOsz5w3THumw73WXT7ENGNsTFGcsfi_qZxfXFSMdU/s320/P1010017.jpg" border="0" alt="" id="BLOGGER_PHOTO_ID_5121798000680158610" /></a><br /><div align="justify">El Mundo se debatía entre la oscuridad dogmática y sectaria y la pujanza de millares de personas valerosas que propugnaban la Luz del Conocimiento. Pero no había debate: era más o menos una lucha de burro amarrado contra tigre suelto, porque la Oscuridad ostentaba el poder absoluto, y además, sus ostentadores se creían o hacían creer a los demás que este emanaba de un mandato Divino. Por eso, aquellos y aquellas valerosas personas que luchaban con denuedo porque creían que otro mundo era posible, sufrieron la calumnia, el chantaje, le extorsión, la amenaza del miedo, la siembra de cizaña, la persecución y hasta la muerte.<br /><br />Aquel mundo de oscuridad se asentaba en relaciones desiguales y desproporcionadas: los intimidadores y redactores de mandatos vivían en la opulencia y la bacanal, y los valerosos eran la voz y el puño de las inmensas mayorías explotadas y humilladas. En esa época de la temprana Edad media, la sociedad estaba totalmente fragmentada debido a la arrogancia, la prepotencia y el abuso de poder por parte de esa clase social que se hartaba con manteca frente a un pueblo indefenso y hambriento. Aquí vale la pena recordar la famosa frase antigua, que pareciera no envejece: “EL PODER CORROMPE, Y EL PODER ABSOLUTO, CORROMPE ABSOLUTAMENTE”.<br /><br />Eran propietarios de todo: la economía, la explotación, los medios de comunicación, la iglesia y hasta de Dios. Los otros, las mayorías, eran sólo dueños de la miseria y de la injusticia.<br /><br />Muchas personas valerosas, mujeres y hombres, experimentaron la muerte bajo tortura oculta o pública, para escarmiento de las multitudes. Pagaron con sus vidas y las de sus familias, el deseo de construir un mundo mejor: de justicia, fraternidad y amor. Su sueño de ver la Luz iluminando al Mundo, tuvo que pasar por un martirio indescriptible e inhumano. El poder del oscurantismo se asentaba sobre montañas de huesos y de sangre. Aquellas y aquellos CORAZONES VALIENTES ofrendaron su trabajo, sus esfuerzos, sus escasos recursos y hasta sus vidas para demostrar que un mundo justo y noble se puede construir.<br /><br />Entonces, en ese contexto nace la UNIVERSIDAD, precisamente como aquel espacio nuevo que permitirá a la Sociedad dar un giro hacia la LUZ del conocimiento y de la VERDAD. Se plantea entonces un nuevo paradigma para el mundo con este NACIMIENTO: la UNIVERSALIDAD. Es decir, el espacio donde el DEBATE es regla y norma, donde los saberes se despojan de los grilletes de la ignorancia y la ignominia. Desde ahí se construirán nuevas formas de concebir el mundo y se ofrecerán alternativas para demostrar que el DESARROLLO de la sociedad se puede lograr sin odiosas exclusiones; estableciendo modelos alternativos dentro de los cuales todas y todos caben sin expulsiones; inclusive los piromaniacos que disfrutaban del olor a carne humana quemada. Aquellos, probablemente sean los antepasados de los que siglos después siguen creyendo que desatando el miedo, promoviendo el chantaje y sembrando la cizaña, se pueden eternizar en el poder materialista y anticristiano del Mercado Salvaje.<br /><br />Así, entonces, la UNIVERSIDAD deviene en espacio para pensar libremente, para descubrir las respuestas a las interrogantes que apremian al ser humano, para convertirse en CONCIENCIA LÚCIDA de la sociedad, para acompañar con su lámpara al pueblo en su desarrollo.<br /><br />Hoy no podría ni debería ser diferente, porque se estarían pisoteando las nobles ideas y el sacrificio de sus fundadores, toda vez que aquellos que desconocen su origen construyen castillos sobre bases de arena. Esto ha quedado demostrado a través de la Historia de América Latina, donde las Universidades han sido las víctimas de la fuerza bruta, siempre que se han impuesto los regímenes de facto o inconstitucionales.<br /><br />Las universidades no pueden ni deben transformarse en fábricas de conocimientos secos y estáticos, porque eso las des – liga de su esencia:<br />re – ligarse a la LUZ del conocimiento que conduce a la libertad del ser humano. Aquellos lugares donde se imprimen títulos para venderse no son Universidades, son mercados que autorizan a cualquiera para que siga como GUÍA CIEGO por el mundo. Por eso, los ejes fundamentales de una Casa Superior de Estudios, deberán siempre girar alrededor de la espiral ascendente que conduce al desarrollo con justicia social y libertad.<br /><br />En diversos documentos he investigado acerca del origen y los propósitos de la Universidad Católica de Costa Rica, y partiendo de la premisa que aquí todos conocen este asunto, me atrevo a expresar algunas opiniones conducentes a dar una visión externa y franca; una opinión de amigo.<br /><br />Reza uno de los documentos que consulté que la Universidad Católica de Costa Rica no puede ni debe ser “una Universidad “otra”, y como para el buen entendedor pocas palabras bastan, yo comprendo que esta máxima es clave para comprender que los fundadores de esta Casa Superior de Estudios, no querían otra más, sino una NUEVA y DIFERENTE, re – ligada a la VERDAD que nos hace libres, al CONOCIMIENTO que nos arma para desentrañar la mentira y a la JUSTICIA que es la meta de todo cristiano católico. Los fundadores no querían una fábrica de monedas, sino una CASA DE LUZ para liberar.<br /><br />Entonces, su Proyecto Pedagógico debe ser diferente: renovador, denunciante y anunciante, es decir, que denuncia, anuncia y renuncia. Es un proyecto de FE y de ESPERANZA que se fundamenta en la Doctrina del Cristianismo. No se quedará en la simple transmisión mecánica del conocimiento seleccionado adrede, sino que promoverá la adquisición de un saber justo y noble. Ese saber es Aquel que forma a seres humanos completos, que serán capaces de denunciar ese mundo disparejo y feo que otros han construido para salvaguardar sus privilegios y desafueros y que a su vez golpea toda dignidad humana, pero que no se estaciona ahí. Ese nuevo Profesional ANUNCIA, es decir, propone asertivamente alternativas para destronar la injusticia y se inserta en la construcción del REINO que se asienta en el AMOR. Significa esto, que quien escoge formarse en esta Universidad sabe, o debería saber, que esa decisión en gran medida lo obliga a renunciar a su participación en la construcción de un mundo desigual e injusto; un mundo desproporcionado y desagradable para un cristiano católico que conoce y practica el MANDAMIENTO MAYOR.<br /><br />Interpreto que esto es lo que convoca para plantear las afirmaciones que leo a continuación:<br /><br />“Excelencia es así la única clave en la que debemos expresarnos y la única vía posible para ser fieles a la historia y para ser auténticamente contemporáneos a nosotros mismos.”<br /><br />“La Universidad Católica, comprendida de modo general, es una comunidad académica que garantiza de forma institucional la presencia cristiana en el mundo universitario y que deja ver algunas características como las siguientes: está animada por una inspiración cristiana que la marca y la caracteriza, es siempre capaz de la reflexión madura y rigurosa a la luz de la fe católica sobre el creciente tesoro del saber humano, es siempre fiel al modo en que la Iglesia transmite la revelación y está al servicio de la humanidad para recordarle de modo constante su fin último.”<br /><br />“Es un lugar desde el que la realidad se busca comprender; un centro que busca la verdad y que se anima cotidianamente de cara a la integración de los saberes para que así y desde ellos, promover el diálogo fe – razón y sostener la importancia de hacer valer la prioridad que merece lo ético, la causa del ser humano y su condición de ser abierto a lo infinito.” (subrayado y negrita propios)<br /><br />Y partiendo de esta caracterización, la UCA de CR:<br /><br />“Está llamada a ser luz permitiendo que la confluencia de esa verdad con la justicia sea gestora de libertad, pero de una libertad auténtica en la que cada persona – acercándonos a los principios que en su momento expusiera Rawls - tenga su lugar y un acceso real a ser lo que se debe desde el ejercicio de una ciudadanía rica en posibilidades apreciables.” (subrayado propio)<br /><br />Les pregunto: ¿Es esta la Universidad que ustedes están viviendo hoy?, ¿Es esta la Universidad que Ustedes escogieron para formarse?, ¿Es esta la Casa Superior de Estudios que Ustedes ayudan a construir desde su Compromiso Cristiano?, ¿Es esta la Universidad que por su esencia los compromete para asumir sus obligaciones como Profesionales Guerreros de la Justicia?, ¿Ayudarán a construir el Reino una vez formados y titulados?<br /><br />El pasado domingo, cuando disfrutaba la Santa Eucaristía, pensaba en este momento, al escuchar la Profecía de Amós (8, 4-7): “Escuchad esto, los que exprimís al pobre, despojaís a los miserables, diciendo: “¿Cuándo pasará la luna nueva para vender el trigo, y el sábado, para ofrecer el grano?” Disminuís la medida, aumentáis el precio, usáis balanzas con trampa, compráis por dinero al pobre, al mísero por un par de sandalias, vendiendo hasta el salvado del trigo. Jura el Señor por la gloria de Jacob que no olvidará jamás vuestras acciones.” (Palabra de DIOS)<br /><br />¿Acaso puede, una o un profesional cristiano, desoír la Palabra de Dios y sentirse bien en el ejercicio de su conocimiento? Esta pregunta me obliga a formular otra: ¿Puede un ser humano formado y titulado en esta Universidad, ser un misionero de la INDIFERENCIA?<br /><br /><br />Mi Fe y mi ESPERANZA me responden ¡NO!<br /><br /><br />Mi Corazón y mi Razón me obligan a concluir que ustedes dicen NO a ese mundo descrito por el Profeta Amós.<br /><br />Afirma el Presbítero Mauricio Víquez, en su ponencia al Congreso Universitario:<br /><br />“(El) reino de Dios (en cuanto utopía y siempre como un ir de menos a más) es el horizonte y finalidad de toda actividad cristiana, personal e institucional; y lo es también de la universidad” . Así ella ha de tener claro que está en función de ese reino y no de sí misma. Es instrumento de denuncia y de desenmascaramiento de todo lo que resulte ser antirreino y ello mediante el correcto direccionamiento de todas y cada una de las actividades propias del ambiente universitario”. Y agrega esto que para mí, es la esencia de la ACCIÓN SOCIAL de la Universidad:<br /><br />“Esta conciencia instrumental de la Universidad Católica la hace realista y servidora, también, una institución que conoce el gozo de sentirse seguidora del ideal cristiano con todas sus aristas. Sólo así tendrá conciencia clara de ser lugar de sentido, esto es, que resulta capaz de marcar nortes en medio de una sociedad que, como la nuestra, lo ha perdido desde hace tiempo.<br /><br />Debe ser consciente también de todo lo que parece ser contrario al esfuerzo para que “la vida humana sea cada vez más humana”, para que todo lo que compone esta vida responda a la verdadera dignidad del hombre.<br /><br />Las Universidades en general y la Universidad Católica en particular, en cuanto agentes de humanización, deben sentirse invitadas –si desean ser consecuentes con sus mismos orígenes - por unos principios humanistas que las lancen a ser protagonistas en la construcción del proyecto ético global que ha de surgir y que ha ser capaz de poner al ser humano en el lugar que le corresponde y que nunca debió perder. El quehacer universitario en el seno de una Universidad no puede bajar la guardia ni apagar el espíritu que le es propio de frente a un entorno marcado por sombras diversas que constantemente atentan contra la dignidad y vocación del ser humano.” (subrayado propio)<br /><br />Su Santidad, Juan Pablo Segundo, nos convocaba a construir la “Globalización de la Solidaridad” frente al egoísmo materialista del mercado sin límites, deshumanizado y aliado no a la promoción de la dignidad humana, sino a la destrucción de la VIDA. Y nuestro Obispo de Roma, hace tan sólo tres días recalcó que el capitalismo no es el único modelo válido de organización económica y que el problema del hambre y el ecológico existente evidencian con claridad que la lógica del beneficio “incrementa la desproporción entre ricos y pobres y la ruinosa explotación del planeta.” Entre otras cosas señaló, durante el Rezo del Ángelus, que el dinero per se “no es deshonesto”, pero que si lo valoramos más que a otras cosas, “puede llevar al hombre al egoísmo ciego” Aquí se trata, aseguró, de usarlo “no sólo en interés propio, sino en interés de los pobres imitando a Cristo.”<br /><br />El Papa manifestó que acerca del tema de la riqueza y la pobreza se confrontan dos lógicas económicas, la del beneficio y la de la distribución ecuánime de los bienes, que no estarían en contradicción, necesariamente, siempre y cuando sus relaciones “estén bien ordenadas”. (periódico La Prensa Libre, lunes 24 de septiembre de 2007)<br /><br />Esta advertencia de Benedicto XVI se da precisamente en el marco de una coyuntura mundial en la cual, las poderosas fuerzas del mercado capitalista pretenden imponer a los pueblos de la tierra, esa lógica egoísta y anticristiana que el Santo Papa denuncia.<br /><br />Entonces, traigo a colación la introducción que hice acerca del origen de las Universidades, que surgen justamente para derrotar esa misma lógica del materialismo, la lujuria y la decadencia social. Esto nos indica que toda la actividad de la Universidad debe girar alrededor del eje de la Justicia: su investigación, su docencia y su proyección social. Como afirma el Presbítero Mauricio Víquez, esta Universidad debe ser… “un centro capaz de formar profesionales “hombres y mujeres para los demás y con los demás (…) `competentes, conscientes, compasivos y comprometidos`”<br /><br />“Es claro que la Universidad Católica, para ser de verdad “otra”, ha de sentirse impelida por una grave exigencia a soñar con un mundo que sea más comunidad y menos aldea, un mundo más movido por la responsabilidad que por el egoísmo, un mundo más atento al futuro y a los que están aun por venir.”<br /><br />Visto así el panorama nacional y mundial, y pensando en las exigencias y las obligaciones de una Casa Superior de Estudios de este calibre, la acción social debe siempre orientarse hacia la consecución del BIEN COMÚN por encima de todo egoísmo insostenible. Asumir el compromiso cristiano siempre, en todo lugar y a toda hora. Soy y existo por el Prójimo. Conozco a quién nos ha señalado el Camino y la Verdad. Lucho por la construcción de la VIDA, y esta, sin la meta de contribuir a la edificación del Reino de Dios, no tendría sentido para los profesionales de nuevo cuño.<br /><br />Concuerdo con el autor de estas frases:<br /><br />“Se trata de una empresa de servido al Reino que requiere de dos ingredientes esenciales: Dios y audacia.”<br /><br /><br />“La Universidad no puede estar satisfecha formando profesionales, debe saber que es universidad en contexto, llámese país, llámese humanidad. La institución debe sentirse de lleno constructora de un proyecto país, de una sociedad de justicia social , idea que brota de la convicción de que en Costa Rica aun tenemos muchas tareas pendientes. Esto será capaz de dar orientación y coherencia a todo el trabajo intelectual que se realice en nuestras aulas.”<br /><br /><br />Esta Universidad es depositaria de centurias de conocimiento y experiencia, lo cual debe aprovecharse al máximo para que su quehacer general y su proyección social hoy, sean acordes con el contexto actual. Si las fuerzas del egoísmo empujan a cualquier precio un mundo de exclusiones, los profesionales de esta Institución deberán sumarse con sus conocimientos al trabajo que defiende la dignidad del ser humano y la Vida por encima de jugosos capitales que deprimen el Espíritu y fomentan la miseria humana. Se debe asumir el…<br /><br /><br /><ul><li>Compromiso con la construcción del proyecto – país, inspirados en los principios del humanismo cristiano, esto a partir de la convicción de que solo en Cristo encontramos la verdad plena sobre lo que el ser humano está llamado a ser.</li></ul><ul><li>Compromiso con la forja de hombres y mujeres plenos, es decir, nuestra mirada sobre el ser humano es integral, y en la Universidad nos abocamos a la tarea de formar personas, no profesionales. <br /></li></ul><br />Por ello…<br /><br />“Es bueno recordar que los egresados de estas aulas deben tener una verdadera pasión por la justicia, procurando crear con todo su empeño una sociedad más justa, solidaria y humana. Por eso es indispensable que se estudien los mecanismos que generan la injusticia y que se tenga contacto real con los marginados, con los más pobres y con los que más sufren… con la verdad de nuestro país.”<br /><br /><br />Hoy, la Patria nos convoca a decidir qué tipo de Sociedad queremos: una inclusiva y solidaria o una excluyente y egoísta; y en esta coyuntura, la acción social de la Universidad debe conducir a la concreción de los principios y fundamentos que aquí hemos esbozado y que se pueden concretar con una de las bellas expresiones del Salmo 112:<br /><br /><br /><br />“Levanta del polvo al desvalido, alza de la basura al pobre, para sentarlo con los príncipes, los príncipes de su pueblo.”<br /></div><br /><br /><div align="right"><i><span style="font-size:85%;">Claudio Monge Pereira<br />San Isidro de Heredia, septiembre de 2007.</span></i><br /></div>Unknownnoreply@blogger.com0